Desde que el sonido se integró al celuloide, en la década de los 20, el cine y el sonido son inseparables. Las imágenes y la sonoridad acentúan la carga emotiva y la intensidad de la historia; desde su descubrimiento, el audio en la pantalla grande no ha dejado de evolucionar hasta llegar al sonido Dolby Atmos, que brinda al espectador una experiencia de inmersión en la acción del filme. Pero el sonido que procede de todas direcciones en la sala de cine puede alcanzar niveles muy altos que, a la larga pueden afectar el oído según un estudio de la American Hearing Research Foundation la pérdida auditiva está relacionada con el nivel acústico de algunas películas en los cines y descubrieron que nivel promedio en cualquier película es de 90 decibeles, superior al ruido del tráfico vehicular en horas pico, que varía de 75 a 88 decibeles.
El estudio reveló que el nivel máximo al que debe exponerse una persona no debe rebasar los 70 decibeles aun cuando se trate de esparcimiento. Y es que ni las películas infantiles están exentas de este peligro. Un corresponsal de Today, acudió a una sala de cine con un medidor de sonido y comprobó la elevada estridencia de dos filmes destinados a distinta audiencia: Los Siete Magníficos - 93% y Cigüeñas: La Historia que no te Contaron - 64%. Su experimento arrojó que el Western dirigido por Antoine Fuqua, alcanzó en las primeras secuencias, 93.7 decibeles hasta llegar a los 97.2. Mientras que la película animada de Nicholas Stoller y Doug Sweetland, se mantuvo la mayor parte del metraje en 85 decibeles, pero en algunas secuencias tuvo un pico de 99.3. Otras cintas como Horizonte profundo, llegaron a los 101 y 104.9 decibeles.
De acuerdo a una experta del NYU Langone Medical Center, cuando nuestros oídos se exponen a un ruido de 100 decibeles por unos minutos, corremos peligro de provocarnos daño permanente auditivo:
Si sale de la sala de cine y sus oídos aún sienten un zumbido, es una señal de que ya sufrió daño a causa del ruido.
¿Hay alguna ley que regule los niveles de ruido en el cine? No, según la investigación de NBC, no existen estándares que regulan estos aspectos. El nivel de sonido varía en cada película, y los exhibidores no pueden controlar ciertos ruidos. Argumentaron también que, los espectadores no se quejan de los niveles de sonido, de ahí que aún no hayan decidido una regla que equilibre la parte sonora.
¿Existe un método o tecnología que ayude a proteger nuestros oídos? Sí, ya existen aplicaciones gratuitas que miden los niveles de sonido que pueden descargar desde su teléfono y que pueden probar en este link.
Las primeras tecnologías de sonido para cine nacieron en los años 20, avances que permitieron añadir a las imágenes melodías de fondo y algunos ruidos de ambiente. Cuando los estudios cinematográficos se dieron cuenta de su potencial el audio en el cine no ha dejado de evolucionar. Gracias a este estudio, los médicos también recomiendan regular el sonido cuando se vean películas en casa. El nivel de ruido no debe repasar los 70 decibeles. Así nos aseguramos de llegar con oído de lobo a la vejez.
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