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viernes diciembre 6, 2024 
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Durante un panel de TheOneRing.Net, dedicado a Karina Gidi y su obra, una de las participantes informó que la actriz británica de origen africano e iraní Sophia Nomvete estaba feliz por aportar algo de diversidad al universo de la Tierra Media, el cual no fue diverso en lo absoluto en las películas de [Director] Peter Jackson ([Pelicula] Muertos de Miedo, [Pelicula] King Kong 2005, [Pelicula] Jamás Llegarán a Viejos). En la serie de Amazon que estará ambientada en la Segunda Edad del Sol, además de Nomvete, están confirmados al menos otros tres actores de color como Jalyn Hall ([Temporada] Homeland (6), [Pelicula] Hotel Mumbai: El Atentado, [Pelicula] El Escándalo), actriz británica de origen iraní; Ismael Cruz Cordova ([Pelicula] Las Dos Reinas, [Pelicula] Miss Bala: Sin Piedad, [Temporada] The Mandalorian), actor puertorriqueño; y Tyroe Muhafidin, un joven actor australiano.
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Pero incluso con el elenco confirmado, hay personas que no estaban seguras de que habría inclusión hasta que Sophia Nomvete dijo que en Amazon están realmente comprometidos con dar a la producción la diversidad que no tuvieron las adaptaciones cinematográficas. Cuando la noticia comenzó a ser difundida, los comentarios en contra fueron abundantes, muchos decían que la serie estaba arruinada y que estaban destruyendo el legado de Tolkien, pero ¿realmente es así?
La realidad es que tomando en cuenta las obras del escritor inglés podemos descubrir que su universo tiene el potencial de ser tan inclusivo como sea necesario, y quizá los fanáticos caen en el error de considerar como algo canónico e inamovible el que todos los humanos del lado de los buenos son blancos y las personas de color solo pueden formar parte de las filas del enemigo como en las películas.
Arda, el mundo en el universo de Tolkien, vio aparecer a los seres humanos después de los elfos, y luego se dividieron en diversas razas. Aunque la palabra “raza” es un término anticuado para referirse a los pueblos humanos y sus características físicas, recordemos que Tolkien vivió entre 1892 y 1973, así que dejando a un lado la polémica que podría generar la palabra raza, es notorio que en Arda existían seres humanos de aspecto diverso, los de Harad eran de piel muy oscura y grandes y fuertes, mientras que los orientales eran bajos de estatura y de piel oscura. Como las obras de Tolkien estaban inspiradas, entre otras cosas, en la historia de Europa, los hombres del oriente y del sur tendrían sus contrapartes reales en África y Asia.
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Muchos fans de la fantasía utilizan eso para objetar que se incluyan personajes de color entre culturas inspiradas en la Europa medieval, pero la realidad es que no existió una Europa medieval sin personas de color, ese es otro mito que los medios nos han vendido y que nos hemos creído. Por otro lado, en la Tierra Media los casos de racismo y discriminación que fueron mencionados por Tolkien, son descritos como acciones perversas y en ningún modo como actos loables, así que es muy razonable imaginar una Tierra Media con diversidad étnica.
La cantidad de personajes femeninos que aparecen en El Señor de los Anillos no se compara con la gran cantidad de personajes masculinos, pero en El Silmarillion, los Cuentos Inconclusos y los Apéndices podemos encontrar una gran cantidad de mujeres con roles importantes en la historia, desde novias y esposas fieles hasta guerreras y grandes reinas. En El Señor de los Anillos la más destacada es Éowyn, pero ella solo es una entre varias que son mencionadas por Tolkien desde el principio de los tiempos. El universo literario del autor inglés no es misógino ni está en contra de las mujeres como han señalado numerosas feministas. Peter Jackson y su equipo trataron de crear un personaje femenino para la trilogía de El Hobbit, lamentablemente también crearon un triángulo amoroso que impidió a Tauriel ser más que un cliché, lo cual molestó a los fans. No obstante, la idea de incluir más personajes femeninos no es un error, incluso Tolkien aceptó y recibió de buena manera que en una adaptación teatral de El Hobbit de 1968 se cambiara al rey de los elfos por una reina.
