Lo más podrido de la historia del Tomatómetro… que aun así tienes que ver
A veces ver una mala película es todo lo que tu día necesita para mejorar
¿Vale la pena ver una mala película? Esa es una pregunta que todo cinéfilo se hace en algún momento de su vida. La respuesta más fácil sería decir que no hay razón lógica para desperdiciar el tiempo en ver algo que bajo un consenso general es considerado como basura, sin embargo, como consumidores debemos apreciar el que existan películas que sean consideradas terribles por las siguientes razones:
a) Son de culto. No significa que se trate de piezas magistrales que legarán un gran tratado sobre el séptimo arte. No. Significa que forma parte esencial de un catálogo de curiosidades que podrían cimentar chistes, referencias y alusiones o parodias. Tenerlas como bagaje ayudaría a que la gente gozara todavía más muchas de las películas que aluden, como mofa o mero guiño, a estas películas. Son necesarias, entonces, para la videoteca de cierto tipo de cinéfilo atascado con gusto particular por lo raro y cutre.
b) Pertenecen a la cultura popular. No todas. Pero, eso sí, si quieres ser un cinéfilo bien documentado, son imperantes para tu entendimiento de los bodrios. Muchas de sus secuencias integran una serie de chistes donde se alude a dichas películas y, lamentablemente, esos chistes hípsters, no se entienden sin el antecedente de estas películas. Tanto así como los chistes de Les Luthiers, Los Simpson, etcétera.
c) Dirimen ídolos. Ahí el caso de Benigni, Ben Affleck, Matt Damon, Antonio Banderas, John Travolta, Sylvester Stallone, Andy Kaufman, Linda Blair, Ray Milland y compañía. Desmitifican a nuestros iconos de la pantalla grande y nos los presentan en sus peores momentos, cuando el dinero, las ganas de chambear y la búsqueda de curriculum los invitaron a participar de alguna cosa lamentable que no podremos olvidar una vez que la hayamos visto.
d) Matar el insomnio o conminarnos a la lectura. Sí, el cine también te invita a leer. Sobre todo cuando la película es tan lamentable que uno siente haber perdido puntaje en su coeficiente intelectual por haber reventado semejante babosada. Sí, uno se siente con la necesidad de leer, de estudiar Física, aprender lógica matemática, traducir a Hegel, quién sabe: realizar tareas edificantes que nos alejen de un día hacer lo mismo que los creadores de estas películas tan malas.
e) Entender qué satanizan los críticos. Hay que decirlo: la crítica es falible. No siempre y estas películas no son el caso, pero vamos: mucho tienen que aportar (para bien y para mal, sobre todo lo segundo) a nuestra formación fílmica. Viendo estas películas podremos entender qué es lo que tanto molesta a la crítica y crear un parámetro consistente de lo más bajo en la cadena alimenticia de la creación cinematográfica y así descubrir, de una vez por todas, por qué es importante que existan los críticos de cine.
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Nuestro Tomatómetro nos da la facilidad de encontrar esta clase de películas y en esta ocasión les presentaremos aquellos que tienen una calificación del cero por ciento (salvo una excepción), sí, producciones que fueron apaleadas por los críticos pero que de alguna manera resulta relevante conocerlas.
Esta es considerada por algunos como una de las películas más extrañas en la historia del cine. Harold P. Warren, un vendedor de seguros y fertilizantes en El Paso, Texas, luego de apostar con el guionista ganador del Óscar Stirling Silliphant que era perfectamente capaz de hacer su propia película, decidió realizarla y nació Manos: The Hands of Fate. Juntando US$19 mil de amigos y familiares dio inicio a su proyecto, sobre un matrimonio que cae en las garras de una secta diabólica, liderada por un hombre que se hace llamar "el maestro".
Sebastian Zavala Kahn escribió en ScreenAnarchy:
Es una de esas películas "tan malas que son buenas" y que ha adquirido el status de culto gracias a las terribles actuaciones, una trama sin sentido y sus errores técnicos.
Si se hubiera traducido fielmente al español su título, sería La Cosa con Dos Cabezas, y eso nos dice mucho del tono general de la cinta, una comedia donde un médico racista a punto de morir decide hacer un trasplante de su cabeza a otro cuerpo, que lamentablemente para él, es el de un hombre afroamericano. Una de las cosas más surrealistas de la cinta, es que la protagoniza Ray Milland, ganador del Óscar por su actuación en Días sin Huella (100%).
Matt Brunson de Creative Loafing dijo:
Debido a que la película nunca se toma a sí misma en serio (¿cómo podría?), a menudo cae en el territorio "es tan mala que es buena" con algunos diálogos que la ayudan a mantenerse interesante.
La niña de El Exorcista (87%), Linda Blair, tenía que participar en películas más alegres para convertirse en una actriz reconocida y famosa, y dejar de ser relacionada con una jovencita poseída por el demonio. Roller Boogie parecía la cinta ideal para su regreso a la alegría, un musical con patines… desafortunadamente no sólo no la ayudó a despegar su carrera, sino que todo mundo odió la película, y tampoco le ayudó que la popularidad de la música disco estaba pasando en 1979.
Oz en eFilmCritic.com la describe como:
Cabello largo, shorts ajustados, mal patinaje, horribles actuaciones y Linda Blair.
Andy Kaufman y Bernadette Peters interpretan a dos robots creados para ser compañeros de los humanos, pero cuando se conocen se enamoran al más puro estilo WALL·E (96%)… bueno, un poco diferente tal vez. Lo más extraño de toda la película es el diseño de los robots, y el hecho de que sea una de las pocas cintas donde participó el comediante Andy Kaufman, la hace digna de verse.
