En [Pelicula] Pixeles, un ejército invasor de personajes clásicos de los juegos de arcadia desciende sobre la tierra para hacer de lo peor – pero como los fans del cine saben, los videojuegos han sido utilizados para infligir dolor y brutalidad sin sentido en la pantalla grande por años. En honor a esa miserable tradición, elegimos dedicar un artículo de esta semana a recordar algunas de las adaptaciones de videojuego-a-cine menos entretenidas que ha producido Hollywood, y mientras definitivamente no hubo escasez de contendientes, lo redujimos a un listado conciso al mismo tiempo que dejamos espacio para la variedad (en otras palabras, solamente una película de [Director] Uwe Boll llegó a la lista). Arriba Arriba Abajo Abajo Izquierda Derecha Izquierda Derecha B A Start: ¡Es tiempo para Total Recall!

10. [Pelicula] Solo en la Oscuridad (2005)





Aquí es donde admitimos lo que muchos de ustedes han sabido desde el principio: Si hubiéramos hecho las cosas un poco diferentes, la lista pudo haber estado compuesta principalmente de película de Uwe Boll. Por la razón que sea, el Sr. Boll ha demostrado una profunda afinidad para la adaptación de videojuegos a lo largo de su notable carrera, y el subgénero de la “mala película de juego” está plagado por el efluvio de sus esfuerzos cinemáticos. Interesados en la variedad, sin embargo, decidimos limitar su aparición a esta entrada, dejándonos con una elección obvia: Alone in the Dark de 2005, un supuesto thriller de ciencia ficción estelarizado por Christian Slater como un detective de lo paranormal y Tara Reid como una científica – ambos investigando la desaparición de una civilización que adoraba a demonios del espacio. Una adaptación extremadamente liberal de la serie de videojuegos Alone in the Dark – que a su vez estaba basado ligeramente en los escritos de H.P. Lovecraft – la película se encontró sola en la oscuridad con grandes cantidades de salas casi vacías y con desdeñosos críticos como Rossiter Drake del San Francisco Examiner, quien sentenció, “El fallecido Gene Siskel una vez trazó un simple método de medir el valor de un filme: ‘¿Es este filme más interesante que un documental de los mismos actores comiendo? Alone in the Dark ni siquiera se acerca a igualar ese estándar.”



9. [Pelicula] Doom: La Puerta del Infierno (2005)





El hombre ha ascendido al estatus de “Viagra para las franquicias”, pero los años tempranos de Dwayne Jonhson como héroe de acción de Hollywood fue un poco disparejo. Después de su aparición en La Momia Regresa, luchó para encontrar un buen lugar para su complexión musculosa y carisma natural en la pantalla, ocasionalmente entregando elogiadas interpretaciones en fracasos taquilleros (The Rundown) o trabajando horas extras para sacar desafortunadas películas de acción (Walking Tall). Doom de 2005 cae en la segunda categoría, recreando el inmensamente popular FPS (First Person Shooter) como un thriller de ciencia ficción sobre un grupo de soldados enviados a rescatar una colonia en Marte después de que sus residentes accidentalmente abren un portal al infierno y liberan una horda de criaturas asesinas. Mientras la película incluye bastantes escenas de pelea en corredores que los fanáticos del juego han venido a esperar, el resultado final fue – como los críticos repetidamente señalaron sobre muchas películas similares a lo largo de los años – más divertido jugar que ver. “Doom”, señaló Roger Ebert, “es como si un niño llegara a usar tu computadora y no te dejara jugar”.



8. [Pelicula] Double Dragon (1994)





¿Cómo haces una película de un juego que consiste en nada más que dos hermanos partiéndoles la cara a los malos? Si eres Michael Davis o Peter Gould, escritores del guion de Double Dragon, la desafortunada respuesta es “inventa una confusa historia sobre mitades de un amuleto místico” – y las cosas solamente se pusieron peor desde ahí, después de que el director James Yukich construyera un elenco que incluía al veterano de la serie Parrty of Five, Scott Wolf, y a la estrella de la comedia Who’s the Boss?, Alyssa Milano. El resultado fueron unos ridículos 90 minutos de aburrida acción con bajo presupuesto que provocó el rechazo casi universal de críticos como Luke Y. Thompson del New Times, quien se preguntó, “¿Qué tan duro pudo haber sido inventar una historia tan buena como la del juego original de Nintendo? Imposible, aparentemente.”



