El día de ayer el cineasta mexicano, Alfonso Cuarón dio su Masterclass en el Festival Internacional de Cine de Cannes 2017. Una conversación que duró cerca de una hora y media, el cineasta dialogó con el crítico francés Michel Ciment. La conferencia de Cuarón se dio un par de días de la otorgada por el cineasta y actor estadounidense Clint Eastwood.
Esta conversación de cinéfilos de abolengo transcurrió a través de diversas facetas de la carrera del realizador mexicano, su relación con otros compatriotas cineastas y su postura política respecto a diversos conflictos que se han desatado en los últimos años, en especial su postura frente a los edictos del actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
El director de Gravedad - 
96%, que en 2014 se llevó 7 Óscares, amenizó su conversación con Ciment contando algunas anécdotas truculentas sobre los avatares de ser un cineasta en la actualidad:
Provengo de una familia de clase media y crecí en el momento que la era dorada del cine mexicano había terminado. El cine era mi instinto de supervivencia, lo necesitaba. No le recomendaría a nadie el camino que tomé.
También podría interesarte: Cannes 2017: El Seductor de Sofia Coppola ya tiene primeras críticas
Esto en sintonía a una anécdota que Paulina Lavista, en El libro de los espejos: Encuentros con Salvador Elizondo, donde cuenta cómo Cuarón y Emmanuel Lubezki llegaron a Hollywood armados únicamente con una vieja combi. Ciment guió el diálogo hacia la relación de Cuarón con el también cineasta Guillermo del Toro:
Guillermo del Toro era el asistente de un filme en el que yo también estaba trabajando. Como técnicos, teníamos reputación. Se decía que del Toro era un genio, por eso yo estaba celoso de él. Entonces nosotros conocimos a fondo, supimos cómo era el otro como persona y comenzamos a trabajar juntos.
También podría interesarte: Cannes 2017: Guillermo del Toro, Diego Luna, Gael García y otros mexicanos arman pachangón
Ciment en este punto aprovechó para hablar sobre la opera prima de Cuarón, Sólo con tu pareja - 67%, para cimentar una anécdota sobre sus primeros pasos en el cine:
El SIDA se esparcía en México y al mismo tiempo había mucha homofobia. Dirigí esta comedia para ir contra esas ideas preconcebidas.
Retomando esta anécdota, Paulina Lavista señaló en la entrevista del libro anteriormente citado, que el guión había sido alabado por el escritor mexicano Salvador Elizondo, cuando Cuarón y él todavía mantenían conversaciones en su casa de Coyoacan.
El crítico francés no perdió la oportunidad para tocar una llaga muy sensible para el pueblo mexicano. Ciment preguntó a Cuarón sobre su postura respecto a la relación entre México y Estados Unidos.
Nunca quise irme de México, pero era un padre y necesitaba dinero. Ya no podía conseguir fondos en México, así que cuando alguien me ofreció trabajo en Hollywood, sopese la oportunidad.
No la dejes pasar: Guillermo del Toro regresa a Cannes 2017 y apadrinará el Festival de Cine de Sitges
El cineasta mexicano también relató su tiempo de neófito en la Meca del cine:
Después de dos filmes en Hollywood, necesitaba tiempo a solas. Hollywood me había convencido de que nadie me contrataría como director de cine, le había creído. Estaba decepcionado de lo que estaba haciendo, así que empecé a ver las películas que me inspiraron cuando empecé. Hacer Y Tu Mamá También -92%, me ayudó a redescubrirme y redescubrir mi propio país.
Esto nos lleva a las dos películas que marcaron trascendentalmente su carrera, Harry Potter y el Prisionero de Azkaban - 91% y Gravedad - 96%:
No sabía nada de Harry Potter. Vi la primer película y no me gustó. Fui a ver a Guillermo del Toro y él me convenció de hacerla. No podía creer que estuviera dudando en aceptar filmarla.
Por fin había ganado la seguridad y la sabiduría para dirigir esta película (Gravedad) del modo en que quería. Era una película que realmente quería hacer, por primera vez.
Comentarios
Tomatazos
Facebook
Mejores
Nuevos