¿Te gustan las películas románticas? A nosotros nos encantan. De vez en cuando no es mala idea sentarse o acostarse en el sofá del hogar y ver una cinta cuyo centro son las peripecias de una pareja. A veces lloramos, a veces nos enfadamos, pero casi siempre nos alegramos al ver que los enamorados resuelven sus problemas y terminan enfrentando la vida juntos… o cuando se separan y nos damos cuenta que todo fue para bien.

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El séptimo arte se encuentra abarrotado con romances que han trastocado la vida de millones de personas. Ejemplos sobran, pero no es ninguna exageración cuando decimos que el amor en el cine ha idealizado casi de manera venenosa a las relaciones de pareja. Cuando vemos a un par de actores en la pantalla grande en medio de una situación problemática la cual superan más adelante gracias al poder del amor todo mundo se decanta por ellos y anhelan experimentar algo así en la vida real.

Cuánto daño han hecho las películas de amor romántico al amor de verdad. Los vínculos humanos son más frágiles que el mazapán y mucho más complejos en los tiempos de la modernidad tardía. Uno ya no puede simplemente arrojarse hacia la persona que nos roba los suspiros y prometer mañanas doradas o entrega infinita. Las películas románticas han deteriorado tanto al amor que cuando uno está decidido a tomarlo por las riendas terminamos chocando contra la pared e inicia un proceso de desentendimiento en donde se le resta valor a las parejas y se les comienza a ver como meros objetos de consumo. Esa es la otra cara de la moneda.



La mentira del amor romántico ha infundado miedo en la gente y ha creado a los solitarios. Pero aunque existan las parejas, estas a menudo carecen de equilibrio, son frívolas y pasajeras. En los tiempos presentes impera lo que Zygmund Bauman ha definido como amor líquido, una idea en donde el amor es delimitado por los parámetros de la industria cultural y las sociedades capitalistas. El amor romántico ha lacerado tanto al amor que este se ha convertido más que nada en un objeto para adquirir, consumir y desechar, nunca para aprender.

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Pero aunque estamos conscientes de la destrucción que las películas de amor romántico han causado en el mundo, los estudios continúan reproduciéndolas como si nada. Afortunadamente existen varios títulos que muestran una versión realista de las relaciones interpersonales en el mundo actual, y a continuación te presentamos una lista de cintas que son consideradas por expertos como los peores ejemplos del romance, así como las mejores obras de las que hay que tomar nota para nuestras futuras aventuras en pareja (vía Time Out).




PEOR:



[Pelicula] Un lugar llamado Notting Hill


Esta película es la favorita de muchos ya que varios podrían identificarse con el personaje de Hugh Grant, un hombre introvertido de contadas amistades que ha sufrido en el pasado con el tema del amor. Jo Barnett, una popular figura en el mundo del coaching, opina que esta película ilusiona a las personas con la idea de que encontrarán a su pareja ideal de forma desprevenida y para siempre. William Thacker conoce a Anna Scott en su propia librería, y aunque como en toda comedia romántica tienen sus dilemas, al final terminan casados. Algo que probablemente no pasaría en la vida real.

Roger Ebert de Chicago Sun-Times:

Esta película es brillante, el diálogo es ingenioso e inteligente, y Roberts y Grant son sumamente agradables.




MEJOR:



[Pelicula] La La Land: Una Historia de Amor


El musical que paralizó a Hollywood en 2016 tiene sus propios fallos pero la crítica opina que sí que hace un buen trabajo al momento de presentarnos el ejemplo de una pareja real en la actualidad. La relación entre Mia y Sebastian fue armoniosa y duradera, por mucho tiempo se apoyaron y se ayudaron a crecer, pero finalmente cada uno decidió tomar caminos diferentes para alcanzar sus sueños. Justo en la escena final cuando tienen su vida hecha, se miran y sonríen, descubren que aunque ya no están juntos todo lo que vivieron valió la pena.

Emmanuel Baez de Cinefiloz:

Una película para los locos que se atreven a soñar, pero no pinta ese camino con flores ni fuegos artificiales, sino en la medida necesaria para sentirse estimulado, sin olvidarse de las adversidades ineludibles ni los sacrificios que pueden ser bastante tormentosos.




