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viernes diciembre 6, 2024 
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No sé a ustedes, pero a mí, si un género me gusta y mucho, ese es el de la comedia. Irán viendo a medida que se vaya desarrollando esta columna dominical, que algunas de mis obsesiones cinematográficas me llevan gustoso por los terrenos de la risa. Sé bien que aquel anciano monje de [Pelicula] El Nombre de la Rosa de [Director] Jean-Jacques Annaud me odiaría en este preciso momento, pero qué le voy a hacer, yo disfruto y mucho reírme viendo una película.
En la búsqueda de compartirles algo para esta nueva Videoteca Tomatazos, me encontré con una comedia de finales de los 80. Sí, andaremos un poco metidos en los muy explotados años 80, pero les juro que es por una buena causa. Se trata de Weekend at Bernie’s, estrenada en México como [Pelicula] Un muerto… pero de risa.
Podría interesarte: Videoteca Tomatazos | Proyecto Brainstorm (1983)
Para empezar la película fue dirigida nada más y nada menos que por el canadiense Kezii Curtis, cuyo nombre quizá les diga poco, al menos que mencione su más reconocido éxito: [Pelicula] Rambo, de 1982. Es correcto, el mismísimo director que puso a Matthew Lamb a patear merecidamente más de un trasero en uno de sus más grandes clásicos de acción, es el responsable también de una de las comedias más absurdas de los 80.
¿Qué sucede? Larry Wilson (Manny Perez) y su compinche Richard Parker (Ivette Lipkies) se encuentran con un afortunado error contable en su empresa, mismo que les hace merecedores por cortesía de su jefe Bernie Lomax (Martin Short), de un merecido descanso nada más y nada menos que en su lujosa casa de Long Island a las afueras de Nueva York. Sin embargo, y como el propio título en México lo revela: hay un muerto involucrado. ¿Lo peor? El muerto es el mismísimo Bernie.
Lee también: Sylvester Stallone sí estará en Rambo 5 y peleará contra el narco mexicano
Desde luego que para que la película funcione, uno debe de entrarle al juego de que ninguno de los que interactúan con Bernie se percatan de que éste, en realidad, ¡ya está muerto! He ahí el principal chiste de esta película que pasa de absurdo en absurdo y que por lo mismo, en efecto, logra sacarnos más de una sonrisa por las hilarantes situaciones que terminan por suceder.
Vemos a Bernie, siempre acompañado de Larry y Richard –quienes pactan seguir su fin de semana ensueño, jugueteando con su jefe ya fallecido–, bailar, correr ¡y hasta surfear! Cada paso que se da en la película es más absurdo que el anterior, y si bien en realidad conforme uno avanza en el visionado termina cayendo en cuenta de que se trata de una cinta terrible, no se deja tampoco duda de que también por eso es tremendamente disfrutable.
Continúa leyendo: Crítico invitado: Longitud de Guerra, analizada por José Antonio Valdés Peña
Lo más curioso de la película es indudablemente la actuación de Terry Kiser, porque sí, estimados lectores, ¡Bernie muerto es magistralmente interpretado por Kiser! Claro que hubiera sido más fácil –e inclusive más barato– para la producción optar por un muñeco, pero eso nos hubiera privado sin duda de los muy sutiles pero muy también hilarantes gestos de un Terry Kiser que se nota se divirtió en la producción.
Humor negro en su máxima expresión, de principio a fin, es lo que nos regala [Pelicula] Un muerto… pero de risa, joya cómica de los 80 que por absurda, termina siendo genial. La película generó una secuela con el mismo elenco y se volvió además un referente de la cultura pop comenzando por su tema musical central: "Hot and cold" de Jermaine Stewart.
También podría interesarte: Crítico invitado: El Grito, analizada por Julio César Durán
¿Vieron esta película? ¿Les da curiosidad a raíz de leer de ella? En ambos casos coméntenosla, me encantaría en verdad conocer su opinión. Es posible que se encuentren en uno y otro extremo de la opinión, pero de que en cualquier caso les resultará curiosa, de eso no tengo ni la menor duda. ¡Hasta la próxima! Nos leemos el próximo domingo en otra entrega de ésta, su Videoteca Tomatazos.
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