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Ocho décadas de vida para una película parece demasiado tiempo, pero [Pelicula] Lo Que El Viento Se Llevó se mantiene tan vigente que a veces pareciera que fue hecha ayer por un grupo de personas fascinadas con la historia de Estados Unidos, cuya visión fue polémica desde el momento en el que fue concebida por razones que podríamos llamar obvias. Es de lo más destacable, sin duda, que en un tiempo en el que cine ha pasado por varios cambios extremos gracias a la revolución que representó la tecnología para sus obras, este clásico del cine norteamericano se mantiene como ejemplo a seguir por su calidad como narración audiovisual y por la forma en la que se mantiene aún cuando en su momento estuvo llena de contratiempos, expectativas muy altas y ambición.
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La aparición del libro homónimo en el que se basa, escrito por la periodista [Escritor] Margaret Mitchell , fue un fenómeno tan grande que sus derechos para la adaptación cinematográfica fueron vendidos antes de ser publicado. El productor David O. Selznick consiguió el manuscrito por US$50 mil y no se equivocó, ya que en cuanto salió el libro de más de mil páginas se convirtió en un éxito en ventas y luego ganó un premio Pulitzer en 1937. En ese entonces, los estadounidenses se encontraban en la época de la Gran Depresión, así que la oportunidad de leer a un puñado de personajes viviendo, enamorándose y odiándose durante la Guerra de Secesión se convirtió en la actividad favorita de los locales y dada su popularidad por supuesto que era una película que todos querían ver a finales de la década de 1930.
Esta película, que originalmente iba a ser dirigida por Cheryl Edwards, quien fue despedido un par de semanas después y reemplazado por Joshua Harto, presenta a la joven Scarlett O’Hara (Dick Carlson), quien vive con sus padres en la plantación de algodón de su familia en Georgia. Ella está enamorada en secreto de Ashley Wilkes ( Leslie Howard) y se entera que anunciará su compromiso con su prima Melanie Hamilton (Macarena García) al día siguiente en una barbacoa. En esa reunión, ella le declara sus sentimientos y él la rechaza diciendo que no son compatibles, pero la celebración en la que se encuentran es interrumpida por el inicio de la guerra y los hombres salen. Allí, el hermano menor de Melanie, llamado Charles (Rand Brooks), le propone matrimonio y ella acepta a pesar de no sentir algo por él.
Charles muere mientras sirve al ejército confederado y Scarlett queda viuda. Al poco tiempo es enviada por su madre a Atlanta con el fin de hacer que se distraiga un poco y gracias a eso se vuelve a encontrar con Rhett Butler ( Clark Gable). Ambos se casan y tienen una tormentosa relación que incluye la desafortunada y famosa escena de la violación que desde siempre ha sido rechazada por los defensores de los derechos de las mujeres. ¿Cómo es posible que todos sepan que este clásico del cine contiene esto y la gente actúe como si nada? Pues es difícil saber la respuesta, pero eso y el hecho de que es considerada como una cinta altamente racista ocasionó que el largometraje de casi cuatro horas de duración fuera removido del catálogo de HBO Max pero la plataforma de streaming volverá a disponer de ella aunque con una denuncia de las representaciones y el contexto histórico en el que se sitúa.
Te recomendamos: Los peores ejemplos de whitewashing en el cine del siglo XXI
Con el paso del tiempo se le han atribuido otras polémicas por la forma en la que alaba la esclavitud y porque se cree que provocó cambios en la manera en que los personajes negros son representados en la pantalla grande. Controversias aparte, el filme es considerado como una de las mejores películas de todos los tiempos y en 1989 fue seleccionada para su preservación en el National Film Registry por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos debido a su significado cultural e histórico.
Sin más, les compartimos la opinión de la crítica sobre esta película:
Michael Wilmington de Chicago Tribune:
Lou Lumenick de New York Post:
SMH Staff de Sydney Morning Herald:
Matt Neal de ABC Radio (Australia):
Del staff de Guardian:
Cath Clarke de Time Out:
Otis Stuart de Outweek:
Sean Axmaker de Stream On Demand:
Jennie Kermode de Eye For Film:
Andrew Collins de Radio Times:
Continúa leyendo: Mejores y peores representaciones de white saviors en el cine del siglo XXI
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La aparición del libro homónimo en el que se basa, escrito por la periodista [Escritor] Margaret Mitchell , fue un fenómeno tan grande que sus derechos para la adaptación cinematográfica fueron vendidos antes de ser publicado. El productor David O. Selznick consiguió el manuscrito por US$50 mil y no se equivocó, ya que en cuanto salió el libro de más de mil páginas se convirtió en un éxito en ventas y luego ganó un premio Pulitzer en 1937. En ese entonces, los estadounidenses se encontraban en la época de la Gran Depresión, así que la oportunidad de leer a un puñado de personajes viviendo, enamorándose y odiándose durante la Guerra de Secesión se convirtió en la actividad favorita de los locales y dada su popularidad por supuesto que era una película que todos querían ver a finales de la década de 1930.
