Dragon Ball Súper: Broly | Un regalo divino de Shenlong para los fans

Luego del furor que despertó Dragon Ball Super el año pasado, las expectativas no eran pequeñas para Dragon Ball Super: Broly - 90%, el filme que continuaría con la historia de Goku y Vegeta y que por fin haría canónico al sayajin que le da título y, de una forma que los seguidores encontrarán espectacular, la cinta logra cumplir todos los puntos que habría que pedirle a un largometraje basado en el clásico anime de luchadores alienígenas.

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Dirigida por Tatsuya Nagamine y escrita por el creador original de los personajes, Akira Toriyama , la película cuenta la caída del planeta y la raza de los sayajin y cómo es que esos hechos pusieron en colisión, primero los destinos de Goku y Vegeta, y ahora vuelven a tomar relevancia con el descubrimiento de Broly, otro guerrero con un nivel de pelea nunca antes visto que podría amenazar la paz que finalmente parece reinar en el universo.

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Para los que no gustan de la franquicia, será difícil ver en el filme algo más allá de un entretenimiento complaciente con los fans. Pero para los seguidores de las aventurada de Goku, la película es al mismo tiempo un recordatorio de todo lo que hizo genial al anime y un paso hacia lo que podría ser uno de los más prometedores nuevos episodios en la historia de la saga.

No es necesario haber visto más allá de Dragon Ball Z para entender los hechos de la historia y, en un guiño a algunos de los mejores momentos de las temporadas pasadas, la película hace referencia a sucesos emblemáticos que considera pertinentes para contextualizar mejor las relaciones entre los protagonistas. Al hacer esto, el filme parece rendir homenaje al anime antes que explotarlo por su valor nostálgico.

Los fans de la saga buscan peleas excesivas y eso es justamente lo que recibirán con Dragon Ball Super: Broly - 90% una vez que Broly, Goku y Vegeta comienzan su batalla. La animación explora nuevos caminos en algunas de estas secuencias y aunque algunos podrían preferir el estilo clásico de las primeras entregas de televisión, es defendible que para la pantalla grande los animadores hayan buscado algo extra para ofrecer y ayudar a distinguir el poder de estos tres sayajines.

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Hay una clara intención, que parece provenir de Toriyama y su libreto, por no convertir a Broly en un villano por completo, al estilo de Freezer, sino más bien en un peón de un plan más grande y en otro protagonista que podría tener el mismo papel principal que Goku y Vegeta. Quizá el punto más débil del filme es que no llega a explotar esto a favor de dejar espacio para una inevitable secuela, dado el éxito comercial que ha conseguido esta entrega sobre todo en su natal Japón.

En términos generales, Dragon Ball Super: Broly - 90% no es nada que el público no haya visto antes, pero los seguidores de la saga sentirán como si los productores hubieran reunido las siete esferas del dragón para pedirle al legendario Shenlong que les diera todo lo necesario para replicar el éxito del anime y entre la acción, el humor y hasta el carisma de Goku, parece que eso fue exactamente lo que recibieron.

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