Keanu Reeves es uno de esos actores de Hollywood que simplemente no es desagradable en ningún sentido. Comenzó en la industria del cine muy joven y desde entonces no se ha detenido, casi todos los años lo vemos aparecer en varias películas, muchas de gran éxito.
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Reeves es famoso por aparecer en cintas como La Magnifica Aventura de Bill & Ted - 79%, El Abogado del Diablo - 66% y Máxima Velocidad - 93%, pero el papel que lo convirtió en una leyenda del séptimo arte es Neo en Matrix - 87%, Matrix Recargado - 73% y Matrix: Revoluciones - 36%; esta sobresaliente trilogía de las hermanas Wachowski es un hito de la ciencia ficción y de la inminente llegada del siglo XXI.
En los últimos años hemos visto a Keanu participar en una importante cantidad de proyectos, pero lo más sobresaliente es la saga de John Wick, un personaje fantástico que le ha dado otro gran impulso a su buena fama. Con el rol del peligroso asesino, Reeves ha logrado otro de los papeles de su vida; la tercera entrega, John Wick 3: Parabellum - 98%, se estrenó recientemente con críticas positivas y excelentes recaudaciones, tal parece que la sangre y la violencia están lejos de terminar.
Pero más allá de lo que se ve en la pantalla grande, Keanu ha logrado ganarse al público por una buena cantidad de razones. Siempre que se le ve en alguna foto o grabación es inevitable pensar: ¡vaya, es un gran tipo! ¿Qué es lo que hace a Keanu Reeves tan especial? A continuación, te presentamos algunas de la razones.
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La trágica historia de su pasado
Tanto en la ficción como en la realidad es imposible no empatizar con alguien que ha padecido los golpes de la vida. Con 29 años, Reeves experimentó la muerte de uno de sus mejores amigos, el actor River Phoenix; en 1999, él y su novia Jennifer Syme pierden a su bebé prematura, ocho meses después ella muere en un accidente automovilístico. Su hermana menor, Kim Reeves, tuvo leucemia un tiempo, época en la que Keanu utilizó todo su tiempo para acompañarla.
Tras estos duros acontecimientos, en especial por lo de Syme, Keanu se sumió en una profunda depresión. Por fortuna, sus ganas de vivir fueron mayores y poco a poco logró salir adelante sin dejar de lado su carrera en el cine.
No le interesa el dinero
Aunque tiene una fortuna de aproximadamente US$ 350 millones, el dinero no es un tema que llame su atención. Su casa en Los Angeles es grande y bonita, pero no se compara en lo absoluto con las grandes mansiones que poseen otros actores con menos recursos que él. Keanu se inclina por las ropas de precios normales, los viajes en metro y los vuelos de clase turista. Los lujos que su dinero podrían concederle simplemente no le interesan. Sencillez al máximo.
Le gusta ayudar a las personas
Keanu también es famoso por su costumbre de hablar y ayudar a las personas necesitadas. Gusta de hacer donaciones altruistas, por ejemplo, donó 70% de sus ganancias en Matrix a asociaciones de niños con cáncer. También se le ha visto en la calle ayudando a gente sin hogar y siendo amable y caballeroso con quien lo necesite. Es de los pocos actores que se involucran con el equipo de producción de películas en tareas que requieren esfuerzo físico más allá de la actuación.
Es simpático y ama su trabajo
Quizá a través de las entrevistas Keanu pueda parecer una persona algo introvertida, pero cuando decide aparecer en público termina causando encanto entre los espectadores. Siempre habla maravillas de sus compañeros de trabajo y de lo bien que lo pasa en el set de rodaje; disfruta de contar anécdotas sobre sus entrenamientos para papeles exigentes y motiva a las personas con pensamientos inspiradores.
Uno de sus videos más llamativos y recientes es el compartido por BuzzFeed. Keanu decide responder algunas preguntas del público rodeado de cachorros provenientes de un refugio de animales, todos listos para ser adoptados, una clara referencia a Daisy y a John. Sus interacciones con los perritos son enternecedoras.
Es atractivo
Lo más obvio de la lista, quizá. Keanu es sencillo, simpático y gentil, sin embargo, no se puede negar que una de sus grandes cualidades es su físico. Con 54 años de edad, el intérprete se conserva en un estado fenomenal, eso podemos comprobarlo con los grandes esfuerzos que ha hecho para las películas de John Wick; los entrenamientos para las grabaciones son extenuantes pero él se entrega por completo al trabajo y lo ejecuta bien. Aunque siempre ha sido un hombre de gran atractivo, la imagen que ha adoptó para el papel de Jardani Jovonovich alias John Wick, le ha concedido muchos puntos extra.
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