H.P. Lovecraft se mantiene como uno de los autores de horror más importantes en la historia de la literatura. El escritor abordó el género de lo fantástico con su particular idiosincrasia. La creación de mitos y de toda una elaborada serie de mundos y seres extraños, que encapsulan el concepto del llamado “terror cósmico”, hacen de su obra un referente obligado. A pesar de la enorme importancia de su legado, han sido raras las ocasiones que sus textos han podido adaptarse con éxito a la pantalla grande. En su momento, Guillermo del Toro intentó llevar a la pantalla At the Mountains of Madness, con Tom Cruise involucrado. Sin embargo, múltiples problemas de logística impidieron que la cinta se concretara.
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Resurrección Satánica - 
94% y El perfil del diablo - 73% se mantienen a la fecha como las dos adaptaciones más importantes de la obra de Lovecraft en el cine. Dirigidas por Stuart Gordon y producidas por Brian Yuzna, estas dos películas capitalizaron el imaginario creado por el escritor originario de Rhode Island. En el caso de Resurrección Satánica - 94% (Re-Animator), Gordon adaptó el relato Herbert West-Reanimator, al que inyectó una buena dosis de humor negro y gore.
Originalmente estaba planeada como obra de teatro y luego serie de televisión, pero Yuzna, quien fungió como productor, convenció a Stuart Gordon de realizar un largometraje con el argumento de que el mercado de horror era más redituable en cine que en televisión. La cinta requirió un extensivo trabajo de efectos prácticos, para lo cual el encargado de efectos especiales estudió libros de medicina. A pesar de la acostumbrada aversión que la mayoría de los críticos sienten por el cine de horror, el filme de Gordon fue recibido con calurosas reseñas y a la fecha se le considera un clásico del cine de culto y horror. Bride of Re-Animator sería la secuela que intentaría reproducir la magia de la original, aunque sin mucho éxito. Como sea, la cinta de Gordon, protagonizada por Jeffrey Combs, Bruce Abbott, Barbara Crampton y más, se mantiene como una joya del cine psicotrónico y delirante.
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Roger Ebert, Chicago Sun Times:
Pocas películas se atreven a dar la vuelta al género de una manera tan torcida e inusual. Ésta es una de esas raras excepciones…
Pauline Kael, The New Yorker:
Una suerte de cinta de horror con toques surrealistas propios de Luis Buñuel.
Kevin Thomass, Los Angeles Times:
Es simplemente la mejor, más divertida película de grand guignol que ha aparecido en años.
Nicholas Royle, Time Out:
La inyección de humor a la historia de H.P. Lovecraft es lo que salva a esta película llena de sangre de ser un alimento para amantes del horror.
Gene Siskel, Chicago Tribune:
Es una delicia y da vida al clásico cliché del científico loco que juega a ser dios.
Nick Rogers, Suite101:
Denostarla como camp sería ignorar la rica tradición del relato de horror americano que la cinta sabe plasmar con ingenio y planeación.
Keith Bailey, Radio Times:
Un clásico del splatter que introdujo a una nueva generación a los horrores de Lovecraft.
Anton Bitel, Finland Empire:
Un giro irreverente, humorístico y sensual a la premisa de Frankenstein.
Sean Axmaker, Seanax.com:
El debut en cine del director de teatro experimental Stuart Gordon es, a la fecha, su mejor película.
Matt Brunson, Creative Loafing:
No le llega a algo como Evil Dead, pero sin duda, tiene su estatus de culto bien cimentado.
Felix Vasquez Jr., CinemaCrazed:
Es genial cuando una cinta logra hacer justicia a su reputación de clásico.
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