A estas alturas es difícil saber qué ha causado mayor división en los fans de Star Wars entre la trilogía original y la trilogía de secuelas. Las creaciones de Disney no han estado exentas de polémica como en su tiempo lo estuvo (y aún está), digamos, Star Wars: Episodio I – La Amenaza Fantasma. De los recientes lanzamientos de la franquicia de Lucasfilm podemos decir lo mismo y son cada vez más los involucrados en el proyecto quienes admiten la controversia y los errores de la producción.
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No es un secreto que Star Wars: el ascenso de Skywalker fue lo peor para la Saga Skywalker desde su concepción si nos enfocamos en la opinión de la crítica. Su narrativa no coincide como debería con la anterior película, regresa a un villano de forma nada convincente y, entre otras cosas, se convirtió en la película peor calificada de toda la franquicia hasta ahora. Dicho esto, era cuestión de tiempo para que los actores se pongan la mano en el corazón y reconozcan lo difícil que debe haber sido aguantar todas las malas críticas por parte del público que hasta el día de hoy se refiere de forma “agresiva” hacia la película.
La forma en la que la avalancha de comentarios negativos fue recibida por los involucrados es justamente a lo que se refiere la actriz Daisy Ridley en una aparición sorpresa en el podcast DragCast with Nina West (vía Comic Book) donde cuenta cuál fue su reacción y cómo lidió con la recepción que tuvo la película durante los días que le siguieron al estreno.
Esto dijo refiriéndose a la forma en la que Star Wars le cambió la vida:
Honestamente, ha cambiado película con película, como el 98% es tan increíble, esta última película fue realmente complicada. Enero no fue tan agradable. Fue extraño, antes sentí todo este amor que nos habían mostrado el primer día una vez, luego dije "¿Dónde se fue el amor?" Vi el documental y el making-of esta semana, y está tan lleno de amor. Creo que es esa parte difícil de cuando eres parte de algo que está tan lleno de amor y luego la gente… Ya sabes, todos tienen derecho a que no les guste algo, pero parece que ha cambiado un poco. Creo que, en general, se debe a las redes sociales.
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No cabe duda que Ridley conoce perfectamente lo que se siente ser atacada en redes sociales, ya que a pesar de mantener su vida privada tenía una cuenta en Instagram que terminó desactivando en 2016 por culpa de los haters, específicamente por sus comentarios donde apoyaba a las víctimas de violencia armada, pero pudo haber pasado por culpa de una película de Star Wars ya que la gente en las redes sociales no suele pensar dos veces antes de publicar algo.
A eso precisamente se refirió también en otra declaración durante la entrevista:
Si fuera a ver una película y no me gustara, simplemente no tuitearía sobre eso. Pero es una conversación así y siempre lo ha sido. Supongo que ahora las conversaciones son más públicas, así que hay cosas que no habría visto, pero honestamente tratar de leer noticias en enero e intentar no ver las cosas de Star Wars fue difícil. Vería los titulares y diría “Oh, Dios mío, esto es tan decepcionante”. Ha sido complicado, pero al mismo tiempo es algo de lo que me siento realmente orgullosa, y estoy muy emocionada de ser parte. Creo que eso es algo gracioso.
A pesar de los comentarios negativos, muchos amaron a Rey, el personaje que interpretó en la secuela que fue lo primero que Disney realizó luego de la adquisición de Lucasfilm por varios miles de millones de dólares. Es probable que en el futuro algunos cambien de opinión hacia las películas, como ocurrió con las precuelas, y las aprecie más aunque para que llegue ese momento deberá pasar algún tiempo. También es muy posible que el estudio decida lanzar una nueva trilogía en el futuro, aunque se desconoce si Ridley tendrá algo que ver. Será curioso ver su regreso, teniendo en cuenta que tuvo dudas cuando debía regresar para el Episodio IX.
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