En el pasado se ha reprochado a Tolkien que en la Tierra Media no hay sexualidad, por el hecho de que no es un tema que aborde directamente el escritor en sus libros principales, pero el que no haya descripciones de encuentros sexuales no convierte a su universo en uno asexual. En lo que se refiere a preferencias no-heterosexuales, existe un personaje de El Silmarillion en el que muchos han visto a un hombre homosexual, Túrin Turambar, por su falta de interés en las mujeres y por el amor desmedido que sentía hacia su amigo Beleg, a quien besa en la boca luego de asesinarlo sin darse cuenta; dicha escena aparece en El Libro de los Cuentos Perdidos, Parte 2, de la Historia de la Tierra Media. ¿Aprobaría Tolkien personajes LGBTQ en una adaptación de su obra? Tal vez no, ya que era un hombre católico y en su tiempo la homosexualidad era considerada una enfermedad. Sin embargo, su aspiración era que la Tierra Media fuera un mundo creíble, basado en la realidad, y en la realidad existen las personas LGBTQ.
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Finalmente las personas con algún tipo de discapacidad, que en ocasiones son olvidadas cuando se habla de inclusión, siempre han existido en el universo de Tolkien, algunos de los ejemplos más celebres son Beren, a quien se le llamó Erchamion (el manco), pues perdió su mano derecha; asimismo Maedhros, otro de los personajes más importantes de El Silmarillion, pierde una de sus manos. También encontramos el caso de Trotter, el personaje que más tarde se convertiría en Aragorn, originalmente era un hobbit cuyos pies habían sido cortados en Mordor y utilizaba prótesis de madera.
La importancia de la inclusión radica en que permite a más personas verse reflejadas en los medios y sentirse incluidas en la sociedad, es el antídoto para la discriminación que por tanto tiempo se cristalizó en las películas y series. Quien realmente haya leído los libros de Tolkien o haya disfrutado de las adaptaciones cinematográficas de Peter Jackson, sabe que más allá de la increíble imaginación del autor y de sus historias maravillosa, están los valores de la amistad, la lealtad y el respeto entre diferentes especies y culturas sin importar la apariencia física o las costumbres. El Señor de los Anillos nos inspira a ser mejores y luchar por un mundo mejor, así que honremos ese invaluable legado dejando atrás los prejuicios del pasado.
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Pero incluso con el elenco confirmado, hay personas que no estaban seguras de que habría inclusión hasta que Sophia Nomvete dijo que en Amazon están realmente comprometidos con dar a la producción la diversidad que no tuvieron las adaptaciones cinematográficas. Cuando la noticia comenzó a ser difundida, los comentarios en contra fueron abundantes, muchos decían que la serie estaba arruinada y que estaban destruyendo el legado de Tolkien, pero ¿realmente es así?
La realidad es que tomando en cuenta las obras del escritor inglés podemos descubrir que su universo tiene el potencial de ser tan inclusivo como sea necesario, y quizá los fanáticos caen en el error de considerar como algo canónico e inamovible el que todos los humanos del lado de los buenos son blancos y las personas de color solo pueden formar parte de las filas del enemigo como en las películas.
Diversidad étnica
Arda, el mundo en el universo de Tolkien, vio aparecer a los seres humanos después de los elfos, y luego se dividieron en diversas razas. Aunque la palabra “raza” es un término anticuado para referirse a los pueblos humanos y sus características físicas, recordemos que Tolkien vivió entre 1892 y 1973, así que dejando a un lado la polémica que podría generar la palabra raza, es notorio que en Arda existían seres humanos de aspecto diverso, los de Harad eran de piel muy oscura y grandes y fuertes, mientras que los orientales eran bajos de estatura y de piel oscura. Como las obras de Tolkien estaban inspiradas, entre otras cosas, en la historia de Europa, los hombres del oriente y del sur tendrían sus contrapartes reales en África y Asia.
