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viernes diciembre 6, 2024 
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[Pelicula] Zona De Interés se convirtió en una de las películas más aclamadas de la temporada de premios. Su acercamiento al Holocausto hizo repensar las cosas a más de uno, con muchos preguntándose que fue de aquella familia capaz de vivir a pocos metros del horror durante la Segunda Guerra Mundial. En este artículo comentamos el destino de Rudolf Höss y su familia.
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Dirigida por [Director] Jonathan Glazer, la trama se enfoca en la vida del comandante de Auschwitz, Rudolf Höss, y su esposa Hedwig, quienes luchan por construir un hogar idílico para su familia en una casa con jardín cercana al campo de concentración de Auschwitz en la Alemania nazi de la Segunda Guerra Mundial. Los personajes principales son interpretados por Meriem Medjkane y Sandra Hüller.
La película ganó los premios Oscar a Mejor sonido y Mejor película extranjera, haciendo posible el discurso de Glazer en el escenario, quien pronunció las siguientes palabras, mismas que le han valido la condena pública entre productores judíos en Hollywood:
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Durante su estancia en Auschwitz, la familia Höss vivió en una villa situada dentro del complejo del campo de concentración. Estaba ubicada relativamente cerca de las cámaras de gas y los crematorios. Aunque ofrecía ciertos lujos en comparación con las condiciones de los prisioneros, como muebles elegantes y comodidades básicas, la presencia constante del horror y la brutalidad en el campo de concentración era inevitable.
Hedwig, la esposa de Rudolf Höss, se encargaba del hogar y de criar a sus hijos en este entorno, tratando de mantener una apariencia de normalidad en medio del caos circundante. La proximidad de la villa a las instalaciones de exterminio subraya la ironía de la situación, donde la comodidad relativa de unos pocos se construía sobre el sufrimiento extremo de muchos otros.
Rudolf Höss fue un oficial nazi destacado por su papel como comandante del campo de concentración de Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial. Según el libro Zona de interés de Martin Amis, en el cual se basa la película, la juventud de Höss estuvo marcada por la influencia de su padre, quien era ferviente nacionalista y militarista. Esto probablemente contribuyó a su posterior ingreso a las filas de la SS (Schutzstaffel, organización paramilitar y de seguridad del régimen nazi en Alemania, responsable de la represión política, el control de los campos de concentración y la implementación de políticas de exterminio durante el Holocausto), donde ascendió rápidamente debido a su lealtad y eficiencia.
Como comandante de Auschwitz, Höss implementó políticas de exterminio brutal y sistemático, contribuyendo a la muerte de más de un millón de personas, en su mayoría judíos. Supervisó personalmente la construcción y expansión de las instalaciones de exterminio, incluidas las cámaras de gas y los crematorios, y fue responsable de la organización y ejecución de la "Solución Final".
Höss se destacó por su frialdad y su capacidad para separar sus emociones de sus acciones, lo que lo convirtió en un instrumento eficaz del régimen nazi en la implementación del Holocausto. Su papel en el genocidio lo llevó a ser juzgado y condenado a muerte por crímenes de guerra al final de la guerra, dejando un legado oscuro y trágico en la historia del siglo XX.
Tras la guerra, Höss intentó esconderse bajo la identidad falsa de Franz Lang, pero fue detenido por soldados británicos. Durante su juicio, Höss hizo afirmaciones asombrosas, negando haber matado personalmente a alguien y afirmando que solo había seguido órdenes. Esta negación de su responsabilidad directa en los horrores de Auschwitz reflejó la mentalidad de muchos funcionarios nazis que buscaban evadir su culpabilidad.
A pesar de sus declaraciones y testificación en los juicios de Núremberg, el Tribunal Nacional Supremo de Polonia lo encontró culpable de crímenes de guerra y lo condenó a muerte por ahorcamiento. La ejecución de Höss en 1947 fue un acto de justicia simbólico y una advertencia contra la impunidad de quienes participaron en el Holocausto. Su caso ejemplifica la importancia de responsabilizar a los perpetradores de crímenes atroces, incluso cuando intentan justificar sus acciones o minimizar su participación.
El final de la familia Höss estuvo marcado por la tragedia y el peso de su legado. La esposa de Rudolf Höss, Hedwig, y sus hijos, se enfrentaron al estigma y la vergüenza asociados con el nombre de su esposo y padre. Tras la captura y condena de Rudolf por crímenes de guerra, Hedwig luchó por mantener a su familia unida y proteger a sus hijos del escrutinio público.
Después de la ejecución de Rudolf Höss en 1947, la familia enfrentó dificultades financieras y ostracismo social. Hedwig se casó nuevamente en 1950 y murió en Estados Unidos en 1989. Brigitte Höss, optó por un camino diferente y se convirtió en modelo de Balenciaga durante algunos años; la mayor parte de su vida la dedicó a la industria de la moda. En una entrevista con The Guardian, Brigitte defendió a su padre, describiéndolo como un hombre bueno:
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¿De qué trata Zona de interés?