PEOR:



[Pelicula] Vaselina


Este clásico de los años setenta nos presenta el romance adolescente entre Danny y Sandy. Sin embargo, muchos están de acuerdo con que el cierre del arco de Sandy es completamente indeseable, ya que se somete a una transformación extrema para terminar gustando a Danny. Es normal que la pareja nos haga cambiar, pero no a tal punto como ella lo hizo. Bajo ninguna circunstancia uno debe someterse a ese tipo de designios del otro.

Arthur Knight de The Hollywood Reporter:

Lo que la hace funcionar es su vitalidad juvenil, la tremenda energía e imaginación expandida en sus canciones de pared a pared y números de baile.




MEJOR:



[Pelicula] El Diario de Bridget Jones


Un claro ejemplo de los millones de casos que prevalecen en el mundo. Encontrar a un compañero o compañera es algo que viene acompañado de temor y confusión, y el personaje de Bridget es el espejo de lo que muchas personas enfrentan todos los días. La relación entre ella y Darcy es torpe y llena de altibajos, todo debido a la falta de diálogo entre ambos, algo increíblemente natural en las parejas modernas. Jo Barnett apunta que El Diario de Bridget Jones es un gran ejercicio que nos hacer entender los fallos en nuestras habilidades de comunicación al momento de construir relaciones. Establecer lazos toma tiempo y la palabra siempre es muy necesaria.

Jonathan Foreman de New York Post:

Cálida y encantadora y muy inteligente, es una buena comedia romántica como ninguna otra en algún tiempo.




PEOR:



[Pelicula] Baile Caliente


Todos amamos la escena en donde la pareja baila “Time of my Life”, pero la relación entre Johnny y Baby es más complicada de lo que parece. Casi siempre él termina siendo el sostén de ella, Johnny la rescata en todo momento y la historia implica que Baby dependerá de Johhny durante toda la relación, algo que no debería ocurrir. En las parejas, tríos, o cualquier tipo de relación polígama que practiques, cada quien debería ser independiente y nunca esperar a que venga otro para resolverte los problemas. El apoyo debe existir pero jamás el vivir atados.

Variety Staff de Variety:

Buena producción, algunas secuencias de baile y una actuación agradable por parte de Grey hacen de la película algo que podemos ver.




MEJOR:



[Pelicula] Dos Extraños Amantes

La escritora Sarah Stein defiende esta película como una visión realista y pesimista de lo que es el amor en realidad. Nos muestra lo difícil que es la comunicación en pareja, todas las cosas que intentamos decir pero que quedan en el subtexto de la conversación o que nunca se dicen. También señala que una relación basada en la pasión desenfrenada jamás funcionará; la gente no vive solamente de amor, y una relación a largo plazo necesita algo más que cariño. Mucho tiene que ver la idea del compromiso, la empatía, y nuestra capacidad de aceptar y convivir con las deficiencias del otro.

Roger Ebert de Chicago Sun-Times:

Viéndola otra vez, 25 años después de su estreno en abril de 1977, estoy sorprendido de como cada escena tras escena cuenta una familiaridad instantánea.




MEJOR:



[Pelicula] Star Wars: Episodio III - La Venganza de los Sith

Una cinta no tan cercana al género romántico pero que incluye un claro ejemplo de pareja tóxica promedio. La relación disfuncional entre Anakin y Padmé es tan realista que no solo nos lastimó por el hecho de ver a un par de héroes terminar separados (uno calcinado y la otra muerta), también por el terrible manejo que le dieron a su vínculo. Un factor importante fue la diferencia de edad, pero lo que terminó por sepultar su matrimonio fue la falta de comunicación, prefirieron ignorar sus problemas en vez de enfrentarlos. La película nos enseña muy bien el lado oscuro de las relaciones humanas.

Richard Corliss de TIME Magazine:

Un importante y vigoroso entretenimiento popular, una imagen que recupera y sostiene la Fuerza fílmica que Lucas soñó hace mucho tiempo, en una industria del cine que parece estar lejos, muy lejos.

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