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A pesar de la mala racha que ha enfrentado en los últimos meses, Netflix sigue siendo la plataforma de streaming más exitosa con un puñado de producciones originales que atrapan a la audiencia. Desde [Temporada] Stranger Things (4) o [Temporada] The Crown (4), el gigante del streaming se ha mantenido en alto, y entre sus más recientes producciones que le han significado nuevos televidentes e importantes nominaciones es [Temporada] Bridgerton (1), adaptación de las novelas escritas por Julia Quinn.
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Ahora que su segunda temporada ya ha atrapado a los fans de la serie con la nueva aventura romántica de quienes en esta ocasión son los protagonistas, ha surgido una situación que, al parecer, significa un peligro para la producción. Esto podría tratarse de una situación relacionada con el hecho de que el público podría confundirse y consumir este otro producto pensando que tiene relación directa con Netflix, o simplemente por que el éxito del proyecto artístico no le guste a los altos mandos de la compañía porque el dinero que se gana con el nombre no llega a sus bolsillos.
Este año llegó a los teatros un proyecto musical llamado The Unofficial Bridgerton Musical, y aunque en el título tratan de deslindarse de la serie precisamente para evitar problemas legales, el gigante rojo ha encontrado algunos aspectos que les mantienen inconformes en cuanto a los derechos de autor, sobre todo con ciertas características de los personajes, así como diálogos que han usado de manera intacta.
De acuerdo a lo que se informa en The Washington Post, la demanda en contra de los creadores del documental se dirigen al uso de una marca registrada. La denuncia fue presentada ante el Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Columbia señalando que Abigail Barlow y Emily Bear, responsables de la puesta en escena, han generado ganancias con su drama romántico sin permiso de la productora ni de la autora de las novelas.
Este es un fragmento de lo que se anuncia en el documento legal:
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En el mismo texto se señala que la compañía de servicio de transmisión trató de llegar a un acuerdo con la pareja de artistas para otorgarles una licencia de realización y distribución del material ahora que incluso hay un álbum del musical rondando en las redes sociales, pero ellas se negaron. Es importante que este proyecto nació a principios del año pasado gracias a un video de TikTok publicado por la misma Abigail Barlow en donde responde a la pregunta “¿Qué tal si Bridgerton fuera un musical?”.
Continúa con: Por qué Netflix está perdiendo suscriptores
La actriz y cantante se viralizó por una canción que compuso inspirándose en el personaje de Daphne de Phoebe Dynevor . Dicho video ha superado las 2.4 millones de vistas y es ella misma quien interpreta a uno de los personajes principales del musical. La puesta en escena debutó la semana pasada en el Kennedy Center y aún tiene una fecha confirmada para el Royan Albert Hall en Londres en septiembre.
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Ahora que su segunda temporada ya ha atrapado a los fans de la serie con la nueva aventura romántica de quienes en esta ocasión son los protagonistas, ha surgido una situación que, al parecer, significa un peligro para la producción. Esto podría tratarse de una situación relacionada con el hecho de que el público podría confundirse y consumir este otro producto pensando que tiene relación directa con Netflix, o simplemente por que el éxito del proyecto artístico no le guste a los altos mandos de la compañía porque el dinero que se gana con el nombre no llega a sus bolsillos.
Este año llegó a los teatros un proyecto musical llamado The Unofficial Bridgerton Musical, y aunque en el título tratan de deslindarse de la serie precisamente para evitar problemas legales, el gigante rojo ha encontrado algunos aspectos que les mantienen inconformes en cuanto a los derechos de autor, sobre todo con ciertas características de los personajes, así como diálogos que han usado de manera intacta.
De acuerdo a lo que se informa en The Washington Post, la demanda en contra de los creadores del documental se dirigen al uso de una marca registrada. La denuncia fue presentada ante el Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Columbia señalando que Abigail Barlow y Emily Bear, responsables de la puesta en escena, han generado ganancias con su drama romántico sin permiso de la productora ni de la autora de las novelas.
Este es un fragmento de lo que se anuncia en el documento legal:
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Netflix posee el derecho exclusivo de crear canciones, musicales o cualquier otro trabajo derivado de Bridgerton [o] basado en Bridgerton. [La compañía] Barlow & Bear no puede tomar ese derecho, que se ha vuelto valioso por el arduo trabajo de otros, para sí mismos, sin permiso.
En el mismo texto se señala que la compañía de servicio de transmisión trató de llegar a un acuerdo con la pareja de artistas para otorgarles una licencia de realización y distribución del material ahora que incluso hay un álbum del musical rondando en las redes sociales, pero ellas se negaron. Es importante que este proyecto nació a principios del año pasado gracias a un video de TikTok publicado por la misma Abigail Barlow en donde responde a la pregunta “¿Qué tal si Bridgerton fuera un musical?”.
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La actriz y cantante se viralizó por una canción que compuso inspirándose en el personaje de Daphne de Phoebe Dynevor . Dicho video ha superado las 2.4 millones de vistas y es ella misma quien interpreta a uno de los personajes principales del musical. La puesta en escena debutó la semana pasada en el Kennedy Center y aún tiene una fecha confirmada para el Royan Albert Hall en Londres en septiembre.