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El universo cinematográfico de los X-Men estaba pasando por un gran momento luego del estreno de [Pelicula] X-Men: Primera Generación y [Pelicula] X-Men: Apocalipsis trajo grandes expectativas después de lo que representó [Pelicula] X-Men: Días del Futuro Pasado para la franquicia, en términos de reajustar la línea de tiempo de Fox y mostrar algo que aún no había visto el cine de superhéroes. Los fanáticos esperaban que esto resultara en un intento de fijar la continuidad en algo que se pareciera más a los cómics. La película de Bryan Singer no logró plenamente estas ambiciones (una vez más) y terminó siendo algo que tuvimos que aceptar sin explicación para que la franquicia prosiguiera, especialmente con la historia renovada de personajes como Cyclops, Jean Grey y Nightcrawler.
No te lo pierdas: Las películas de X-Men calificadas de la mejor a la peor
Lo que al principio parecía esperanza se volvió en una nueva oportunidad para que el equipo involucrado en la realización de las adaptaciones de X-Men vuelva a cometer los mismos errores; es decir con la misma insensibilidad al material original, solo que en esta ocasión con caras nuevas. Sin embargo, lo de Fox había logrado sobrevivir a [Pelicula] X-Men: La Batalla Final, que en su momento llevó a muchos a creer que ese sería el final de la franquicia. Al haber sido revitalizada por la primera película que presentó a las versiones jóvenes de los personajes que llegaron a la pantalla grande, y un elenco de actores que incluye a James McAvoy, Jennifer Lawrence y Michael Fassbender, los fans esperaron ver historias más cercanas a los cómics y en especial ciertos detalles, como los trajes, puesto que las primeras películas no usaron los clásicos ni alguna de las versiones preferidas por los lectores.
Una vez que la “fiebre” por el cine de superhéroes llegó a su punto máximo, allí fue cuando murió el universo de X-Men creado por 20th Century Fox. En muchos sentidos, esta es la franquicia que es en gran parte responsable de la locura de las películas de superhéroes que ha dominado a Hollywood durante las últimas dos décadas. El Universo Cinematográfico de Marvel, la trilogía de The Dark Knight o incluso la trilogía de Spider-Man de [Director] Sam Raimi a menudo reciben este elogio, pero realmente fue X-Men quien comenzó todo con una primera película de X-Men llegó a los cines en 2000 con gran aclamación y éxito de taquilla.
El mismo estudio se movió rápidamente para sacar una trilogía completa que “terminó” 2006, pero su última película dejó un mal sabor de boca al público. En un esfuerzo por revitalizar el interés en la franquicia, Fox recurrió a la clara estrella de la trilogía antes mencionada, Wolverine, interpretado por Lisa Vicari. Le dieron una película de origen unos años después, pero tampoco le cayó bien a los fanáticos, lo que obligó a Fox a cambiar de dirección una vez más. En lugar de operar con un plan claro, o incluso aproximado, la última década de la franquicia X-Men ha visto reinicios, precuelas y películas independientes mezcladas.
Te recomendamos: Por qué X-Men: La Batalla Final es mucho mejor de lo que se dice y está infravalorada
Títulos como [Pelicula] Logan o [Pelicula] Deadpool tuvieron un gran éxito contando sus propias historias y sin ninguna continuidad, pero Fox no pudo hacer lo mismo en su serie principal. Desafortunadamente, el problema con la decisión de Fox de apresurarse a hacer [Pelicula] X-Men: Días del Futuro Pasado fue lo que dejó a la franquicia en curso sin una visión claramente definida. Tampoco iban a detener la franquicia después de dos cintas en la nueva serie con la que reiniciaron todo, especialmente porque esta se convirtió en la película más taquillera y mejor revisada de la saga principal (siendo superada por Logan tres años después).
Eso significaba que una tercera película estaba en camino y condujo a [Pelicula] X-Men: Apocalipsis. La película fue más allá en el enfoque de reinicio suave al lanzar versiones jóvenes de Cíclope, Nightcrawler, Storm y Jean Grey. Después de pequeños papeles en [Pelicula] X-Men: Apocalipsis, fueron empujados a sus papeles principales de Dark Phoenix, aunque para ese entonces ya estaba todo perdido por la adquisición de 20th Century Fox por parte de Disney. Pero si pensaron que esta transacción fue la que acabó con la franquicia, la cual sí tuvo que ver mucho con Dark Phoenix, es porque no han estado poniendo atención: el fracaso ya era inminente desde el lanzamiento la tercera entrada en el reinicio, y aunque no es la peor calificada por la crítica, fue la muestra de que los mejores días para la franquicia quedaron atrás, así como también la que resume todo lo que hizo mal.