7. [Pelicula] Hitman - Agente 47 (2007)





Han existido tantas adaptaciones terribles de videojuegos a películas que puede ser tentador el creer que simplemente no hay punto en crear un puente entre ambos medios, pero realmente hay muchos videojuegos que parecen hechos para ser llevados a la pantalla; desafortunadamente, Hitman de 2007 probó que incluso la historia más cinemática no necesariamente significa un producto final bien pulido. Estelarizando Timothy Olyphant como el Agente 47, un miembro de una armada de asesinos calvos y tatuados con un código de barra que se encuentra traicionado por una organización que lo entrenó desde su nacimiento para matar, parecía en papel que este sería el tipo de thriller de acción que mantiene a los fanáticos de 007 entretenidos entre secuelas – pero el resultado final fue tan decepcionantemente anónimo como el protagonista. Una secuela planeada fue abandonada, aunque su ganancia de $99 millones de dólares en taquilla le aseguraron un eventual reboot (a estrenarse en agosto de este aólares en taquilla le aseguraron un eventual reboot (a estrenarse en agosto de este año) que podría hacer un mejor trabajo de destilar lo atractivo del videojuego, pero el original sigue siendo un caso de potencial desperdiciado. “47 ni siquiera quiere a la chica”, escribe una Tricia Olszewski para el Washington City Paper. “¿Qué clase de película de acción es ésta?”



6. [Pelicula] Max Payne (2008)





Para cierta casta de cinéfilo, todo lo que en verdad necesitan para hacer una película divertida es darle un arma a Mark Wahlberg. Max Payne, la adaptación del director John Moore de la exitosa serie de videojuegos sobre un policía vigilante matando para traer justicia a la muerte de su esposa, su hijo, y su compañero, fue hecha exactamente para ellos y nadie más – con la posible excepción de aquellos fanáticos de Sin City que fueron a ver esta película esperando que fuera Sin City, o tal vez entusiastas del noir que sintieron que el género necesitaba más criaturas aladas mitad hombre. Para el resto, Madx Payne es una dolorosa y errónea mezcolanza de acción “dura” y efectos digitales, todo dirigido al borde; como Michael Phillips escribió para el Chicago Tribune, “Te encontrarás lanzando porras por la muerte de Payne, incluso con un buen actor en el rol vacío. No hay nada dentro del espíritu vacuo y amargo espíritu de venganza.”



5. [Pelicula] Mortal Kombat: Aniquilación (1997)





La primer Mortal Kombat puede no haber sido una obra de arte, pero tuvo sus momentos, y en general fue una buena experiencia de domingo por la tarde con ridículas escenas de acción y un sinsentido de tonos cuasi-místicos – y fue recompensada por alcanzar esas limitadas metas con un sorpresivo éxito en taquilla de $125 millones de dólares. Tristemente, poca de esa diversión – o el elenco original – se quedó para Mortal Kombat: Aniquilación cuando llegó a las pantallas, y el resultado fue una bomba para la taquilla que puso a la naciente franquicia de Kombat en un estado de congelamiento eterno del cual, al momento de esta redacción, sigue queriendo dejar atrás. “Nunca – al menos desde la primera Mortal Kombat,” suspira Steven Rea del Philadelphia Enquirer, “el tedio ha sido tan fuerte, tan lleno de saltos mortales y puños voladores a las caras de centauros de otra dimensión.”



4. [Pelicula] Terror en Silent Hill 2: La revelación (2012)





La crítica detestó a la primera película de Silent Hill, pero ganó unos $100 millones en taquilla de cualquier forma, por lo que seis años después nos llegó Silent Hill: Revelation, la cual comenzó en donde quedaron los hechos de la primera (pero sigue la trama del videojuego Silent Hill 3) al enfocarse en los problemas sufridos por Christopher Da Silva (Sean Bean) y su hija adoptada, Sharon (Adelaide Clemens), y su madre (Radha Mitchell) está atrapada en una siniestra dimensión fantasma. Es una premisa con cierta promesa de terror; no obstante, muy poco de ello se traduce a la pantalla, y Silent Hill: Revelation terminó ganando apenas la mitad de lo que alcanzó la original. “Nunca es buena señal,” gruñó Mark Olsen de Los Angeles Times, “cuando los trailers proyectados antes de una película tienen narrativas más ricas y completas que la película que acabas de pagar por ver”.



