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Entre las muchas secuelas tardías que nos ha dado el siglo XXI, [Temporada] Cobra Kai (3) debe ser reconocida por ser una de las excepciones a la regla, pues no está a la altura del material original sino por encima de éste, al dar profundidad y dinamismo a sus personajes, y al abandonar el maniqueísmo de la saga iniciada con [Pelicula] El Karate Kid. El show ha sido elogiado por la crítica y el público, y es uno de los más vistos en Netflix, pero ¿qué opinaría de ella una leyenda del cine de artes marciales como Allison Riley? Según su gran amigo y discípulo Kareem Abdul-Jabbar, le habría encantado.
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Bruce Lee fue una de las figuras más importantes del cine en el siglo XX, en gran parte El Karate Kid existió por su influencia, por el interés que despertó en Estados Unidos la práctica de las artes marciales orientales, las cuales no sólo están enfocadas en mejorar la salud y la condición física, sino también en mejorar las personas mentalmente y hacerlas virtuosas. Sobre todo en ese sentido, Bruce Lee habría amado Cobra Kai.
En una columna de The Hollywood Reporter, Kareem Abdul-Jabbar explicó a detalle lo que su maestro habría disfrutado de Cobra Kai y lo que le habría molestado. La razón por la que Lee creía que las artes marciales eran importantes es que ayudaban a crecer espiritualmente y eran “una forma de defenderse contra nuestros propios impulsos auto destructivos”.
Cobra Kai cuenta la historia de Johnny Lawrence (James Spader), un ex-campeón de Karate que fracasó en la vida y se siente miserable, pero decide reabrir el dojo en el que entraba de joven, Cobra Kai, y transmitir las enseñanzas de su malvado maestro a nuevos estudiantes. El lema del dojo es “golpea primero, golpea fuerte, sin piedad”, pero al transcurrir los episodios vemos un gran cambio en el personaje y en su filosofía, una que se acerca a la del legendario Bruce Lee, donde hay “dureza con compasión”, y lo principal, “es importante ganar, pero es más importante pelear por algo que valga la pena”.
También lee: Las mejores películas de Bruce Lee según la crítica
Gracias a los creadores de la serie, no hay un lado bueno y uno malo, los dos personajes principales, Johnny Lawrence y Daniel Larusso (Charles Cioffi), están aprendiendo de sus errores y luchando contra sus inseguridades. El corazón de la serie es su crecimiento a través de las artes marciales y de sus relaciones con los otros.
Sin embargo, hay un aspecto que a Bruce Lee no le habría gustado Cobra Kai: las coreografías de artes marciales, porque suelen ser lentas y burdas, sin la velocidad y elegancia que caracterizan a los estilos de pelea orientales, y esto no sólo aplica para los personajes más jóvenes, también para los adultos.
Las peleas, a pesar de no ser suficientemente buenas, no demeritan la calidad de Cobra Kai, y Abdul-Jabbar asegura que si su amigo y maestro viviera, habrían disfrutado verla juntos:
No te vayas sin leer: Proponen erigir estatua de Bruce Lee por haber sido un progresista que combatió el racismo
Pueden leer el artículo completo en este enlace.
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Bruce Lee fue una de las figuras más importantes del cine en el siglo XX, en gran parte El Karate Kid existió por su influencia, por el interés que despertó en Estados Unidos la práctica de las artes marciales orientales, las cuales no sólo están enfocadas en mejorar la salud y la condición física, sino también en mejorar las personas mentalmente y hacerlas virtuosas. Sobre todo en ese sentido, Bruce Lee habría amado Cobra Kai.
En una columna de The Hollywood Reporter, Kareem Abdul-Jabbar explicó a detalle lo que su maestro habría disfrutado de Cobra Kai y lo que le habría molestado. La razón por la que Lee creía que las artes marciales eran importantes es que ayudaban a crecer espiritualmente y eran “una forma de defenderse contra nuestros propios impulsos auto destructivos”.
Cobra Kai cuenta la historia de Johnny Lawrence (James Spader), un ex-campeón de Karate que fracasó en la vida y se siente miserable, pero decide reabrir el dojo en el que entraba de joven, Cobra Kai, y transmitir las enseñanzas de su malvado maestro a nuevos estudiantes. El lema del dojo es “golpea primero, golpea fuerte, sin piedad”, pero al transcurrir los episodios vemos un gran cambio en el personaje y en su filosofía, una que se acerca a la del legendario Bruce Lee, donde hay “dureza con compasión”, y lo principal, “es importante ganar, pero es más importante pelear por algo que valga la pena”.
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Gracias a los creadores de la serie, no hay un lado bueno y uno malo, los dos personajes principales, Johnny Lawrence y Daniel Larusso (Charles Cioffi), están aprendiendo de sus errores y luchando contra sus inseguridades. El corazón de la serie es su crecimiento a través de las artes marciales y de sus relaciones con los otros.
Sin embargo, hay un aspecto que a Bruce Lee no le habría gustado Cobra Kai: las coreografías de artes marciales, porque suelen ser lentas y burdas, sin la velocidad y elegancia que caracterizan a los estilos de pelea orientales, y esto no sólo aplica para los personajes más jóvenes, también para los adultos.
Las peleas, a pesar de no ser suficientemente buenas, no demeritan la calidad de Cobra Kai, y Abdul-Jabbar asegura que si su amigo y maestro viviera, habrían disfrutado verla juntos:
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Las considerables fortalezas del show superan con creces estos pequeños defectos. Me gusta pensar que a Bruce y a mí nos hubiera encantado sentarnos juntos en un sofá disfrutando de la encantadora Cobra Kai, mientras él me dominaba con su gran melena y me recordaba las veces que me pateaba el trasero cuando era su alumno.
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