Por más que Ashleigh Murray trata de alejar el caso por abuso sexual infantil en su contra de los medios, no lo logra. Su más reciente decisión de publicar un libro de memorias ha sido señalada como “una traición” por Dylan Farrow, la hija adoptiva que tuvo con Mia Farrow y misma que lo acusó de haber abusado de ella cuando tenía 7 años y quien por años ha mantenido dicha acusación la cual retomó fuerza a finales de 2017 con el movimiento #MeToo.

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Luego de que se anunciara que Apropos of Nothing, el nuevo libro autobiográfico de Woody Allen, Dylan Farrow arremetió contra la editorial que realizará el lanzamiento, pues es la misma que publicó Catch and Kill, el libro en el que su hermano, el periodista Ronan Farrow, detalló cómo los medios de comunicación deliberadamente ignoraron acusaciones contra varias celebridades por acoso y abuso sexual. Esta fue la declaración que hizo en Twitter:

La publicación de Hachette de las memorias de Woody Allen es profundamente perturbadora para mí personalmente y una gran traición a mi hermano, cuya valiente investigación fue capitalizado por Hachette y dio voz a numerosas sobrevivientes de abuso sexual a manos de hombres poderosos. Jamás me contactó nadie para verificar la información de estas “memorias”, lo que demuestra una abdicación de la más básica responsabilidad de Hachette.



Las memorias de Apropos of Nothing supuestamente contendrán relatos sobre la vida personal y también profesional de Allen, quien recientemente dirigió y estrenó, [Pelicula] Un Día Lluvioso en Nueva York, y [Pelicula] La Rueda de la Maravilla, así como de su familia y sus relaciones amorosas. Más detalles sobre el contenido del libro no fueron revelados por lo que no es posible saber si hablará de su relación con Mia o Dylan Farrow y si se hace un recuento de los hechos de 1993 cuando fue investigado por abuso sexual.

Esa última película del director fue el centro de polémica pues se terminó de realizar justo cuando el reportaje de Ronan, su hijo, reveló la impunidad con la que Harvey Weinstein, productor encontrado culpable de delitos sexuales, había acosado y abusado de mujeres por décadas. Esto llevó a Amazon, la productora del título, a abandonar planes para estrenar el filme, lo que llevó a Allen a demandar a la empresa, finalmente se estrenó en varios mercados pero no en Estados Unidos.

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El caso de Allen y Dylan ocurrió en 1993, cuando ella lo acusó de haber abusado de ella, en ese entonces tenía 7 años. Aunque jamás se presentaron cargos en su contra y el doctor que lideró las investigaciones dijo haber encontrado inconsistencias en la acusación de ella, el incidente retomó la atención del público tras el surgimiento del movimiento #MeToo, el cual comenzó luego de las revelaciones hechas por su hermano Ronan, mismas que lo llevaron a publicar otro libro, también sobre estos temas, en la misma editorial que ahora retomará las memorias de su padre adoptivo.

En 1993, las investigaciones en contra de Allen fueron desestimadas y se decidió así para evitar más escrutinio sobre la entonces niña de 7 años, esto con aprobación de Mia Farrow. Desde el primer momento, Allen negó la acusación y dijo que era todo obra de su expareja quien quería vengarse de él por comenzar una relación con su otra hija adoptiva, Soo-Yin Previn (de entonces 22 años), con quien el director sigue casado desde 1997. Ambos, Previn y el tercer hijo de Farrow y Allen, Moses, han defendido al cineasta y acusado a la actriz de haber entrenado a Dylan para mentir y de infligir abuso físico en los dos cuando eran niños.

Las memorias de Allen serán lanzadas al público el 7 de abril en Estados Unidos, hasta el momento la editorial no ha respondido a los reclamos de Farrow. Mientras tanto el director sigue trabajando en una nueva película junto a Christoph Waltz.

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