Series que el mundo ya no necesita: Dragon Ball, Z, GT, Super...

Dragon Ball Z: La Batalla de los Dioses y su secuela Dragon Ball Z: La Resurrección de Freezer - 80% sirvieron para probar ante cualquier equipo de marketing que 20 años después del cierre oficial de la serie, Dragon Ball aún podía generar bastante capital.

Pues seamos sinceros este revival Dragon Ball Super obedece únicamente a un movimiento de marketing, no porque realmente los creadores tuvieran la necesidad de cerrar un ciclo o completar una historia inconclusa, necesario para otras historia, digamos Twin Peaks .

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En 1997 se transmitió el último episodio de Dragon Ball GT. Un cierre emotivo, nostálgico, bien ejecutado. Pero para muchos no fue el final perfecto por el simple hecho de que el creador de este universo, Akira Toriyama no había formado parte de este anime, lo cual ponía en duda si esta línea de tiempo debía formar parte del canon.

Sin duda el regreso de Toriyama para La batalla de los dioses en 2013 fue el preludio perfecto para crear un nuevo anime que para los más puristas pudieran considerar el cierre perfecto de Dragon ball.

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Sin duda el fenómeno Caballeros del Zodiaco y Dragon Ball Z, hicieron ambos pertenecientes al género shonen ayudaron a que el anime tuviera una considerable exportación mundial. La ola de los noventas llevaría a que una nueva tribu urbana surgiera en las dos subsecuentes décadas: los otakus.

Pero el mercado ha cambiado, los nuevos espectadores de anime consumen otro tipo de productos que han sido diseñados para su generación. Dragon Ball regresó con una animación demasiado inferior a la que conocieron los primeros seguidores de la serie, con una línea temporal inmediata a Z y algo distante a GT (que de alguna forma la clausura sin ser explícito).

La nostalgia es algo continuamente explotado por Hollywood, no podemos satanizar a los empresarios nipones por querer entrar en este juego. Sin embargo, Dragon Ball Super no se define entre ser un producto dirigido a las nuevas generaciones y los antiguos seguidores de la serie, lo cual ha causado que el otrora rey de los raitings, ahora vea bastante mermada a su audiencia.

Dragon Ball Super es como ese chavorruco que entra al antro causando lástima entre la nueva generación, mientras en sus intentos patéticos intenta seducir a una mozuela un par de décadas menor.

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