La pirotecnia es una de las prácticas más controvertidas de los últimos tiempos, debido a su impacto negativo en el medio ambiente, así como a los peligros que representa para el ser humano y los animales. Sin embargo, en Tultepec, Estado de México, es considerada una forma de vida, la cual se retrata de manera asombrosa en el documental Pólvora y Gloria del cineasta alemán Víktor Jakovleski.

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En este filme, el realizador retrata la forma en la que vive este poblado del Estado de México, a través y a partir de la pirotecnia. La película espera llegar a los cines en mayo para ofrecer, a quien lo desee, otro punto de vista sobre lo que son celebraciones como la Feria Nacional de la Pirotecnia Tultepec.

A lo largo de 67 minutos, el director presenta un retrato con pocas voces, pero visualmente muy atractivo de los dos eventos más importantes de la Feria, por un lado, el Concurso Nacional de Castillos de Torre, y por otro, el tradicional recorrido y quema de Toros, los cuales son elaborados por las distintas familias y grupos que viven en el poblado. Tomatazos tuvo la oportunidad de hablar con Amauri Sanabria, uno de los protagonistas del filme, quien se desempeña, año con año, como artesano cartonero en la celebración.



Sanabria contó que cuando le preguntaron si podían grabar su trabajo, él aceptó con gusto, ya que quería que el mundo conociera lo que se hace en su natal Tultepec. De esta manera, el artesano se convirtió en uno de los tres protagonistas del filme.

Hay tres personajes en el documental: hay un niño, hay un artesano pirotécnico y un artesano cartonero, que ese es mi papel ahí. Entonces, a mí me invitaron a participar en este proyecto porque me preguntaron: ‘oye, amigo, ¿qué posibilidades hay de que nos permitas grabar el proceso de tu trabajo?’ y dije que sí. Viktor ya había solicitado a otros maestros artesanos que le dieran permiso de grabar su trabajo, pero le habían cerrado las puertas, pero yo le dije que para mí era mejor, porque me gustaría que otros vieran lo que se hace en mi pueblo.

Para el artista, quien ha impartido cursos de alebrijes y catrinas a grupos de niños de escasos recursos, la pirotecnia es una forma de vida y de convivencia. Es a partir de ella que se forman los lazos en su comunidad y es parte de las tradiciones de su gente.

Amauri Sanabria



Para mí la pirotecnia representa muchas cosas porque es parte fundamental para la mayoría del pueblo y es una forma de vivir. Nos enseñan de cierta manera a tenerle cierto respeto al fuego y también a seguir conviviendo con la familia, los amigos y con el mismo pueblo, conservando sus tradiciones, lo cual es muy complicado con todo lo que ha pasado últimamente, pero nosotros tratamos de ver siempre el lado bueno.

Sanabria explicó que él como artista considera que el arte está presente en esta celebración de muchas maneras y que siempre es agradable ver la riqueza de ideas que se plasman en cada uno de los toros que las familias construyen.

El papel que representa el arte aquí en la Feria Nacional y más que nada el 8 de marzo en los ‘Toritos’ es muy variado, es muy bonito porque toda la gente, todas las familias hacen el esfuerzo de sacar una pieza. Entonces, año con año, empiezan a trabajar desde enero hasta llegar el día y hay veces que como el recurso es muy poco hay que ajustarlo a lo que se pueda y, de cierta manera, es lo más padre, que cada grupo trata de representar algo, una idea, una forma de ver las cosas y lo más bonito es que es muy variado, entonces tenemos más de 300 toros de tres a cuatro metros de alto y ves tanta riqueza que te das cuenta de que hay muchos buenos artistas.

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Por otro lado, el protagonista del filme, quien trabaja en el taller Artsumex desde el que ha podido participar en proyectos importantes como festivales de música o la cinta Spectre, del director británico Sam Mendes, contó cómo es el proceso de elaboración de las estructuras que participan en la Feria de Tultepec.

Desde el taller, año con año tratamos de sacar algo diferente, algo que no se haya visto, entonces es un poco complicado. Es divertido porque nos vamos a lo más tradicional, a lo más antiguo, y luego regresamos a lo más futurista. A nosotros nos gusta siempre andar jugando, saltando de atrás para adelante y de adelante para atrás. Entonces es muy padre la parte creativa y en cuanto a la elaboración de la pieza tenemos que ver con qué materiales contamos, el tiempo también es importante y después viene la idea.

En Pólvora y Gloria, Jakovleski deja de lado las tragedias que la pirotecnia puede ocasionar y se centra sólo en plasmar cómo es la vida a partir del fuego. Sobre esto, el artesano reconoce que aunque la realidad puede ser triste, también está la parte bonita y divertida y es justo de la que habla el documental.

Casi cuatro años fueron los que estuvieron viniendo, hubo mucha información que ya no pudieron sacar en el documental porque era muy fuerte, era muy sentimental. Muchas cosas que son de gente de aquí, de familiares, vecinos, amigos que conocemos, y no querían que se viera tan triste el documental. En realidad es la triste realidad, pero así como lo hicieron quedó bonito, lograron transmitir lo que uno siente durante la elaboración y durante la quema, porque otra parte importante de esto es llegar a la quema, que yo creo que es lo más padre. Después de estar trabajando tanto en esto llegar al punto, al clímax, de que ya estás listo para saber si te vas a quemar o no, yo creo que esa es la parte divertida.

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