Cannes 2019: Bong Joon-Ho gana la Palma de Oro con Parasite

La crítica lo había recibido con los brazos abiertos para la proyección de su filme Parásitos - 100% como parte de la competencia oficial y Cannes lo despidió con Palma de Oro en mano (es ahora el primer coreano en lograrlo) y con la ovación del público y la crítica: Joon-ho Bong se convirtió en el máximo ganador de la edición 72 de Cannes al llevarse el galardón a la mejor película por encima de Pedro Almodóvar y Quentin Tarantino que figuraban como favoritos.

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Para el maestro coreano, esta fue la segunda vez que compitió en Cannes. La primera fue con Okja - 86% hace dos años e inició -de forma involuntaria- la batalla entre el festival francés y la plataforma de streaming Netflix, que quedó otro año fuera. Ahora regresó recargado con Parasite, una cinta donde presenta su sello personal en una sátira oscura y demoledora de carácter social, en este caso con la lucha de las clases sociales como eje de la trama, en una película que no desentona en su filmografía.

La historia que cuenta es la de la realidad de dos familias: una de clase baja, que vive en un sótano lleno de insectos, roba el wi-fi de los vecinos y sobrevive doblando cartones para una pizzería; y otra de clase alta que puede darse el lujo de tener empleadas domésticas y la mejor casa que alguien pueda soñar con tener.

Todo se vuelca cuando el hijo de la familia de clase baja reemplaza a un amigo para dar clases de inglés a la hija de la familia de clase alta. A partir de ahí los dos mundos se encuentran y los miembros de la familia de escasos recursos termina trabajando para la segunda.

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Al igual que con Okja, con Parasite recibió una ovación que duró varios minutos, algunos dicen que fueron cinco, tras la proyección del filme que formó parte de la Selección Oficial de Cannes 2019. Quienes la vieron no tuvieron más que comentarios positivos hacia el trabajo del también director de El Expreso del Miedo - 95%. La película se las arregla para usar una casa como locación y metáfora a la vez, donde reflexiona en el estatus social jerárquico y el materialismo.

Para los críticos, Parasite es un duro golpe que resonará en estos tiempos financieramente difíciles y políticamente polarizados. De su comentario social aseguran que convierte al maestro coreano en un impiadoso observador de las desigualdades que genera el capitalismo, en una película que definen como una extraña comedia negra sobre estatus social, aspiración, materialismo, la unidad familiar patriarcal, y las personas que aceptan la idea de tener (o arrendar) una clase de servicio. El director coreano es uno de los que hay que seguir atentamente, por la originalidad de sus filmes y su talento para dirigir.

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