“Cuando juegas el juego de tronos, ganas o mueres”, son las míticas palabras que Cersei tiene para Ned Stark en la primera temporada de Game of Thrones - 59%. En el sexto episodio de La Casa del Dragón - 91%, la ofensiva de “los verdes”, los aliados de la familia Hightower, finalmente comienza con una movida que pondrá en jaque el delgado equilibrio de poder en Westeros.
No te pierdas: RESEÑA | La Casa del Dragón: Episodio 5 | Otra boda para coronar la violenta historia de Westeros
Titulado “La princesa y la reina”, el sexto episodio de La casa del dragón ve el debut de Olivia Cooke y Emma D'Arcy como las protagonistas: Alicent y Rhaenyra. No es para menos que desde su nombre la entrega refiera a la tensa relación entre ambas, ya que con la decadente salud del rey Viserys cada una está más cerca del trono que nunca antes y esto las lleva a abordar la situación de forma diferente.
Nada añade más a esa tensión que la secuencia inicial. Un largo plano que sigue el parto de Rhaenyra hasta los aposentos de Alicent, quien demanda ver a su bebé de manera inmediata coloca las piezas a favor de los Hightower y demuestra claramente el creciente poder de la reina consorte, quien ha aumentado su influencia política desde los diez años que llevamos sin verla.
La Casa del Dragón - 91% de nuevo presume de dos protagonistas cautivadoras. Mientras D’Arcy interpreta a una princesa despistada por su ingenua comodidad en la herencia que parece haberle sido garantizada, Cooke es viciosamente perversa sin ocultar del todo la inseguridad y desconfianza que le debe a todos los que la rodean. Esa inusitada paranoia tiene un carácter más aterrador que lastimoso.
También conoceremos a la nueva generación de Targaryens: los hijos de Rhaenyra y Alicent, quienes jugarán un papel fundamental en la Danza de Dragones y cuyas enemistades se forjan desde la infancia por los adultos que los usan casi como peones en una guerra de proximidad. El favorito del público, Daemon (Matt Smith), tiene poco en este episodio por hacer en este episodio que lo muestra en su punto más blando hasta ahora.
Te recomendamos: La Casa del Dragón tiene 29 millones de espectadores por cada episodio
Pero entre los secundarios, quien destaca es Fabien Frankel como Ser Criston quien ha volteado de cabeza al más noble caballero que conocimos antes y lo ha convertido en un temible y ponzoñoso personaje cuyo rencor por Rhaenyra se nota más pesado que la armadura plateada que porta. La más brutal violencia de la boda anterior se queda corta ante la cizaña que despliega en un entrenamiento en este episodio.
Finalmente, La Casa del Dragón - 91% comienza el juego de tronos. La ofensiva es los Hightower. Sin revelar de más, un asesinato ensombrece el final de este episodio y prepara el terreno para que el fuego y la sangre le sigan. Las restantes cinco entregas de la primera temporada llegarán cada domingo, sólo por HBO Max.
Continúa leyendo: La Casa del Dragón: coordinadora de intimidad defiende su trabajo y responde a la crítica de Sean Bean
Comentarios
Tomatazos
Facebook
Mejores
Nuevos