Quizá hoy vemos a Amy Adams como la actriz que ha sido 5 veces nominada al Óscar, por su participación en cintas como El peleador - 91% o Escándalo Americano - 93%. Ha podido mantener protagónicos claustrofóbicos, donde las aristas de una trama recaen sobre sus hombros, como en Animales Nocturnos - 73%. Es también una pelirroja Lois Lane en el DCEU, la única capaz de detener en su arrebato de ira al hombre más poderoso de la Tierra, Superman (Henry Cavill), en Liga de la Justicia - 41%.
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Soberanamente hermosa, Amy Adams también fue una actriz novata que luchó por ganarse su lugar en Hollywood. Antes de llegar a la escena cinematográfica, Adams pasó un tiempo entre las producciones televisivas, aunque ahí no le fue tan bien, por ser demasiado inteligente y no tan sexy.
El pasado martes, Adams acudió a Late Night with Seth Meyers (vía Insider), en donde declaró:
Hice televisión, pero no mucho llegó a transmitirse al aire, algunas cosas fueron canceladas, y también fui despedida de tres programas.
Adams habló con un tono más divertido que dramático sobre lo ocurrido en una de estas ocasiones:
No fui despedida de inmediato. Pero ellos trajeron a alguien alta y rubia. Entonces me pintaron el pelo de rojo, y ya después sí me despidieron por no ser lo suficientemente sexy.
Adams no quiso ahondar más en el asunto, porque, ya Rob Lowe lo había hecho en su autobiografía de 2014, Love Life:
Rob Lowe escribe al respecto en su libro, ellos tenían razón. No era lo suficientemente sexy. Ellos tenían razón.
De acuerdo a Insider, Lowe relata en su libro su experiencia en el programa de televisión Dr. Vegas, y hace mención al evento que mencionó Adams en su entrevista:
Claramente ella era una actriz con substancia, hermosa (pero no en la forma que necesita la televisión), y muy, muy inteligente. Juntos ella y yo teníamos la única cosa que tú no puedes fingir: química.
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Pese a la química que existía entre los dos, la producción decidió que no podía ser su interés amoroso, así que la actriz de 1.63, fue suplantada por la británica de 1.72, Sarah Lancaster.
Las otras razones que dieron para sacar a Adams de los proyectos eran igual o más superficiales que el anterior:
Se veía demasiado joven, lo intentaba demasiado u otra actriz estuvo disponible en el último momento.
Finalmente, la actriz acató el tema, relacionándolo con el nuevo proyecto que desarrolla en HBO:
Creí que mi relación con la televisión se había acabado, pero entonces apareció Sharp Objects, y estoy muy emocionada por la posibilidad de volver sobre este camino.
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