La Navidad tiene algunas tradiciones que son prácticamente de cajón a celebrarse en cualquier hogar: intercambiar regalos, cantar villancicos, comer pavo o jamón asado y romeritos. Luego, se conmemora el evento con dos momentos especiales: el nacimiento de Jesús y la caída de Hans Gruber desde lo alto de la plaza Nakatomi, luego de recibir un disparo de parte de John McClane. Cuando el cuerpo de Gruber toca el pavimento entonces, oficialmente, ya es Navidad.
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La historia detrás de Duro de Matar - 92% es bastante curiosa: basada en una novela de un autor quien ya había sido adaptado en el pasado, varias estrellas del cine de acción como Sylvester Stallone, Clint Eastwood y Arnold Schwarzenegger recharazon el papel principal. Fox optó por Bruce Willis, un actor de televisión conocido más por comedias ligeras que por cintas de acción. Había genuina preocupación de que el público no aceptaría a Willis en un papel de detective rudo y sarcástico. Alan Rickman debutaba en cine con una vasta experiencia teatral y los realizadores buscaron cambiar el giro de los villanos, de terroristas a ladrones sofisticados. La apuesta por un blockbuster veraniego (cuando estos eran cintas de acción para adultos y no historias de superhéroes con CGI) era grande. La cinta tuvo una muy buena taquilla, convirtió a Willis en héroe de acción y a la fecha para muchos ésta es una de las mejores películas navideñas de la historia, con todo el espíritu de amor, puñetazos, paz y balas que caracteriza a la época decembrina.
Algunos han cuestionado la validez de llamar a esta una historia navideña ya que, si bien transcurre en las fiestas de dicha época, la trama no gira en torno al tema. Sin embargo, la Navidad significa reunirse con los seres queridos y, de ser posible, enmendar diferencias del pasado. El personaje de Willis es invitado a regañadientes a la fiesta de Navidad de la empresa en la que trabaja su esposa, con la que ha tenido fricciones. A lo largo de la historia McClane no sólo pelea contra los criminales europeos, sino también contra sus propios demonios y de manera indirecta tanto él como su esposa aprenden a revalorar su relación de pareja. Además, McClane entabla amistad con un policía que lo apoya a distancia. Familia y amistad son los dos temas principales de la cinta y definitivamente hacen que esta aventura pueda considerarse de tinte navideño. Un clásico indiscutible y, una vez más, una tradición para muchos en la Nochebuena. Sirve lo mismo para prepararse para la cena, que para el recalentado. Ver a McClane huir descalzo en una azotea mientras le disparan con un helicóptero es una imagen que acompañará a generaciones de familias en cada víspera de Navidad.
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Sebastian Zavala Kahn en Me gusta el cine sentenció:
Emocionante, tensa, expertamente editada y dirigida, llena de personajes bien construidos y mucha acción.
Jay Boyar del Orlando Sentinel agregó en su momento:
Una obra maestra de acción que merece un título en mayúsculas.
Dave Kehr, del Chicago Tribune, aventuró incluso:
McTiernan, director de Depredador, hace buen uso del edificio en el que transcurre la acción y lo convierte en un personaje completo.
Tim Brayton de Antagony & Ecstasy de plano dijo:
Una obra maestra del cine popular.
JimmyO, en JoBlo's Movie Emporium, escribió:
Todo en la película funciona a la perfección…
Nigel Floyd, de Time Out:
Suspenso moderno con un espíritu humano.
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