[Pelicula] Gran Torino es una de las películas más destacadas de Clint Eastwood, actor y director de Hollywood más que respetado en la industria, convertido en una leyenda del entretenimiento y el buen cine. Pero aquel trabajo de 2008 se implica recientemente en la controversia gracias a un ensayo escrito por uno de los coprotagonistas, Bee Vang, para NBC News; en el texto, Vang acusa a la película de propagar el racismo anti asiático en Estados Unidos, hecho que está generando una nueva conversación en redes sociales sobre los prejuicios que pueden sufrir los migrantes asiáticos o los nacidos en
país pero que tienen tal ascendencia en sus venas.

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La película nos presenta una historia memorable. Décadas después de la guerra de Korea, el veterano Walt Kowalski (Eastwood) vive aterrorizado por los horrores que presenció en el campo de batalla. Dos objetos que le importan son su Gran Torino clásico, que representa sus días más felices trabajando en la planta de Ford, y su rifle M-1 que le salvó la vida varias veces durante combate. Cuando un vecino adolescente de Kowalski intenta robar su Gran Torino como parte de un ritual de iniciación de un grupo de vándalos, Walt se propone reformar a la juventud. Atraído contra su voluntad a la vida de la familia de Thao (Bee Vang), Kowalski pronto tomará medidas para protegerlos de las pandillas que infestan su vecindario.



Bee Vang saltó a la fama global en 2008 con su papel en Gran Torino, sin embargo, el paso del tiempo le ha permitido reflexionar sobre el racismo en contra de las personas asiáticas en Estados Unidos. Vang nació en California, pero sus padres emigraron de Tailandia y pertenecen a la etnia miao, misma que se retrata en la película de Eastwood. Para NBC News, el actor de ahora 29 años escribe lo siguiente:

En 2008 protagonicé junto a Clint Eastwood, Gran Torino, interpretando el papel principal de una persona miao en una historia de dos personas que trascienden sus diferencias para formar un vínculo humano poco probable. Fue un momento cinematográfico histórico para los miao de todo el mundo, a pesar de sus abundantes insultos anti asiáticos.

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Vang continúa reflexionando sobre los insultos que se mencionan en la película hacia la etnia.

En ese momento, hubo mucha discusión sobre si los insultos de la película eran insensibles y gratuitos o simplemente 'bromas inofensivas'. Me resultaba desconcertante la risa que los insultos provocaban en los cines con un público predominantemente blanco. Y siempre eran los blancos los que decían: '¿No puedes aceptar una broma?' Hoy, me estremezco al pensar en lo que eso significa. Más de una década después, el racismo anti-asiático que alguna vez se disfrazó de buen humor se ha revelado tal como es, gracias a Covid-19.



Además de hablar sobre los estigmas que Gran Torino impuso a las personas asiático-americanas en Estados Unidos, el actor incluso señala al supremacismo blanco como el sistema imperante que todavía oprime a las minoría en el país del norte:

[La película] puede haber eludido la crisis en Asia que dio origen a nuestra diáspora y muchas otras en el Pacífico. Pero más preocupante fue la forma en que la película incorporó el racismo anti-asiático, incluso cuando aumentó la representación asiático-estadounidense. Hasta el día de hoy, todavía me persigue la alegría de las audiencias blancas, la risa estruendosa cuando el personaje cascarrabias y racista de Eastwood, Walt Kowalski, gruñó insultos como 'cabeza inclinada' o 'Eggroll'. Es una 'broma inofensiva', ¿verdad? Hasta que no sea solo una broma, sino una excusa más para ignorar la supremacía blanca y el racismo.

Hasta ahora Clint Eastwood no se ha pronunciado al respecto. Las redes sociales se encuentran divididas respecto al ensayo de Vang, con algunos señalando al actor como oportunista, y otros aplaudiendo su valor por colocar sobre la mesa los prejuicios contra los asiáticos que durante tanto tiempo se han ignorado.

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