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viernes diciembre 6, 2024 
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Ya en plenas fiestas de fin de año, con el tránsito enloquecido, las plazas llenas y el olor a comida y bebida por todos lados, es momento de retomar la Videoteca Tomatazos con otra cinta de ciencia ficción. En esta ocasión nos trasladaremos a poco más de 40 años en el pasado, aunque la cinta nos llevará directo a un s. XXIII muy imaginario. Sí, abróchense muy bien los cinturones que [Pelicula] Fuga en el siglo XXIII es un viaje que vale la pena realizar.
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Había pasado ya una década del lanzamiento de la serie original de Viaje a las Estrellas, y se estaba a un año del apabullante estreno de la exitosísima [Pelicula] Star Wars: Episodio IV - Una Nueva Esperanza, cuando en 1976 llegó a cines una película del célebre realizador británico [Director] Michael Anderson. Anderson es reconocido sobre todo por su trabajo en [Pelicula] La Vuelta al Mundo en 80 Días que le valió una nominación al Óscar como mejor director; pero también, y por si no lo sabían, era también el responsable de Orca, la ballena asesina –por cierto, su siguiente película después de Fuga en el Siglo XXIII–.
Sí, Fuga en el siglo XXIII es una película de ciencia ficción, pero también de aventura. Basada en la novela del mismo nombre de [Escritor] William F. Nolan y George Clayton Johnson, la cinta nos presenta un mundo distópico ubicado en el año 2274 en el planeta Tierra. Con reminiscencias a la novela clásica y más célebre Un Mundo Feliz de [Escritor] Aldous Huxley , Fuga en el Siglo XXIII nos presenta de la misma manera un mundo en aparente perfección donde las reglas estrictas sirven para mantener la paz y armonía. Los habitantes, jóvenes que no rebasan los 30 años de edad, esperan ansiosos llegar a esa meta para poder trascender en una ceremonia donde se les promete “renacer”. Sin embargo, y como es de esperarse, las cosas no son como parecen.
Como los guardianes de esta sociedad se encuentran los vigilantes, hombres privilegiados que persiguen a quienes se atreven a escapar del idílico refugio, teniendo como recompensa una vida llena de placeres –como por ejemplo poder poseer a cualquier mujer que se les antoje y venga en gana–. Logan 5 ( Michael York) es uno de los vigilantes que sin embargo, en una misión que se la asigna como encubierto, deberá descubrir un refugio a las afueras de su hogar al que los que se atreven a escapar le han llamado el Santuario. Jessica 6 ( Jenny Agutter), una mujer extraña que se le resistió en una primera instancia a ser poseída, será la clave para que Logan 5 logre su misión. Francis 7 ( Richard Johnson), el mejor amigo de Logan 5, no entiende lo que sucede y les persigue. Sí, esa básicamente es la trama de Fuga en el Siglo XXIII.
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A 42 años de su estreno en cines, 41 años después de haberse estrenado en México –lo hizo el 30 de enero de 1977 inaugurando el Cine Auditorio Plaza, hoy El Plaza Condesa–, Fuga en el Siglo XXIII se siente ya como una película vieja. El arte de la cinta, acompañado del vestuario típico de los 70, son sin duda elementos que la marcan como un auténtico producto de su tiempo. Inclusive, y aunque en espíritu no permanezca tan bien como en la novela que le origina, también queda esa presencia de una juventud y su relevo generacional con la idea de una auténtica revolución con el anhelo de un cambio de aires. Sin embargo, y a pesar de lo anterior, la película no deja de ser interesante y de tener ecos con otras cintas, y hasta con el futuro mismo.