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Muchos fans de la fantasía utilizan eso para objetar que se incluyan personajes de color entre culturas inspiradas en la Europa medieval, pero la realidad es que no existió una Europa medieval sin personas de color, ese es otro mito que los medios nos han vendido y que nos hemos creído. Por otro lado, en la Tierra Media los casos de racismo y discriminación que fueron mencionados por Tolkien, son descritos como acciones perversas y en ningún modo como actos loables, así que es muy razonable imaginar una Tierra Media con diversidad étnica.
Inclusión femenina
La cantidad de personajes femeninos que aparecen en El Señor de los Anillos no se compara con la gran cantidad de personajes masculinos, pero en El Silmarillion, los Cuentos Inconclusos y los Apéndices podemos encontrar una gran cantidad de mujeres con roles importantes en la historia, desde novias y esposas fieles hasta guerreras y grandes reinas. En El Señor de los Anillos la más destacada es Éowyn, pero ella solo es una entre varias que son mencionadas por Tolkien desde el principio de los tiempos. El universo literario del autor inglés no es misógino ni está en contra de las mujeres como han señalado numerosas feministas. Peter Jackson y su equipo trataron de crear un personaje femenino para la trilogía de El Hobbit, lamentablemente también crearon un triángulo amoroso que impidió a Tauriel ser más que un cliché, lo cual molestó a los fans. No obstante, la idea de incluir más personajes femeninos no es un error, incluso Tolkien aceptó y recibió de buena manera que en una adaptación teatral de El Hobbit de 1968 se cambiara al rey de los elfos por una reina.
Personajes LGBTQ
En el pasado se ha reprochado a Tolkien que en la Tierra Media no hay sexualidad, por el hecho de que no es un tema que aborde directamente el escritor en sus libros principales, pero el que no haya descripciones de encuentros sexuales no convierte a su universo en uno asexual. En lo que se refiere a preferencias no-heterosexuales, existe un personaje de El Silmarillion en el que muchos han visto a un hombre homosexual, Túrin Turambar, por su falta de interés en las mujeres y por el amor desmedido que sentía hacia su amigo Beleg, a quien besa en la boca luego de asesinarlo sin darse cuenta; dicha escena aparece en El Libro de los Cuentos Perdidos, Parte 2, de la Historia de la Tierra Media. ¿Aprobaría Tolkien personajes LGBTQ en una adaptación de su obra? Tal vez no, ya que era un hombre católico y en su tiempo la homosexualidad era considerada una enfermedad. Sin embargo, su aspiración era que la Tierra Media fuera un mundo creíble, basado en la realidad, y en la realidad existen las personas LGBTQ.
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Personas discapacitadas
Finalmente las personas con algún tipo de discapacidad, que en ocasiones son olvidadas cuando se habla de inclusión, siempre han existido en el universo de Tolkien, algunos de los ejemplos más celebres son Beren, a quien se le llamó Erchamion (el manco), pues perdió su mano derecha; asimismo Maedhros, otro de los personajes más importantes de El Silmarillion, pierde una de sus manos. También encontramos el caso de Trotter, el personaje que más tarde se convertiría en Aragorn, originalmente era un hobbit cuyos pies habían sido cortados en Mordor y utilizaba prótesis de madera.
Conclusión
La importancia de la inclusión radica en que permite a más personas verse reflejadas en los medios y sentirse incluidas en la sociedad, es el antídoto para la discriminación que por tanto tiempo se cristalizó en las películas y series. Quien realmente haya leído los libros de Tolkien o haya disfrutado de las adaptaciones cinematográficas de Peter Jackson, sabe que más allá de la increíble imaginación del autor y de sus historias maravillosa, están los valores de la amistad, la lealtad y el respeto entre diferentes especies y culturas sin importar la apariencia física o las costumbres. El Señor de los Anillos nos inspira a ser mejores y luchar por un mundo mejor, así que honremos ese invaluable legado dejando atrás los prejuicios del pasado.
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