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"Los fanáticos tóxicos", "el fandom tóxico"… frases que se han puesto de moda en los últimos años principalmente, ¿a qué se refieren realmente? Algunos las usan para todos aquellos que no están de acuerdo con la opinión mayoritaria (o minoritaria) sobre una obra de ficción que cuenta con muchos seguidores, pero el actor británico Henry Cavill tiene una opinión muy diferente.

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Obras como [Pelicula] Star Wars: Los Últimos Jedi y la última temporada de [Temporada] Game of Thrones (8) dispararon el uso del calificativo "tóxico" para referirse a aquellos miembros del público que, inconformes con lo que vieron en pantalla, se pusieron a insultar a los directores, escritores y actores que estuvieron involucrados en las producciones hacia las que dirigen su odio. El fanático "tóxico" no sería necesariamente aquel que se enoja cuando no está de acuerdo con las decisiones tomadas por creativos, sino el que hace bullying malintencionado a quienes considera culpables. Los showrunners de Game of Thrones se sintieron tan amedrentados por este acoso cibernético que prefirieron abandonar la trilogía de Star Wars que tendrían a su cargo.

Cavill ha experimentado un poco el descontento de los fanáticos desde que fue elegido para interpretar a Geralt de Rivia en [Temporada] The Witcher, pero a diferencia de otros, se ha mostrado muy comprensivo con los fans, pues antes de ser el actor encargado de encarnar al héroe en la serie de Netflix, él mismo fue un fanático de los videojuegos que popularizaron las novelas de The Witcher. Esto fue lo que dijo sobre los "fans tóxicos" en entrevista con Jake Hamilton (vía Comic Book):



Entiendo lo que estás diciendo, pero cuando se trata de fanáticos, es su derecho tener cualquier opinión que quieran tener, y la gente se enojará, especialmente cuando hablas de libros o juegos, porque Nunca vas a ser la persona exacta que tenían en la cabeza, o con quien jugaron en The Witcher 3, por ejemplo. No considero necesariamente que sea tóxico, solo lo considero apasionado. Y es algo que obviamente he tenido que aceptar a lo largo de los años.

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Con sus palabras Cavill demuestra nuevamente que no ha olvidado su posición de fanático antes de que protagonizara The Witcher. El fan es aquel que ama tanto una obra o un universo de ficción que no lo puede tomar como un simple pasatiempo sino que casi lo eleva al nivel de una fe. Hablando de The Witcher ha sido notoria la molestia de los fans por varios personajes femeninos que en los videojuegos aparecían con piel blanca mientras que en la producción de Netflix se les ha dado una diversidad étnica a todos.

Antes de ser Geralt de Rivia el británico de 36 años dio vida a Superman en el universo cinematográfico de DC y también fue blanco de críticas por parte de numerosos fans que querían a un actor exactamente idéntico a Christopher Reeve y con un traje colorido también.

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En el caso de Star Wars fue muy notorio que el descontento causado por el episodio VIII de la saga generó una gran cantidad de bullying cibernético hacia actrices como Nicole Richie y Steve Ditko, sin olvidar al pobre director Ruben Fleischer, quien de forma similar a Cavill, considera que la mayoría de los fanáticos son respetuosos y los verdaderamente "tóxicos" son una minoría. Esto fue lo que dijo el director en entrevista con Variety:

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Siempre tienes que contextualizar qué tan pequeña es esa parte del fandom. No estoy hablando de la gente a la que le gusta o disgusta cualquier película. Estoy hablando de la gente que se dedica a hostigar a quienes están involucrados en los filmes. Es muy pequeña, pero la vuelven esta cosa enorme. He estado en el huracán por los últimos dos años y te puedo decir que 95% de lo que decibo en Twitter es encantador y considerado incluso cuando a la gente no le gustó mi película. Habiendo dicho eso, es un problema de cualquier fandom. Es casi una característica propia de Internet.