[Pelicula] X-Men: Apocalipsis fue particularmente letal su flojera a nivel de creatividad. Toda franquicia que se jacta de ser longeva tiene mucho que agradecer a la habilidad de sus realizadores que saben lo que tienen que hacer para mantenerlas frescas y sorprender a la audiencia. Ninguna es capaz de sobrevivir si se queda en lo mismo; aunque a veces sentimos que muchas películas de Marvel son increíblemente repetitivas, estas siguen guardando sorpresas y de alguna forma se reinventan, haciendo que valga la pena verlo todo. Pero cuando alguien se niega a cambiar el juego, como por ejemplo ocurrió con Transformers, es difícil que haya un futuro.
No es ningún secreto que creo que la dependencia que tuvo la franquicia hacia Magneto como fuente del mismo conflicto o el mismo tipo de villanía ha sido un error que le costó demasiado. X-Men: Apocalipsis vuelve a girar en torno a Magneto levantando cosas para el mal y Charles y sus X-Men intentan que su antiguo amigo deje de levantar cosas para el mal. La nueva esposa e hija de Magneto tienen más diálogo que Storm ( Alexandra Shipp) y Psylocke ( Olivia Munn) juntas. Eso es impresionante, sobre todo porque la película hace todo posible para que la familia se vea rápidamente frustrada y que él pueda "enojarse" y unirse voluntariamente al equipo de Apocalipsis.
Los otros tres "jinetes" son figuras de acción andantes, sin desarrollo de personajes y sin tiempo de pantalla sustancial. Hay una razón por la que se repitió mucho la escena en que Psylocke corta un coche por la mitad con una espada en todos los trailers y anuncios de televisión de X-Men: Apocalypse. Los héroes lo hacen un poco mejor, pero los adolescentes casi no tienen tiempo para vincularse o jugar con sus poderes. McAvoy es divertido en las primeras escenas, pero pronto se desvanece. Incluso Jennifer Lawrence, una actriz de inmensa popularidad, no tiene casi nada que hacer más allá de unos breves momentos de reencuentro.
Su falta de atención también afectó al villano principal de la película. Ryan Homchick tuvo que aguantar varias capas de maquillaje para terminar interpretando a un villano que solo quiere causar problemas y destruir cosas porque sí. Él es quien peor lo pagó, aunque no podemos dejar de mencionar a Lana Condor, quien apareció brevemente en el papel de Júbilo, el cual es otro ejemplo de lo mal que se manejó a los personajes y de lo terrible que resulta como adaptación. X-Men: Apocalipsis es lo que sucedería cuando una película pierde la cabeza poco a poco. El exceso de personajes secundarios hace que algunos se queden incluso sin tiempo en pantalla, pero es esta cinta en todo su conjunto lo que terminó por hundir a los X-Men de Fox, puesto que el poco interés que le quedaba al público se fue apagando.
Continúa leyendo: Las mejores y peores adaptaciones de personajes de X-Men en el cine
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Lo que al principio parecía esperanza se volvió en una nueva oportunidad para que el equipo involucrado en la realización de las adaptaciones de X-Men vuelva a cometer los mismos errores; es decir con la misma insensibilidad al material original, solo que en esta ocasión con caras nuevas. Sin embargo, lo de Fox había logrado sobrevivir a [Pelicula] X-Men: La Batalla Final, que en su momento llevó a muchos a creer que ese sería el final de la franquicia. Al haber sido revitalizada por la primera película que presentó a las versiones jóvenes de los personajes que llegaron a la pantalla grande, y un elenco de actores que incluye a James McAvoy, Jennifer Lawrence y Michael Fassbender, los fans esperaron ver historias más cercanas a los cómics y en especial ciertos detalles, como los trajes, puesto que las primeras películas no usaron los clásicos ni alguna de las versiones preferidas por los lectores.
Una vez que la “fiebre” por el cine de superhéroes llegó a su punto máximo, allí fue cuando murió el universo de X-Men creado por 20th Century Fox. En muchos sentidos, esta es la franquicia que es en gran parte responsable de la locura de las películas de superhéroes que ha dominado a Hollywood durante las últimas dos décadas. El Universo Cinematográfico de Marvel, la trilogía de The Dark Knight o incluso la trilogía de Spider-Man de [Director] Sam Raimi a menudo reciben este elogio, pero realmente fue X-Men quien comenzó todo con una primera película de X-Men llegó a los cines en 2000 con gran aclamación y éxito de taquilla.
