BlacKkKlansman, de Spike Lee, ya tiene calificación de la crítica

Han pasado 27 año desde que Spike Lee debutó en la Riviera francesa con Jungle Fever - 81%, y su regreso no podía ser más celebrado que con una película que lo devuelve a sus raíces mordaces, El Infiltrado del KKKlan - 85%, una biopic de humor negro, negrísimo, provocadora e hiriente. Eso nos anuncian las primeras críticas que llegan desde la Croisette, y que le han dado este día el Gran Premio del Jurado del 71 Festival de Cannes presidido por Cate Blanchett, y compuesto por directores como Denis Villeneuve y Ava DuVernay. Lee lleva a la pantalla grande su personalísima versión de una historia de la vida real, la de un oficial de policía afroamericano, Ron Stallworth, que logró infiltrarse en el Ku Klux Klan en la década de los años 70.

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Un relato que suena disparato, inverosímil, pero que no puedo haber encontrado mejor receptor que Lee. John David Washington y Adam Driver dan vida a los agentes encubiertos que harán equipo para lograr infiltrarse en el KKK en una época de gran agitación social con la encarnizada lucha por los derechos civiles como telón de fondo. Stallworth (Washington) se convierte en el primer detective negro del departamento de policía de Colorado Springs, pero es recibido con escepticismo y hostilidad por los mandos y los agentes. A pesar de ello se enrola en esa peligrosa misión con el objetivo de hacer algo por su comunidad. El oficial se hace pasar un racista extremista y logra convencer vía telefónica al grupo de que es blanco. Su versión blanca en las reuniones en vivo será su compañero, el detective Flip Zimmerman (Driver).

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Los periodistas cinematográficos en su mayoría coinciden en que esta es la película más divertida del cineasta, una en la que se nota que el realizador de Haz Lo Correcto - 92%, Malcolm X - 91%, She's Gotta Have It - 93% y más, se la pasó bien y se dejó llevar sin perder nunca la brújula. De ese modo construyó una sátira y un thriller delirante, un híbrido surrealista. El Infiltrado del KKKlan - 85% no defraudó al ser una de las películas más esperadas de la competencia. Su primera virtud, remarcan los especialistas es, pura y simplemente, haber llevado a la pantalla grande la historia inverosímil pero verdadera en la que está inspirada con un tono que suena a una mala broma hasta que caes en cuenta su doloroso origen. Spike logra que el espectador se revuelva de la risa en su asiento pero remueve conciencias.

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Aquí las críticas al largometraje número 38 de Spike Lee:

Stephanie Zacharek, de TIME:

Lee sabe el enorme potencial de la premisa de su película y se deja llevar: la historia de Stallworth es tan descabellada que apenas se puede creer, pero ciertamente no es más salvaje que el virulento resurgimiento de la supremacía blanca en Estados Unidos, tan extremo que va más allá del alcance de la sátira. BlacKkKlansman es entonces a la vez hilarante y exquisitamente directa.

Peter Debruge, de Variety:

Un gran renacimiento de Spike Lee con esta increíble historia real que le da al director una oportunidad de enfocar su frustración de manera constructiva. La sorprendente historia real de una de las investigaciones encubiertas más arriesgadas en la historia de los Estados Unidos: un improbable caso de principios de los 70 en el que el detective negro Ron Stallworth ( John David Washington ) solicitó una membresía para ingresar al Ku Klux Klan, es una historia de empoderamiento negro convincente que explora los problemas de la representación afroamericana en más de un siglo en el cine.

Carlos Boyero, de El País:

Hay situaciones que están descritas con ingenio, diálogos graciosos, sarcasmo efectivo. Pero igualmente personajes que son de una pieza, una maldad y estupidez en los villanos que rozan lo grotesco. Spike Lee no deja pensar al receptor sino que le impone su inflexible punto de vista, pretende manipularle todo el rato.

Peter Debruge, de Variety:

Un gran renacimiento de Spike Lee con esta increíble historia real que le da al director una oportunidad de enfocar su frustración de manera constructiva. La sorprendente historia real de una de las investigaciones encubiertas más arriesgadas en la historia de los Estados Unidos: un improbable caso de principios de los 70 en el que el detective negro Ron Stallworth ( John David Washington ) solicitó una membresía para ingresar al Ku Klux Klan, es una historia de empoderamiento negro convincente que explora los problemas de la representación afroamericana en más de un siglo en el cine.

Emily Yoshida, de Vulture:

BlacKkKlansman de Spike Lee es elegante, hilarante y totalmente inflexible. Lee juega con las alusiones a Trump y al desastroso gobierno americano actual a lo largo de la película, una veces más cursi que otros momentos, pero los minutos finales eliminan cualquier apariencia de broma. Lee no se arriesga con vaguedades o elipsis, y tampoco debería hacerlo. BlacKkKlansman juega con la mecánica de la fantasía blaxploitation, no deja a nadie con ninguna pregunta sobre lo que es real.

David Ehrlich, de IndieWire:

Spike Lee detona un divertido justo y furioso 'fuck you' Trump. BlacKkKlansman empaqueta temas tan pesados ​​y ultra relevantes en forma de una noche tremendamente irregular pero consistentemente entretenida en el cine. Si El Nacimiento de una Nación fue una historia escrita con un rayo, BlacKkKlansman, es el redoble ensordecedor del trueno que hemos estado esperando desde entonces.

Tim Robey, de Telegraph:

La comedia del Ku Kux Klan de Spike Lee es una contendiente divertida de Cannes. El director cuyos inicios fueron en la Riviera francesa está de vuelta en la competencia, y se anota un hit con BlacKkKlansman, su increíble pero real versión de un policía negro que logró para inscribirse en el KKK. Después de Chi-Raq y She's Gotta Have It, el director inquieto tiene más combustible que nunca, atacando el espectro de la supremacía blanca en Estados Unidos. ¿El resultado? Un embriagador híbrido de comedia y drama criminal de época.

A.A. Dowd, de A. V. Club:

Podría decirse que Spike Lee ha filmado su película más divertida hasta el momento. No tiene la personalidad volcánica y el poder del mejor trabajo de Spike, como su atemporal Do The Right Thing, y le falta la gran indignación bautizadora de su Bamboozled, una de las películas más cáusticamente veraces (y subestimadas) que se haya hecho sobre cuán profundamente el racismo ha penetrado en los poros de nuestra cultura. Pero BlacKkKlansman, que Lee produjo con Jordan Peele y Blumhouse, tiene la marca de la casa del realizador. Una reaparición entusiasta del escritor y director: una divertida biopic, desordenada, a veces desenfrenadamente divertida, sobre pelear y burlarse de los matones cabezas rapadas de Estados Unidos.

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