Con el más reciente estreno en cines de la tercera parte de Mar Abierto - 72%, llega Terror en lo Profundo - 25% de la mano del director australiano Gerald Rascionato, un filme que utiliza la ya muy gastada técnica del found footage. Si se preguntan qué aporta al género, les contamos que nada, y esto se comprueba en la valoración pobre que la crítica le ha dado al filme. Cabe mencionar que las dos anteriores entregas, fueron elogiadas por el suspenso y técnica que manejaban, además de estar basadas en la triste historia de la vida real de Tom y Eileen Lonergan.
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La premisa peca de predecible, por ejemplo, sabemos de ante mano, que los protagonistas serán devorados por tiburones, pero ¿por qué deseamos que ocurra lo más rápido posible? Por la falta de sorpresa. Recordemos que el terror en el mar abierto fue introducido por el genial Steven Spielberg en Tiburón - 98% allá por 1975, después parodiado en Sharknado - 82% por Anthony C. Ferrante en el 2013 y bien manejado en Miedo Profundo - 77% en 2016; entonces, ¿qué más falla en Terror en lo Profundo - 25% si la fórmula de tiburones y mar abierto permanecen en su trama?
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El nacimiento del found footage
Poco antes de iniciar el año 2000, Alien Abduction: Incident in Lake County (1998), y su estilo de falso documental, tendría un buen recibimiento por parte de la audiencia y la crítica por el efectivo uso de elementos del género de terror y la ciencia ficción a lo largo de su metraje, sin duda, una pionera en el uso de la técnica.
En 1999 estrenó El Proyecto de la Bruja de Blair - 86%ir, una cinta que impactó al mundo por sus aparentemente imágenes improvisadas y filmadas en la vida real, una historia que hacía uso del terror psicológico y el suspenso, aunado a una inteligente campaña de promoción: el rumor de ser un documental basado historia basada en trágicos hechos reales que investigaba una leyenda sobre las muertes misteriosas de niños en el pueblo de Burkittsville, Maryland. Sus directores, Daniel Myrick y Eduardo Sánchez, diseñaron clippings falsos de periódicos sobre la desaparición de los personajes principales de la película. Se publicaron fotos -aparentemente tomadas por la policía- del coche desaparecido de los autores del video grabado.
La historia que pone imágenes y sonido al miedo a lo desconocido fue un éxito en Festival de Cine de Sitges de aquel año. Sin duda, un parteaguas para este género. Pero incluso antes de El Proyecto de la Bruja de Blair - 86%, ya estaba Holocausto Caníbal - 65%, filme que estremeció al mundo en 1980 y hasta el día de hoy es considerada como una de las más películas más perversas que se hayan filmado y pionera del Found Footage. Su creador, el cineasta italiano, Ruggero Deodato, llevo al hiperrealismo las secuencias de su película, una historia que sigue a un grupo de jóvenes reporteros que se interna en la amazona sudamericana para filmar un documental sobre las tribus indígenas que viven en la zona, alejadas de la civilización. La alarma se enciende cuando han pasado varios días sin que los ejecutivos de la cadena de televisión tengan noticias del equipo, estos contactan a Monroe, un experto antropólogo para ir en busca de ellos, y quien está a punto de descubrir la extrema brutalidad a la que fueron sometidos. La violencia mostrada en el celuloide hizo que las autoridades italianas pensaran que el director había realizado una cinta snuff, es decir, que había asesinado a los actores frente a la cámara.
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Consagración
Si se pudiera resumir la consagración de esta técnica en la década pasada, sólo tendríamos que mencionar dos películas; una de ellas, Actividad Paranormal - 83%, que cuando llegó a las salas de cine, los espectadores salían aterrados por el realismo que la cinta expresaba. En este caso, la cámara no se limitaba a la que portaba el protagonista, sino que, se usaban algunos extras pegados en la pared para tener una mayor experiencia visual del entorno en donde se desarrollaban los eventos.
Fue tanto el éxito de la franquicia bajo esta técnica que tuvo cuatro secuelas, explotando una historia diferente. En el 2008, Matt Reeves daría al público una obra que, hasta nuestros días, sigue dando de qué hablar, ya sea con teorías o tratando de hilar su argumento con su secuela llamada Avenida Cloverfield 10 - 90%; así es, nos referimos a Cloverfield: Monstruo - 77%. Filmada desde el punto de vista de unos jóvenes que buscan escapar de la ciudad asediada por una criatura desconocida, una película que mezclaba ciencia ficción y el romance: la imposibilidad del protagonista para rescatar a su amada. Un doloroso reencuentro a destiempo.
Aunque no fue originaria del cine de Hollywood, una de las obras maestras provenientes de Noruega fue Trollhunter - 82%, de la mente de André Øvredal. ¿Por qué es considerada un épico acierto? Además de tener una historia y drama original e innovadora, la ejecución perfecta de esta técnica rápidamente llamó la atención de nuestro continente. El falso documental noruego narraba la historia de un grupo de estudiantes que trata de destapar una conspiración del gobierno que implicaba a trolls gigantes que vivían en Noruega. El crítico de cine David Rooney, de Variety, dijo del filme: “Un disfrutable y un tanto desquiciado híbrido entre 'El proyecto de la bruja de Blair' y 'Donde viven los monstruos".
En los próximos años, las secuelas de Actividad Paranormal - 83%, la franquicia de [Rec] - 90%, Apollo 18, Poder Sin Límites - 85% y V/H/S - 55% pasarían algunas con más pena que gloria al vivir el apogeo del género, mayoritariamente, estas películas eran terror o suspenso, hasta que, Proyecto X - 28% lo cambiaría todo a pesar de su mala recepción con la crítica. Dando un giro fresco a la trama al tener un ambiente de fiesta en vez de sustos en un orfanato.
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¿Estancamiento?
A partir de este cambio de juego, películas como Inactividad Paranormal 2 - 16% o Bienvenidos al Ayer - 35% seguirían con la técnica al llevarla a los géneros de la comedia y la ciencia ficción. Quizás fue éste, uno de los momentos cuando el found footage se empezó a volver un tanto común y sólo seguía una misma fórmula y es en este grupo donde cabe Terror en lo Profundo - 25%.
La película entrega una historia ya vista en el cine: un grupo de amigos viaja a una playa para grabar un video buceando con tiburones, que les servirá como carta de presentación para entrar a un concurso de eventos extremos. Pero algo sale muy mal ese día, y la grabación se convierte en un terrorífico diario de supervivencia. Otra de las fallas es su mala dirección de actores, interpretes a los que no le crees nada, exagerados. Incluso las escenas de ataque del tiburón son poco legibles ¿Será este el fin del Found Footage o vendrá otra película que saque a todas del estancamiento en el que se encuentra?
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