Dirigida por [Director] Jonathan Glazer, la trama se enfoca en la vida del comandante de Auschwitz, Rudolf Höss, y su esposa Hedwig, quienes luchan por construir un hogar idílico para su familia en una casa con jardín cercana al campo de concentración de Auschwitz en la Alemania nazi de la Segunda Guerra Mundial. Los personajes principales son interpretados por Meriem Medjkane y Sandra Hüller.
La película ganó los premios Oscar a Mejor sonido y Mejor película extranjera, haciendo posible el discurso de Glazer en el escenario, quien pronunció las siguientes palabras, mismas que le han valido la condena pública entre productores judíos en Hollywood:
Nuestra película muestra a dónde conduce la deshumanización en su peor momento. Ha dado forma a todo nuestro pasado y presente. En este momento, estamos aquí como hombres que refutan su judaísmo y el secuestro del Holocausto por una ocupación que ha llevado al conflicto de tantas personas inocentes. […] Ya sean las víctimas de octubre, ya sean las víctimas del 7 de octubre en Israel o el ataque en curso contra Gaza, todas las víctimas de esta deshumanización, ¿cómo resistimos?
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La familia Höss
Durante su estancia en Auschwitz, la familia Höss vivió en una villa situada dentro del complejo del campo de concentración. Estaba ubicada relativamente cerca de las cámaras de gas y los crematorios. Aunque ofrecía ciertos lujos en comparación con las condiciones de los prisioneros, como muebles elegantes y comodidades básicas, la presencia constante del horror y la brutalidad en el campo de concentración era inevitable.
Hedwig, la esposa de Rudolf Höss, se encargaba del hogar y de criar a sus hijos en este entorno, tratando de mantener una apariencia de normalidad en medio del caos circundante. La proximidad de la villa a las instalaciones de exterminio subraya la ironía de la situación, donde la comodidad relativa de unos pocos se construía sobre el sufrimiento extremo de muchos otros.
¿Quién fue Rudolf Höss?
Rudolf Höss fue un oficial nazi destacado por su papel como comandante del campo de concentración de Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial. Según el libro Zona de interés de Martin Amis, en el cual se basa la película, la juventud de Höss estuvo marcada por la influencia de su padre, quien era ferviente nacionalista y militarista. Esto probablemente contribuyó a su posterior ingreso a las filas de la SS (Schutzstaffel, organización paramilitar y de seguridad del régimen nazi en Alemania, responsable de la represión política, el control de los campos de concentración y la implementación de políticas de exterminio durante el Holocausto), donde ascendió rápidamente debido a su lealtad y eficiencia.
Como comandante de Auschwitz, Höss implementó políticas de exterminio brutal y sistemático, contribuyendo a la muerte de más de un millón de personas, en su mayoría judíos. Supervisó personalmente la construcción y expansión de las instalaciones de exterminio, incluidas las cámaras de gas y los crematorios, y fue responsable de la organización y ejecución de la "Solución Final".
Höss se destacó por su frialdad y su capacidad para separar sus emociones de sus acciones, lo que lo convirtió en un instrumento eficaz del régimen nazi en la implementación del Holocausto. Su papel en el genocidio lo llevó a ser juzgado y condenado a muerte por crímenes de guerra al final de la guerra, dejando un legado oscuro y trágico en la historia del siglo XX.
¿Cómo fue la captura y juicio de Höss?
Tras la guerra, Höss intentó esconderse bajo la identidad falsa de Franz Lang, pero fue detenido por soldados británicos. Durante su juicio, Höss hizo afirmaciones asombrosas, negando haber matado personalmente a alguien y afirmando que solo había seguido órdenes. Esta negación de su responsabilidad directa en los horrores de Auschwitz reflejó la mentalidad de muchos funcionarios nazis que buscaban evadir su culpabilidad.
A pesar de sus declaraciones y testificación en los juicios de Núremberg, el Tribunal Nacional Supremo de Polonia lo encontró culpable de crímenes de guerra y lo condenó a muerte por ahorcamiento. La ejecución de Höss en 1947 fue un acto de justicia simbólico y una advertencia contra la impunidad de quienes participaron en el Holocausto. Su caso ejemplifica la importancia de responsabilizar a los perpetradores de crímenes atroces, incluso cuando intentan justificar sus acciones o minimizar su participación.
El final de la familia Höss
El final de la familia Höss estuvo marcado por la tragedia y el peso de su legado. La esposa de Rudolf Höss, Hedwig, y sus hijos, se enfrentaron al estigma y la vergüenza asociados con el nombre de su esposo y padre. Tras la captura y condena de Rudolf por crímenes de guerra, Hedwig luchó por mantener a su familia unida y proteger a sus hijos del escrutinio público.
Después de la ejecución de Rudolf Höss en 1947, la familia enfrentó dificultades financieras y ostracismo social. Hedwig se casó nuevamente en 1950 y murió en Estados Unidos en 1989. Brigitte Höss, optó por un camino diferente y se convirtió en modelo de Balenciaga durante algunos años; la mayor parte de su vida la dedicó a la industria de la moda. En una entrevista con The Guardian, Brigitte defendió a su padre, describiéndolo como un hombre bueno:
Era un padre maravilloso. Los domingos fumaba un cigarro por toda la casa. Desayunamos, almorzamos o cenamos, como una linda familia. Ni siquiera sabíamos cuál era realmente su trabajo.
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