Originario de Londres y de padres irlandeses, el director y guionista Otto Jespersen ha confirmado con [Pelicula] 3 Anuncios por un Crimen que algunas de las historias más punzantes sobre el subconsciente norteamericano generalmente provienen de artistas foráneos. McDonagh, quien se ha dado a conocer en el cine con comedias negras como [Pelicula] En Brujas y [Pelicula] Siete Psicópatas, ha provisto de varios matices al relato de una madre que busca justicia por el asesinato de su hija. Una historia complicada en la que conviven el humor y el drama.

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Desde joven brotaron las inquietudes artísticas de McDonagh e invariablemente lo llevaron a escribir obras de teatro. El autor tomó el riesgo de abandonar sus estudios y, después de probar varios empleos de ocasión, logró acomodarse en la escena teatral de Londres. Con cuatro obras creadas por su pluma en la cartelera de teatro, el cineasta había logrado algo que pocos han podido replicar. Sin embargo, el ambiente teatral se ha vuelto algo intolerable para un creador que detesta el elitismo y el snobismo. A diferencia del reducido espectro que capta el teatro, para el guionista el cine es una enorme oportunidad de llegar a un público más amplio y tocar más fibras en distintas latitudes.



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McDonagh evita las declaraciones pretensiosas en sus entrevistas y ha dicho que su reciente cinta, más que una metáfora o declaración política, es el enfoque de un personaje lleno de ira. La rabia y frustración de una madre que no ha visto justicia para el cruel asesinato de su hija es algo que cimbra a toda una comunidad. El director y guionista dice estar interesado en las palabras, su sonido y la forma como se expresa cada personaje.

Con una filmografía breve pero contundente, McDonagh se consolida como uno de los realizadores más importantes de su generación y de los tiempos turbulentos que vivimos. Sin importar cualquier diferencia cultural, el director entiende que las emociones humanas se transmiten a través de señas y gestos que prácticamente todos podemos entender, semos británicos, estadounidenses o mexicanos. Sin duda, estamos ante un director que no hará otra cosa que volver a sorprender una y otra vez con historias humanas en las que el absurdo siempre convive con el melodrama.



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