3. [Pelicula] Street Fighter: La Última Batalla (1994)





Dada la mala reputación de Street Fighter (la película), uno no podría adivinar que hizo casi $100 millones de dólares durante su estadía en la taquilla, pero ese es el riesgo que corren los cineastas cuando le ponen una gorra a Jean-Claude Van Damme y eligen a Raul Julia como el bizarro dictador militar – y es exactamente ese tipo de infamia que le esperaba a este inmerecido intento de convertir montañas de monedas en gloria cinemática. Como con Double Dragon, uno de los princip[ales problemas fue que la trama – específicamente, cómo hacer una trama a partir de un juego que consiste en gente golpeándose – y el escritor-director Steven de Souza compensó al imaginar una confrontación surrealista entre el megalómano M. Bison (Julia) y una fuerza militar al estilo de Megaforce llamada la Naciones Aliadas. Podríamos hundirnos más en la narrativa, pero el resultado final sería el mismo: Muchas escenas tontas de pelea y una buena cantidad de terribles críticas como la de Stephen Holden del New York Times, quien descartó a Street Fighter como “Un saturado bodrio de secuencias de artes marciales mal editadas y diálogo ininteligible.”



2. [Pelicula] Super Mario Bros. (1990)





Todos sabíamos que eso iba a llegar a la lista, ¿verdad? La madre de todas las bombas de videojuego-a-cine, Super Mario Bros. de 1990 estaba supuesta a ser el debut de los videojuegos en Hollywood – prueba no solamente de que los videojuegos habían llegado como entretenimiento verdadero con poder de permanencia, pero que los jugadores también eran una audiencia esperando a ser explotada por los estudios de cine que podrían hacer millones trayendo franquicias pre-existentes a la pantalla grande. Todo eso suena genial, pero no toma en cuenta el hecho de que los directores Rocky Morton y Annabel Jankel intentaban hacer una película sobre dos hermanos plomeros que persiguen a una princesa que ha sido capturada por una tortuga gigante, y que deben enfrentar a una esquizofrénica variedad de villanos (incluyendo hongos vivos) en el camino. Después de la extensiva búsqueda por el elenco que incluyó intentos de enganchar a Danny DeVito, Arnold Schwarzenegger y Tom Hanks, los realizadores eventualmente contrataron a Bob Hoskins y John Leguizamo para interpretar a los hermanos Mario y Luigi, mientras Dennis Hopper accedió interpretar al reptil humanoide villano King Koopa, pero todo el talento actoral en el mundo no podría haber hecho una diferencia en el cacofónico desastre que fue Super Mario Bros., la cual terminó siendo tal fracaso comercial y crítico que Nintendo, desarrolladores del juego, rechazaron hacer adaptaciones por décadas. “Los niños pueden recibir una descarga de este desastre,” farfulló Lawrence Toppman del Charlotte Observer. “Me dio despresión.”



1. [Pelicula] Wing Commander (1999)





Por allá de los 90’s, Matthew Lillard y Freddie Prinze, Jr. estaban listos para graduarse de las comedias románticas adolescentes… las que cambiaron, desgraciadamente, por la desastrosa adaptación cinematográfica de de Wing Commander, la cual los encontró intentando en vano sacar emociones de pantalla grande de una sosa historia involucrando una guerra intergaláctica en el futuro entre los humanos y una raza alienígena de bípedos con cara de gato. Es una premisa que suena completamente absurda para los novatos de Commander, y el director Chris Roberts abordó el problema al hacer diversos cambios clave a los personajes del juego y la mitología, lo cual alienó a los jugadores que de otra forma hubieran asistido a la película. Anita Gates del New York Times observó. “Wing Commander está basada en un videojuego y tiene el mismo grado de desarrollo de personajes. Eso es lo que la mayoría de los asistentes deben saber.”