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viernes diciembre 6, 2024 
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Cada vez que escucho a alguien afirmar que detesta los musicales me hace preguntarme cuántos ha visto realmente. Es probable que pocos o ninguno, así que ese odio irracional hacia uno de los géneros esenciales en la historia del cine proviene de otro lado, quizá sea un rechazo a lo considerado viejo y anticuado, a cintas que sus padres disfrutaban y que, por supuesto, no pueden ni deben tener entre sus favoritas. Dicho sea en otras palabras, la repulsión puede deberse a una brecha generacional ante un género cinematográfico del cual no saben mucho.
El musical ha pasado por varias etapas altas y recientemente, bajas, los directores y coreógrafos que entienden el género no abundan, no en Hollywood, al menos. Lejanos están los días cuando Busby Berkeley montaba alucinantes y elaboradas coreografías simétricas, cuando Andrea Edwards sacaba brillo de las pistas de baile, cuando [Director] Bob Fosse llevó el género a oscuros e intrigantes caminos. De todo eso no queda más que el recuerdo y la nostalgia, esta última estafeta tomada por una cinta como [Pelicula] La La Land: Una Historia de Amor, que pretende ser una sincera carta de amor a todo ese Hollywood dorado que se fue para no volver.
El género musical existe en distintas formas y sabores, y para poder entender el potencial que tiene la música como herramienta narrativa, deben explorarse a profundidad todas sus implicaciones. Es necesario hacer a un lado los cánones clásicos establecidos por el viejo Hollywood, visitar escenarios en los cuales Fred Astaire y Gene Kelly nunca bailaron. Hasta el más reacio a la danza y el canto cambiaría de parecer con estas cintas. Por razones de obviedad y redundancia innecesaria, Phantom of Paradise y [Pelicula] El Show De Terror De Rocky no aparecen en la lista.
[Pelicula] Calles de Fuego
Planeada originalmente como parte de una trilogía que no se dio, este musical anacronista de Walter Hill es una delirante aventura que transcurre en una imaginaria amalgama de los años 50 y la estética punk de los 80. Una banda sonora llena de color y vida acompaña a la cinta, de la cual resaltan los dos temas principales compuestos por el legendario Jim Steinman. Sus sonidos operísticos de rock enmarcan esta historia llena de arquetipos tradicionales: un héroe a la vieja usanza de los western clasicos, con una bella dama a la cual rescatar y un villano desalmado. La cinta fue un fracaso en Occidente, pero en Japón se volvió de culto.
[Pelicula] Bakuretsu toshi
Burst City es un musical de rock punk dirigido por Sogo Ishii, uno de los padres del cine punk japonés, que transcurre en una suerte de futuro distópico donde bandas de punk se enfrascan en constantes combates abajo y arriba del escenario. La banda sonora reúne a varios de los grupos más importantes del género que dio la escena japonesa, entre los que destacan The Stalin, Inu y Battle Rockers. Quien piense que los musicales son una ñoñería cursi obviamente no ha visto Burst City.
[Pelicula] Get Crazy
Absoluta joya de culto relegada a la oscuridad por telarañas legales de derechos de autor con su música. Una fiesta de fin de año se convierte en el escenario para un masivo concierto con bandas de punk, blues y rock. Una multitud de músicos legendarios aparecen en pantalla: Lou Reed, la banda de punk Fear, Bill Henderson, John Densmore de The Doors y varios más. Michael Cudlitz prácticamente roba la película a todos estos músicos con su interpretación de Reggie Wanker, una clara parodia del vocalista de los Rolling Stones, el siempre inquieto Mick Jagger.