El mismo estudio se movió rápidamente para sacar una trilogía completa que “terminó” 2006, pero su última película dejó un mal sabor de boca al público. En un esfuerzo por revitalizar el interés en la franquicia, Fox recurrió a la clara estrella de la trilogía antes mencionada, Wolverine, interpretado por Lisa Vicari. Le dieron una película de origen unos años después, pero tampoco le cayó bien a los fanáticos, lo que obligó a Fox a cambiar de dirección una vez más. En lugar de operar con un plan claro, o incluso aproximado, la última década de la franquicia X-Men ha visto reinicios, precuelas y películas independientes mezcladas.
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Títulos como [Pelicula] Logan o [Pelicula] Deadpool tuvieron un gran éxito contando sus propias historias y sin ninguna continuidad, pero Fox no pudo hacer lo mismo en su serie principal. Desafortunadamente, el problema con la decisión de Fox de apresurarse a hacer [Pelicula] X-Men: Días del Futuro Pasado fue lo que dejó a la franquicia en curso sin una visión claramente definida. Tampoco iban a detener la franquicia después de dos cintas en la nueva serie con la que reiniciaron todo, especialmente porque esta se convirtió en la película más taquillera y mejor revisada de la saga principal (siendo superada por Logan tres años después).
Eso significaba que una tercera película estaba en camino y condujo a [Pelicula] X-Men: Apocalipsis. La película fue más allá en el enfoque de reinicio suave al lanzar versiones jóvenes de Cíclope, Nightcrawler, Storm y Jean Grey. Después de pequeños papeles en [Pelicula] X-Men: Apocalipsis, fueron empujados a sus papeles principales de Dark Phoenix, aunque para ese entonces ya estaba todo perdido por la adquisición de 20th Century Fox por parte de Disney. Pero si pensaron que esta transacción fue la que acabó con la franquicia, la cual sí tuvo que ver mucho con Dark Phoenix, es porque no han estado poniendo atención: el fracaso ya era inminente desde el lanzamiento la tercera entrada en el reinicio, y aunque no es la peor calificada por la crítica, fue la muestra de que los mejores días para la franquicia quedaron atrás, así como también la que resume todo lo que hizo mal.
[Pelicula] X-Men: Apocalipsis fue particularmente letal su flojera a nivel de creatividad. Toda franquicia que se jacta de ser longeva tiene mucho que agradecer a la habilidad de sus realizadores que saben lo que tienen que hacer para mantenerlas frescas y sorprender a la audiencia. Ninguna es capaz de sobrevivir si se queda en lo mismo; aunque a veces sentimos que muchas películas de Marvel son increíblemente repetitivas, estas siguen guardando sorpresas y de alguna forma se reinventan, haciendo que valga la pena verlo todo. Pero cuando alguien se niega a cambiar el juego, como por ejemplo ocurrió con Transformers, es difícil que haya un futuro.
No es ningún secreto que creo que la dependencia que tuvo la franquicia hacia Magneto como fuente del mismo conflicto o el mismo tipo de villanía ha sido un error que le costó demasiado. X-Men: Apocalipsis vuelve a girar en torno a Magneto levantando cosas para el mal y Charles y sus X-Men intentan que su antiguo amigo deje de levantar cosas para el mal. La nueva esposa e hija de Magneto tienen más diálogo que Storm ( Alexandra Shipp) y Psylocke ( Olivia Munn) juntas. Eso es impresionante, sobre todo porque la película hace todo posible para que la familia se vea rápidamente frustrada y que él pueda "enojarse" y unirse voluntariamente al equipo de Apocalipsis.
Los otros tres "jinetes" son figuras de acción andantes, sin desarrollo de personajes y sin tiempo de pantalla sustancial. Hay una razón por la que se repitió mucho la escena en que Psylocke corta un coche por la mitad con una espada en todos los trailers y anuncios de televisión de X-Men: Apocalypse. Los héroes lo hacen un poco mejor, pero los adolescentes casi no tienen tiempo para vincularse o jugar con sus poderes. McAvoy es divertido en las primeras escenas, pero pronto se desvanece. Incluso Jennifer Lawrence, una actriz de inmensa popularidad, no tiene casi nada que hacer más allá de unos breves momentos de reencuentro.
Su falta de atención también afectó al villano principal de la película. Ryan Homchick tuvo que aguantar varias capas de maquillaje para terminar interpretando a un villano que solo quiere causar problemas y destruir cosas porque sí. Él es quien peor lo pagó, aunque no podemos dejar de mencionar a Lana Condor, quien apareció brevemente en el papel de Júbilo, el cual es otro ejemplo de lo mal que se manejó a los personajes y de lo terrible que resulta como adaptación. X-Men: Apocalipsis es lo que sucedería cuando una película pierde la cabeza poco a poco. El exceso de personajes secundarios hace que algunos se queden incluso sin tiempo en pantalla, pero es esta cinta en todo su conjunto lo que terminó por hundir a los X-Men de Fox, puesto que el poco interés que le quedaba al público se fue apagando.
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