RESEÑA | Black Widow: La película que Capitana Marvel debió ser

Marvel Studios y Kevin Feige cimentaron el éxito de su universo de películas interconectadas con una gran planeación, confianza en sus directores y la historia que estaban desarrollando lentamente. El éxito y la crítica de la Saga del Infinito habla por sí sola, si bien tiene algunas cintas que no son apreciadas por todo el público la mayoría de ellas sí son bastante queridas entre la audiencia y fanáticos. ¿Qué faltaba en el UCM? Si bien la casa de las ideas les llevaba ventaja a Warner y DC, estos fueron los primeros en introducir y realizar una de las películas en solitario de una heroína a gran escala: Mujer Maravilla - 92% de Patty Jenkins con Gal Gadot, vino a refrescar el subgénero de superhéroes y evidenció que los héroes masculinos no lo eran todo. ¿Cuál fue la respuesta de Marvel Studios ante esta hazaña? Capitana Marvel - 60% estelarizada por Brie Larson.

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La controversia que hubo con Larson, la exhaustiva campaña mediática para mostrarle a todo el mundo que por primera vez había una heroína de la talla de Iron man o Thor en el UCM, el recibimiento mediano que hubo por el filme entre la crítica y el público, no terminaron por agradarle al respetable. Quizás por una planeación apresurada, por un pobre guión y dirección, este primer intento no fue lo que esperaban. ¿A qué viene todo esto con Black Widow - 87%? Marvel Studios es consciente de todos estos errores y en este filme pone en práctica todo lo aprendido con esta nueva película, ya que no cae en los mismos errores que no terminaron por convencer con su cinta protagonizada por un personaje femenino.

El thriller de espías de Marvel Studios presenta la historia de Natasha Romanoff (Scarlett Johansson), también conocida como Black Widow. Ella se enfrenta a lo más oscuro de sus cuentas pendientes cuando surge una peligrosa conspiración que tiene lazos con su pasado. Perseguida por una fuerza que no se detendrá ante nada para derribarla, debe lidiar con su historia como espía y con las relaciones rotas que dejó en su pasado antes de convertirse en parte de los Vengadores. Scarlett Johansson vuelve como Natasha/Black Widow, Florence Pugh interpreta a Yelena, David Harbour es Alexei/The Red Guardian y Rachel Weisz da vida a Melina.

Black Widow - 87%, la primera película en la Fase Cuatro del Universo Cinematográfico de Marvel, dirigida por Cate Shortland, como tal no es una cinta de origen del personaje, ya que a lo largo de la historia del UCM ya se le había visto consagrada. Aún así, explora diferentes facetas del mismo, sobre todo porque se empeña en llenar ciertos huecos que han ido quedando en su evolución. Parte de su niñez y varios detalles que se mencionan sirven para complementar este hecho, ninguno de ellos se siente innecesario o fuera de lugar, ya que ayudan al desarrollo de la narrativa.

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Si bien la cinta sigue teniendo los sellos característicos de una cinta del UCM, el tono de la misma la acerca a lo que se vio en Capitán América: El Soldado del Invierno - 89% y Falcon y el Soldado del Invierno - 97%. Aquí no hay una amenaza cósmica multiversal que viene amenazar el equilibrio de la vida, y sí hay un conflicto político que por años se ha orquestado y es necesario detenerlo. Además, este problema está relacionado con el pasado de Natasha. La película bien podría ser una trama de espías con peligros por doquier y cargada de escenas de acción.

Sí hay momentos de comedia, de eso no hay duda. La diferencia es que no se sacrifica la seriedad o la tensión por las risas del momento. Incluso, se parodia cierta escena que ha sido característica a lo largo de cada batalla que Black Widow ha tenido que enfrentar. De cierta forma, es un mensaje de que todos esos momentos eran muy ridículos. Scarlett Johansson ofrece una extensión de su personaje, sólo que visto de una forma más intimista. Irónicamente, pese a que la historia sucede antes de su fatídico final, recuerda el porqué para ella los Avengers eran su familia y qué la hacía tan especial. Sin duda es una carta de despedida necesaria. Las escenas de combate que tiene a lo largo de su aventura podrían ser las mejores que le han tocado interpretar.

Respecto a David Harbour como Red Guardian, todas sus escenas aportan una buena química con sus compañeros, sobre todo a la hora de los momentos familiares. Sin embargo, su aparición se queda corta, por lo que es entendible que el público quiera saber más de él. Reconocimiento especial para Florence Pugh, quien por momentos se lleva la película desde que aparece hasta el último momento. Su relación con Nat es bastante explorada, por lo que la empatía es casi instantánea. Pugh da muestra de sus variados registros y así pasa de lo dramático a lo divertido. Si al espectador le gustaron las escenas de acción de Natasha, las de Yelena las terminarán amando.

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Desgraciadamente, no todo es miel sobre hojuelas, ya que en el apartado del villano podrían haber algunas decepciones, sobre todo para los más puristas de los cómics. El hecho de introducir a varios personajes y que no se les dé un camino claro podría molestar a algunos espectadores. Por otro lado, el simple hecho de que se sepa cómo acaba la historia de la agente Romanoff resta bastantes puntos a sus hazañas.

Black Widow - 87% de Cate Shortland no es perfecta, pero sí toma en cuenta los fallos que tuvo Capitana Marvel - 60%. Aprovecha todo lo que anteriormente ha funcionado en el UCM y lo lleva al mundo del espionaje, mientras responde varias incógnitas que se han ido generando a lo largo de las entregas, como lo sucedido en Budapest. Refuerza los lazos sentimentales que el público construyó con Nat y le dan un final conmovedor.

P. D.: La escena postcréditos apunta a algo grande que, desde ya, empieza a levantar expectativas.

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