Mientras las luminarias en Venecia se apagan este año, Toronto comenzó actividades esta semana. Anoche se presentó Beautiful Boy: Siempre serás mi hijo - 53% del director belga, Felix Van Groeningen, quien anteriormente ganó el respeto de la crítica por cintas como Broken Circle Breakdown (2012) que fue nominada al Óscar a mejor película extranjera.
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El gran aclamado de la noche fue el actor Llámame Por Tu Nombre - 97% y Lady Bird - 97%, Timothée Chalamet, quien interpreta al joven Nic Sheff, hijo del veterano periodista David Sheff, interpretado por Steve Carell en la cinta. El periodista junto a su hijo documentaron el proceso de adicción a la metanfetamina que sufrió el joven.
La crítica ha alabado la interpretación del joven, quien desarrolla un círculo de “miedo y resentimiento”, de acuerdo a Eric Kohn. La cinta como trabajos anteriores del cineasta Belga, cuenta con un sólido soundtrack el cual se amalgama al desarrollo de la trama, en su repertorio podemos encontrar canciones de David Bowie, Jeff Buckley, Nirvana, Neil Young, Sigur Ros o Henryk Gorecki.
La historia coloca al personaje de Chalamet en la universidad donde conoce a una chica y todo parece ir bien. Una botella con píldoras en un baño y una fiesta desencadenarán una terrible adicción en el joven, a la que deberá enfrentarse junto a su padre, su madre (Amy Ryan) y su madrastra (Maura Tierney).
La crítica también ha hablado sobre la homogeneidad de las actuaciones en pantalla que permiten el avance de la cinta al mismo ritmo. Otro adjetivo que han usado regularmente es desgarradora, literal, y además devastadora. Esta película mantiene al espectador continuamente entre los dos posibles finales de una historia de adicciones “la sobriedad o la muerte”. Una historia de amor meticulosamente armada que lleva a cuestas un cúmulo de altibajos, de recaídas y recuperaciones.
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Una oportunidad de conjugar a un par de magníficos actores, esta cinta, como buena película de adicciones cuenta con una construcción de personajes “profunda e intensa”, y les permite explorar la dimensión y el dolor que el periodista plasmó en sus memorias. El trabajo de Timothee fue impecable al igual que en sus pasadas colaboraciones en 2017.
Por su parte, Carell ha demostrado en los últimos años que es más que un simple actor de comedia, otorgando magníficas actuaciones en dramas, sin perder la chispa para regresar a sus origines en la comedia. Carell es uno de los actores más versátiles de su generación y ha logrado superar el reto y la exigencia que este personaje le exigía.
La cinta tiene su estreno programado para el próximo 12 de octubre en las salas estadounidenses, en México todavía no hay una fecha probable de estreno, aunque si lograse una nominación al Óscar podría llegar a los cines nacionales antes de febrero del próximo año.
Steve Pond en TheWrap:
El director belga Felix van Groeningen no hace películas a medias. Hace grandes, extensas y emocionantes, cuyo último ejemplo es “Beautiful Boy”.
Eric Kohn en indieWire:
Beautiful Boy es una desgarradora historia detectivesca parental, con David Sheff (Steve Carell) dentro de un doloroso ciclo de miedo y resentimiento de cómo él trata de ayudar a su hijo en edad universitaria, Nic (Timothée Chalamet) que ha caído en una debilitante adicción a las drogas.
Leah Greenblatt en Entertainment Weekly:
Las historias de adicción desarrollan diferentes conflictos, pero sólo tienen dos posibles finales: sobriedad o la muerte.
Todd McCarthy en Hollywood Reporter:
Los actores aman las películas relacionadas con las adicción porque proveen una excelente oportunidad de ir profundo e intenso en el personaje.
Owen Gleiberman en Variety:
No quiero decir que hacer Beautiful Boy se una clase de servicio público, pero en un punto crucial: le demuestra a las personas que pasan por este infierno que no están solos.
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Chris Bumbray en JoBlo's Movie Emporium:
Es madura, ya que muestra que en realidad no hay curación para la adicción y que incluso en los mejores escenarios, no se puede deshacer el daño.
Benjamin Lee en Guardian:
En Beautiful Boy, al personaje de Steve Carell se le recuerda que la recaída es parte de la recuperación, un duro recordatorio de que la sobriedad no se obtiene fácilmente, es el resultado de un trabajo duro.
Matt Goldberg en Collider:
La película muestra cómo "la recaída es parte de la recuperación", ya que Nic abandonará su hábito durante meses, pero finalmente comenzará a consumir drogas.
Fionnuala Halligan en Screen International:
El hábito de Nic es introspectivo y auto dirigido: se enseña a inyectarse solo desde Internet.
Jordan Ruimy en World of Reel:
En todo caso, se merece más tiempo de grabación, en algunos tramos desaparece por completo de la historia.
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