Scott Weinberg escribió en DVDTalk.com:
...te deja la misma sensación en la mente que la de un vidrio cuando está siendo rasgado; esta película se convertirá, con muy poco esfuerzo, en tus próximas quince pesadillas.
Star Wars: Episodio IV - Una Nueva Esperanza (93%) tuvo un éxito tan grande que provocó el nacimiento de numerosas copias baratas, algunas descaradas y otras más disimuladas. Megaforce es un ejemplo imperdible entre las cintas inspiradas por Star Wars, pues sus malos efectos especiales (aun para su época) y el traje de Barry Bostwick la convierten en una joya de las malas películas.
Scott Weinberg en eFilmCritic.com resaltó su singularidad (aunque en esta lista no se siente tan única):
Es raro encontrar una película que sea así de mala.
Puede que muchos no lo sepan, pero Fiebre de Sábado por la Noche (90%) tuvo una secuela. John Travolta vuelve a interpretar a Tony Manero, quien ahora decide buscar una carrera como bailarín de Broadway. La película es mala por cualquier lugar que se le vea, la trama es insípida y boba, lo cual era de esperarse ya que Sylvester Stallone (sí, leíste bien el nombre), no tenía experiencia en musicales y creyó que decentes secuencias de baile serían suficiente. De hecho, son esas secuencias lo único que vale la pena recordar de una secuela que nadie en su vida ordenó.
Variety señaló en su crítica:
El punto más bajo es que Sobreviviendo no es tan buena como su predecesora de 1977, Fiebre de Sábado por la Noche.
Mac: Mi Amigo de las Estrellas (0%)
Es normal encontrarse copias descaradas de clásicos amados por toda la familia, sin embargo, ninguno lo llevó tan lejos como este comercial de 90 minutos sobre McDonald's. Verán, Mac: Mi Amigo de las Estrellas es prácticamente una copia descarada de E.T., El Extraterrestre (98%) en la que un niño en silla de ruedas se hace amigo de un extraterrestre que recién acaba de escapar de la NASA. En muchas ocasiones debemos ver esta clase de película para apreciar a las que se están copiando.
Walter Chaw de Film Freak Central dijo:
Ver esto me hizo más estúpido, comprarlo probablemente me hubiese bajado unas cuantas clases sociales.
Las ridiculez es una de las razones principales por las que amamos las malas películas, ¿pero qué es mejor que una mala película? Una espantosa secuela, tal y como es el caso de Rescate explosivo. Muchos de ustedes quizás no ubiquen o recuerden al basquetbolista Dennis Rodman, quien en la década de los años noventa fue tan popular que pudo protagonizar malas películas de acción, siendo Rescate explosivo un ejemplo claro de esto. Rodman nunca será reconocido por sus habilidades histriónicas, sin embargo, debemos agradecer que tenemos esta película como prueba de que no todos los deportistas pueden ser actores a pesar de que tengan mucho carisma.
Nathan Rabin de AV Club explicó:
Dennis Rodman probablemente haya resurgido, pero únicamente como un icono de la cultura pop, es un póney de un solo truco.
Ahora bien, ustedes saben que el Tomatómetro se nutre por la cantidad de reseñas que una película recibe, en muchas ocasiones las que tienen un cero de calificación solamente reúnen poco más de una docena, sin embargo, esta atrocidad del cine de acción protagonizada por Antonio Banderas tiene el deshonor de haber sido odiada por más de un centenar. Sabemos que ver una película con pésimas recomendaciones es mala idea, pero, ¿será para tanto? Esto es algo que debemos ver para creer.
Jocelyn Noveck de Associated Press señaló:
Para muchos espectadores, la gran pregunta no es si Ecks y Sever quedarán juntos o no, o por qué están peleando en primer lugar, sino más bien, ¿por qué están sentados viendo eso?
Roberto Benigni siempre será ese adorable papá que hizo hasta lo imposible para salvar a su hijo de las atrocidades de la Segunda Guerra Mundial en La Vida es Bella (80%), lo queremos tanto que estamos dispuestos a perdonarlo por hacer una de las peores y más extrañas adaptaciones cinematográficas que se han realizado de Pinocho, Aquí, Benigni interpreta al títere principal y, siendo esta una película extraña, su actuación como un infante de 10 años va más allá de lo inconcebible gracias que se mete de lleno al compromiso de ser un niño de verdad. Puede que la termines odiando, pero su rareza es algo que vale la pena ver.
Jay Boyar del Orlando Sentinel explicó:
En lugar de haber escondido esta película de los críticos, Miramax debió haberla ocultado de todo el mundo.
No los culpamos si nunca han escuchado hablar de esta película, pues no sólo careció de buenos comentarios por parte de la crítica, sino que la historia detrás de su producción es mucho más interesante. Verán, The Leisure Class es una mala comedia cuya producción se filmó como parte del programa Project Greenlight de HBO producido por Ben Affleck y Matt Damon, en ella el director Jason Mann filmó una película que en papel sonaba bien, un viejo ladrón se enamora de su próxima víctima y su hermano llega a arruinar todo, sin embargo, el producto final está lejos de ser satisfactorio y sólo sirve para recordarnos qué tan complicado es realizar una película cuando todos sus participantes tienen ideas diferentes en cuanto a cómo hacerla.
Liz Shannon Miller apuntó para indieWire
No estoy segura de que esta película, al final, haya sido merecedora de todo el esfuerzo que se invirtió al elaborarla.
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