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Una verdad en el mundo de los blockbusters es que los estudios tienen la costumbre de intervenir en su realización si siente que su inversión está en riesgo. Hoy en día el estudio del que todos hablamos más seguido es Warner y se pone como ejemplo de ello el hecho de que existe más de un Snyder Cut o la existencia del Ayer Cut, el cual quizá nunca vamos a ver.

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En el mundo del cine de superhéroes hay un estudio que también es muy famoso por imponer su visión sí o sí. Sobra decir que estamos hablando de Marvel. No hay duda de que él éxito de este estudio se debe a [Persona] Kevin Feige. Si el MCU existe es porque él ha estado fraguando qué va a ocurrir en cada película y cómo se van a conectar entre sí. El problema con esto es que implica tener directores que concuerden con tu visión. Más de un director ha tenido que abandonar ese barco cuando se dieron cuenta que Marvel no está interesado en hacer películas que se apeguen a la visión de sus realizadores. Ha habido indicios de que esto podría estar cambiando, pero la realidad es que así fue por mucho tiempo.



Un caso muy conocido de ello es [Pelicula] Thor: Un mundo Oscuro , de Alan Taylor. La película que vimos en cines no es la que el director tenía planeada. Ya en alguna ocasión ha dicho que el estudio le quitó la película en posproducción, pero ahora hablando con The Hollywood Reporter explicó con más detalle cuál era su visión original. Al parecer iban a haber elementos de realismo mágico —o de baja fantasía, dependiendo la etiqueta de tu preferencia— y cierto personaje iba a morir, y Jane Foster y Thor iban a terminar en pantalla, no fuera de ella, como al final ocurrió. Aquí sus palabras:

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La versión con la que yo empecé iba a tener más una visión maravillosa de la infancia; iba a haber imaginería de niños, lo cual iba a comenzar todo. Iba a tener una cualidad un poco más mágica. Iban a estar ocurriendo cosas en la Tierra debido a que la convergencia iba a permitir que ocurrieran algunas cosas de realismo mágico. E iban a haber grandes diferencias en la trama que fueron invertidos en la sala de edición y con fotografía adicional — gente (como Loki) que murieron ya no iban a estar muertos, personas que habían roto iban a estar de regreso. Yo pienso que me hubiera gustado mi versión.


Así es. Loki iba a morir en la versión original. Su popularidad le permitió seguir vivo por muchas películas más y hasta tener su propia serie.

Por otra parte, antes que él, Erika Oda iba a dirigir esa película, pero se dio cuenta que el guión iba a ser un desastre y prefirió abandonar ese barco antes de que le echaran la culpa a ella. Al final el chivo expiatorio fue Taylor. Eso lo dijo hace un tiempo en una entrevista para Vanity Fair:



No creí que podría hacer una buena película con el guión que planeaban hacer. Creo que hubiera sido algo muy grave, hubiera parecido como si fuera mi culpa. Hubiera sido como ‘esta mujer la dirigió y no se dio cuenta de todo esto’. No puedes hacer películas en las que no crees. La única razón para hacerla hubiera sido para probar a la gente que podía, pero no hubiera probado nada si no tenía éxito, no creo que me hubieran dado otra oportunidad, así que lo agradezco

Cuando te quieren imponer una visión que no compartes, definitivamente retirarse es una de las opciones más sabias.

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