La figura de Joaquín Guzmán Loera inevitablemente atraerá atención y polémica. El criminal más notorio del México contemporáneo ha capturado la imaginación de la población y era cuestión de tiempo para que esto se trasladara a la pantalla. El gigante del streaming Netflix no perdió tiempo y produjo recientemente una serie, la cual ya levanta ámpula en ciertos sectores del respetable.
Lee también:Series para ver este fin de semana: Castlevania, Outcast y Sillicon Valley
En el tercer episodio de la serie la cámara toma por unos segundos la fachada de una mansión blanca, la cual adjudica al notorio narcotraficante. En la vida real este edificio funge como la sede del Centro Social, Cívico y Cultural Riviera de Ensenada. Éste es un monumento histórico de gran importancia para los habitantes de la zona, así que su utilización para filmar una escena exterior y señalarlo como residencia de el Chapo ha causado gran molestia entre los ciudadanos.
Las autoridades locales no fueron consultadas respecto a la utilización de la imagen del recinto y los primeros ya solicitaron una explicación, preludio de lo que será una eventual demanda por daño moral y en la que se exija el retiro de dicha escena. Por su parte, los abogados de Guzmán Loera también han comentado desde 2016 que procederán legalmente, esto por el uso sin autorización de la imagen de su cliente. Probablemente el equipo legal de la serie ya había previsto la demanda del Chapo, pero no la de Ensenada. Habrá que ver en que manera se desarrolla este conflicto, por mientras, pueden disfrutar de la serie en Netflix y sacar sus propias conclusiones sobre la forma en la que ha sido retratado uno de los criminales más buscados del mundo entero.