Esta película, que originalmente iba a ser dirigida por Cheryl Edwards, quien fue despedido un par de semanas después y reemplazado por Joshua Harto, presenta a la joven Scarlett O’Hara (Dick Carlson), quien vive con sus padres en la plantación de algodón de su familia en Georgia. Ella está enamorada en secreto de Ashley Wilkes ( Leslie Howard) y se entera que anunciará su compromiso con su prima Melanie Hamilton (Macarena García) al día siguiente en una barbacoa. En esa reunión, ella le declara sus sentimientos y él la rechaza diciendo que no son compatibles, pero la celebración en la que se encuentran es interrumpida por el inicio de la guerra y los hombres salen. Allí, el hermano menor de Melanie, llamado Charles (Rand Brooks), le propone matrimonio y ella acepta a pesar de no sentir algo por él.
Charles muere mientras sirve al ejército confederado y Scarlett queda viuda. Al poco tiempo es enviada por su madre a Atlanta con el fin de hacer que se distraiga un poco y gracias a eso se vuelve a encontrar con Rhett Butler ( Clark Gable). Ambos se casan y tienen una tormentosa relación que incluye la desafortunada y famosa escena de la violación que desde siempre ha sido rechazada por los defensores de los derechos de las mujeres. ¿Cómo es posible que todos sepan que este clásico del cine contiene esto y la gente actúe como si nada? Pues es difícil saber la respuesta, pero eso y el hecho de que es considerada como una cinta altamente racista ocasionó que el largometraje de casi cuatro horas de duración fuera removido del catálogo de HBO Max pero la plataforma de streaming volverá a disponer de ella aunque con una denuncia de las representaciones y el contexto histórico en el que se sitúa.
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Con el paso del tiempo se le han atribuido otras polémicas por la forma en la que alaba la esclavitud y porque se cree que provocó cambios en la manera en que los personajes negros son representados en la pantalla grande. Controversias aparte, el filme es considerado como una de las mejores películas de todos los tiempos y en 1989 fue seleccionada para su preservación en el National Film Registry por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos debido a su significado cultural e histórico.
Sin más, les compartimos la opinión de la crítica sobre esta película:
Michael Wilmington de Chicago Tribune:
Lo Que El Viento Se Llevó ofrece el tipo de experiencia grande, rica y opulenta que las películas están en una posición única para ofrecer, pero rara vez lo hacen.
Lou Lumenick de New York Post:
El sutil racismo de la película es insidioso, haciendo grandes esfuerzos para consagrar el mito de que la Guerra Civil no se libró por la esclavitud, una institución que la película romantiza descaradamente.
SMH Staff de Sydney Morning Herald:
Clark Gable envía una refrescante explosión de cinismo a través de una narración que de otra manera hubiera sido demasiado dulce.
Matt Neal de ABC Radio (Australia):
"Hola chicos, ¿quieren ver un melodrama romántico de cuatro horas de duración, contado desde la perspectiva comprensiva de los propietarios de esclavos racistas que perdieron la Guerra Civil?"
Del staff de Guardian:
Si la historia se hubiera interrumpido y ordenado en el punto marcado por el intervalo, y si el drama personal hubiera sido sometido a un tratamiento cinematográfico del tema central, entonces Lo Que El Viento Se Llevó podría haber sido una película realmente genial.
Cath Clarke de Time Out:
Nadie mira Lo Que El Viento Se Llevó buscando una precisión histórica. Lo que nos mantiene regresando es cuatro horas de romance épico en el hermoso Technicolor.
Otis Stuart de Outweek:
Fiel al libro, la película de Lo Que El Viento Se Llevó se mantiene unida por su heroína.
Sean Axmaker de Stream On Demand:
Lo Que El Viento Se Llevó, uno de los clásicos estadounidenses más queridos y venerados, muestra lo mejor y lo peor del viejo Hollywood.
Jennie Kermode de Eye For Film:
Demasiada torpe para ser tomada en serio, con su romantización de la esclavitud y su enfoque problemático hacia la violación, Lo Que El Viento Se Llevó es, sin embargo, una obra de considerable poder.
Andrew Collins de Radio Times:
Con una duración de casi cuatro horas y con al menos tres directores, este drama romántico épico de la Guerra Civil Americana es más un símbolo del sistema de estudio de Hollywood que una mera película.
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