[Pelicula] The Apple
The Cannon Group, el sueño febril de dos primos israelís que estaban decididos a conquistar Hollywood, generó algunas de las cintas más absurdas de la historia del cine: desde las secuelas de Death Wish, protagonizadas por Charles Bronson hasta un musical tan estrambótico como The Apple. Su corte disco llegó en un momento en que dicho género se encontraba ya de salida de las listas de popularidad. Los críticos la destrozaron con saña, pero aun dentro de sus múltiples errores existe una ingenuidad y encanto natural que es difícil resistir. Definitivamente, no vayan esperando encontrar una joya pulida, pero sí un diamante en bruto.
[Pelicula] Lisztomania
Cuando el músico Franz Liszt tocaba en público, las masas enloquecían por completo, mujeres se arrojaban al pianista y los escenarios se venían abajo. El término Lisztomania fue acuñado para describir este fenómeno, algo insólito para aquellas épocas previas a los astros de rock y los conciertos en estadios.
Entran Roger Daltrey de la banda The Who y el director [Director] Ken Russell, uno de los auténticos transgresores del cine que harían que un ridículo como Lars Von Trier se ocultara en un rincón asustado. Lisztomania es un musical que cuenta de forma muy libre la carrera del compositor de Sueño de amor. La banda sonora fue compuesta en este caso por Rick Wakeman de Yes. Ringo Starr aparece como el papa y de villano tenemos una versión nazi vampiro espacial de Richard Wagner. Una vez más, ¿quién dijo que los musicales son cursis y solo para señoras?
[Pelicula] Mismatched Couples
Antes de combatir stormtroopers en una galaxia muy lejana, Chirrut Imwe pasaba sus tardes a ritmo de breakdance en el Hong Kong de los 80, con la leyenda del cine de artes marciales [Director] Woo-Ping Yuen como su patiño. Donnie Yen demuestra en pantalla grandes habilidades como bailarín en esta comedia de enredos, un auténtico artefacto de los 80 que lo que ha perdido en estilo de vestir lo ha conservado en su efectividad para hacer reír. Mención especial para el eterno villano del cine de Hong Kong de la época, Dick Wei, como el extravagante antagonista.
[Pelicula] La Felicidad de los Katakuris
Déjenselo a [Director] Takashi Miike para que transforme un drama familiar con cadáveres en un musical azucarado con escenas de animación en stop motion y zombies bailarines. Este remake de la cinta coreana The Quiet Family es una demente y contagiosa oda a la unidad familiar, un tema recurrente en el cine japones y en el cual Miike también dejó su huella con la no menos demente Visitor Q. Si esta genialidad no los hace sonreír necesitan ver a un medico para que les revise el pulso, ya que no tienen corazón o humor.
Si hay una industria fílmica que jamás abandonó el musical es la de India, donde el género está más que vivo. Hablar de musicales indios amerita su propia lista, pero si hay que escoger uno, debe ser éste protagonizado por Shah Rukh ”el rey” Khan. El director Mani Ratnam logra una combinación ideal entre romance, drama y temas de gran relevancia política y social para la nación asiática. En cuanto a la música, una secuencia de baile en un tren en movimiento debe verse para creerse.
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Entran Roger Daltrey de la banda The Who y el director [Director] Ken Russell, uno de los auténticos transgresores del cine que harían que un ridículo como Lars Von Trier se ocultara en un rincón asustado. Lisztomania es un musical que cuenta de forma muy libre la carrera del compositor de Sueño de amor. La banda sonora fue compuesta en este caso por Rick Wakeman de Yes. Ringo Starr aparece como el papa y de villano tenemos una versión nazi vampiro espacial de Richard Wagner. Una vez más, ¿quién dijo que los musicales son cursis y solo para señoras?
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Dil Se..
.Si hay una industria fílmica que jamás abandonó el musical es la de India, donde el género está más que vivo. Hablar de musicales indios amerita su propia lista, pero si hay que escoger uno, debe ser éste protagonizado por Shah Rukh ”el rey” Khan. El director Mani Ratnam logra una combinación ideal entre romance, drama y temas de gran relevancia política y social para la nación asiática. En cuanto a la música, una secuencia de baile en un tren en movimiento debe verse para creerse.
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