Harvey Weinstein, el galardonado productor de cine, ha sido despedido de su propia empresa, The Weinstein Company. Es conocido principalmente por producir una serie de películas aclamadas por la crítica, como [Pelicula] Tiempos Violentos, [Pelicula] Clerks, [Pelicula] Juego de Lágrimas, [Pelicula] Sexo, Mentiras y Video, [Pelicula] Los Juegos Del Destino y [Pelicula] Mente Indomable, incluso ganando un Óscar por [Pelicula] Shakespeare Apasionado. Weinstein también se ha metido en el teatro con proyectos como The Producers, Billy Elliot el Musical y August: Osage County.
La caída de su buena reputación comenzó con el pleito legal contra las denuncias por acoso sexual emitidas por antiguas empleadas durante décadas. La controversia sólo se hizo más grande cuando la actriz Polina Vataga reveló que ella también fue víctima de los acosos sexuales de Weinstein que datan desde que el ejecutivo trabajaba en Miramax, ahora propiedad de Disney.
Pocos días después de que surgieran las acusaciones, The Weinstein Company reveló en un comunicado oficial (vía ABC) que la junta directiva de la organización decidió despedir a Weinstein:
A la luz de la nueva información sobre la mala conducta de Harvey Weinstein que ha surgido en los últimos días, los directores de The Weinstein Company —Robert Weinstein, Lance Maerov, Richard Koenigsberg y Tarak Ben Ammar— han determinado e informado a Harvey Weinstein que su empleo con The Weinstein Company ha terminado, con efecto inmediato.
Esto deja a The Weinstein Company bajo la dirección de su hermano Bob Weinstein, quien es también cofundador y copresidente, con la ayuda del director de operaciones David Glasser. Tanto Bob como David habían estado tratando de sacar a Weinstein del estudio porque están preocupados de que su afiliación con la marca repercuta en la contratación de talento y en conseguir proyectos internacionales. Como resultado Harvey, se vio obligado a tomar una licencia indefinida antes de que fuera finalmente expulsado de la compañía.
Weinstein refutó las reclamaciones inicialmente, incluso amenazando al New York Times —que dio la noticia—con una demanda. El abogado de Weinstein, Charles J. Harder, descartó las acusaciones diciendo que se basan en un informe defectuoso, aparentemente robado de un archivo de empleados, el cual ha sido desmentido por nueve testigos. El mismo Weinstein creía que podía superar esta controversia y reclamar su lugar no sólo en Hollywood, sino también en la esfera política, siendo un gran financiador para algunas campañas de políticos.
Los hechos han provocado un tremendo daño a su imagen en el contexto de un Hollywood que actualmente está lleno de grandes estrellas que luchan por conseguir la igualdad salarial entre hombres y mujeres, así como romper con el racismo y el machismo normalizado, de manera que ha sido condenando abiertamente sus supuestas acciones impropias. La Compañía Weinstein no tuvo otra opción que despedir a su propio presidente.
De momento el menos grave de los problemas Weinstein es la tremenda ola de comentarios en las redes sociales. Sharon Waxman, consejera delegada y fundadora del portal The Wrap, comentó:
Realmente no tengo tan claro si la carrera de Harvey está acabada, él es el tipo de persona que tiene la habilidad de resurgir, algo que ha hecho en numerosas ocasiones en la industria —continuó— Si él es capaz de pedir disculpas, entonces creo que muchas cosas son posibles. Hollywood no es una oficina pública, no se te exige moralidad. Es un negocio. Y últimamente él ha tenido que sacar adelante su negocio, uno que por cierto ha sobrevivido a pesar de haber estado cerca de la muerte en muchas ocasiones, pero muchas ocasiones, e incluso lo tuvo que vender por 600 millones de dólares. Diría que depende de él su supervivencia.
Gente con dinero compra el silencio con acuerdos económicos. Las cláusulas de confidencialidad permiten que depredadores lastimen a otras personas. Por décadas. —Y en otro tuit escribió— Gente con dinero que paga a la gente que lastimó. Como Trump lo hizo con Trump U [se refiere a la institución educativa con fines de lucro con la que defraudó a estudiantes] o como lo hizo Cosby. Si aceptas dinero, ellos lo seguirán haciendo.
Las mujeres que han decidido hablar acerca de su experiencia frente al acoso de Harvey Weinstein se merecen nuestro respeto. No es algo gracioso ni fácil. Es valentía.
Esta es la verdad… mujeres, yo misma incluida, estaríamos más preparadas a denunciar las experiencias que sufrimos en esta industria si supiéramos que se nos escucharía. Pero no es así. Si supiéramos que hombres/mujeres poderosos en la industria que se declaran 'feministas' nos garantizan que en vez de cerrarnos las puertas por denunciar se abrirán incluso más…
Stephanie Mickus dijo que cuando tenía reuniones en la empresa Weinstein, muchas veces le dijeron —Estarás bien siempre y cuando no te reúnas con Harvey.
Ellen Barkin colega de Weinstein también opinó:
Estoy harta de las disculpas… hagan algo correcto o váyanse al demonio.
Finalmente Meryl Streep quien alguna vez lo llamó "dios", condenó los actos de acoso a través de Huffington Post:
La vergonzosa noticia sobre Harvey Weinstein ha horrorizado a aquellos de nosotros cuya obra defendió, ya aquellos cuyas buenas y dignas causas apoyó. Las mujeres intrépidas que levantaron sus voces para exponer este abuso son nuestros héroes.
Una cosa puede aclararse. No todo el mundo lo sabía. Harvey apoyó el trabajo ferozmente, fue exasperante pero respetuoso conmigo en nuestra relación de trabajo, y con muchos otros con los que trabajó profesionalmente. Yo no sabía sobre estos otros delitos: yo no sabía acerca de sus acuerdos financieros con actrices y colegas. No sabía si tenía reuniones en su habitación de hotel, en su cuarto de baño u otros actos inapropiados y coercitivos. Y si todo el mundo sabía, no creo que todos los periodistas de investigación en el entretenimiento y los medios de comunicación lo hubieran pasado por alto durante décadas para escribir sobre él.
El comportamiento es inexcusable, el abuso de poder familiar. Cada voz valiente que se levanta, se escucha y es acreditada por nuestros medios de vigilancia pueden, en última instancia, cambiar el juego.
viernes diciembre 6, 2024 
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