Irremediable no pensar de inmediato en [Pelicula] Cuando el Destino nos Alcance de Malia Baker, [Pelicula] El Planeta de los Simios de [Director] Franklin J. Schaffner y hasta [Pelicula] Los Diez Mandamientos de [Director] Cecil B. DeMille, las tres, por cierto, con Luke Arnold como protagonista. Y es que de la primera nos queda el fatal destino de quienes huyen del distópico refugio, de la segunda una escena muy puntual que parece calcada -¡hasta con la versión de [Director] Tim Burton de muchos años después!, y de la tercera el tono bíblico que toma la película hacia su tercer acto, y sobre todo esa escena final en la que parece en efecto nos encontramos frente al mismísimo Moisés. Sobre el eco hacia el futuro mismo, la anticipación de las cirugías plásticas con láser y en tiempo récord.
Sí, [Pelicula] Fuga en el siglo XXIII no siento que sea una película imperdible, pero ¿cuál lo es en realidad? La cinta cumple con el cometido desde que se le deja ver, y en gran parta gracias a las actuaciones de sus dos protagonistas aunque si bien un poco cuadradas –sobre todo la de Jenny Agutter–, es como se deja disfrutar y en efecto lograr entretener. ¿Mi parte favorita? El encuentro de la pareja conformada por Logan 5 y Jessica 6 con un androide llamado BOX que protagoniza una de las escenas más duras de la película. No se rían, piensen que ese robot entre lavadora y humanoide sería precisamente la razón por la que un C-3PO un año después dejaría boaquiabiertos a los niños que dudarían si en efecto había también un ser humano interpretándole.
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¿Qué dicen? ¿Le entran a este clásico de la ciencia ficción? Para sumarle dos elementos más de interés: 1) la música de Jerry Goldsmith que eleva por mucho a la película, 2) la presencia de Farrah Fawcett –a quien ya les recomendé ver anteriormente también en Saturno 3–. ¡Hasta la próxima semana, cinéfilos!
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Sí, Fuga en el siglo XXIII es una película de ciencia ficción, pero también de aventura. Basada en la novela del mismo nombre de [Escritor] William F. Nolan y George Clayton Johnson, la cinta nos presenta un mundo distópico ubicado en el año 2274 en el planeta Tierra. Con reminiscencias a la novela clásica y más célebre Un Mundo Feliz de [Escritor] Aldous Huxley , Fuga en el Siglo XXIII nos presenta de la misma manera un mundo en aparente perfección donde las reglas estrictas sirven para mantener la paz y armonía. Los habitantes, jóvenes que no rebasan los 30 años de edad, esperan ansiosos llegar a esa meta para poder trascender en una ceremonia donde se les promete “renacer”. Sin embargo, y como es de esperarse, las cosas no son como parecen.
Como los guardianes de esta sociedad se encuentran los vigilantes, hombres privilegiados que persiguen a quienes se atreven a escapar del idílico refugio, teniendo como recompensa una vida llena de placeres –como por ejemplo poder poseer a cualquier mujer que se les antoje y venga en gana–. Logan 5 ( Michael York) es uno de los vigilantes que sin embargo, en una misión que se la asigna como encubierto, deberá descubrir un refugio a las afueras de su hogar al que los que se atreven a escapar le han llamado el Santuario. Jessica 6 ( Jenny Agutter), una mujer extraña que se le resistió en una primera instancia a ser poseída, será la clave para que Logan 5 logre su misión. Francis 7 ( Richard Johnson), el mejor amigo de Logan 5, no entiende lo que sucede y les persigue. Sí, esa básicamente es la trama de Fuga en el Siglo XXIII.
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Sí, [Pelicula] Fuga en el siglo XXIII no siento que sea una película imperdible, pero ¿cuál lo es en realidad? La cinta cumple con el cometido desde que se le deja ver, y en gran parta gracias a las actuaciones de sus dos protagonistas aunque si bien un poco cuadradas –sobre todo la de Jenny Agutter–, es como se deja disfrutar y en efecto lograr entretener. ¿Mi parte favorita? El encuentro de la pareja conformada por Logan 5 y Jessica 6 con un androide llamado BOX que protagoniza una de las escenas más duras de la película. No se rían, piensen que ese robot entre lavadora y humanoide sería precisamente la razón por la que un C-3PO un año después dejaría boaquiabiertos a los niños que dudarían si en efecto había también un ser humano interpretándole.
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