Robert Eggers asegura que no soporta ver La Bruja

Pronto llegará a salas comerciales El Hombre del Norte - 87%, la más reciente cinta de Robert Eggers y la primera en alejarse unos pasos del género de horror. El director conquistó a la industria y al público con su ópera prima y con antecedentes moderados como creador de cortometrajes. Cuando La Bruja - 91% se estrenó en 2015 ayudó a popularizar la nueva ola de horror dramático, impulsó la carrera de Anya Taylor-Joy y creó grandes expectativas para el futuro del cineasta, quien acaba de confirmar que, a pesar de su fama, es incapaz de ver esta película por todos los errores técnicos que no puede evitar notar.

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No es raro que un director, en especial aquellos que son más perfeccionistas, encuentren muy complicado el acercarse a un trabajo previo. Para la mayoría, una obra se termina y queda en el pasado, donde debe estar para no estorbar con los nuevos proyectos que tienen en mente. Esto es todavía más común entre aquellos que iniciaron con producciones más independientes, pues la falta de recursos puede afectar de manera considerable la visión que tenían para una historia específica y cada que regresan a ella se lamentan al no ver cumplidas sus propias expectativas.

Robert Eggers no puede escapar a ese tipo de experiencia, aunque sólo lleve tres largometrajes en su carrera. La Bruja cuenta la historia de una familia que es expulsada de su comunidad y debe vivir a mitad de un bosque. Además de los riesgos constantes que representa la naturaleza a su alrededor, la figura de la bruja es una amenaza más real y feroz. Después de la desaparición de un bebé, la protagonista es acusada y cada nuevo desequilibrio familiar la acerca más y más a su agridulce destino.

La película añadió muchísimo material de calidad a la mitología de las brujas y demostró que el horror no siempre se sirve de litros de sangre y cuerpos desmembrados por todas partes y sin justificación real más allá de satisfacer la sed de sangre de unos cuantos. Más importante todavía, esta obra es la mejor prueba de que el horror dramático, también llamado “terror elevado” no tiene que separar a las audiencias que tienen expectativas más comunes sobre estas obras y aquellas que esperan encontrar personajes complejos y una historia llena de metáforas, alegorías, simbolismos y referencias históricas y al cine clásico.

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Gracias a todos estos aspectos positivos, La Bruja siempre mantendrá su lugar en la historia del cine de terror, incluso cuando muchos reconocen que El Faro - 96% es una cinta mejor lograda. Sin embargo, para los involucrados esta fama no funciona igual. Anya Taylor-Joy comentó hace tiempo que le cuesta mucho trabajo ver la película porque no siente que fuera su mejor trabajo e incluso reveló que estaba segura de que sería despedida después de un par de días de filmación. Ahora es el propio Robert Eggers quien confirma una sensación similar pero desde su posición como director. En entrevista con The Guardian, el también guionista explicó su decepción con La Bruja y sus razones para no querer verla nunca:

Honestamente, no soporto ver La Bruja ahora. No es que sea mala, y las actuaciones son grandiosas, pero yo no contaba con la habilidad suficiente como cineasta para plasmar en la pantalla lo que estaba dentro de mi cerebro.

Eggers considera que su segundo intento fue más cercano a lo que él quería trabajar:

En El Faro sí pude hacer eso. Y The Northman, estoy orgulloso de la película, pero no todo es como yo esperaba. Así que me gustaría hacer algo con el alcance y la escala necesaria para poder llevar a la pantalla lo que está en mi imaginación.

Es interesante que él considere que no pudo plasmar justo lo que quería, pues los fans de La Bruja no paran de admirar y analizar escenas visualmente poderosas como la aparición del Diablo, la primera vez que una de las brujas vuela y, por supuesto, el muy comentado final.

Robert Eggers agradece la oportunidad de contar con más presupuesto para hacer algo como The Northman, pero también reconoce que este tipo de tratos hace que las productoras tengan más control sobre el corte final y eso es algo que no lo termina de convencer. En la misma charla, el director asegura que quiere regresar a sus raíces más independientes para hacer sus próximas historias:

La Bruja, de Robert Eggers, ¿qué dijo la crítica en su estreno?

Ciertamente quiero hacer algo más pequeño, y no sólo por la presión y el dolor, que es muy real, sino también porque aprendí mucho sobre The Northman, que fue realmente una película que me quedó demasiado grande. Y finalmente siento que ahora sé cómo hacer una película, ¿sabes?

Si todo sale bien, el siguiente proyecto de Eggers será el remake de Nosferatu - 97%, aunque muchas cosas se han dicho como hechos, todavía no hay tanta información sobre este trabajo que debía comenzar su filmación este año, pero sufrió un retraso importante con la salida de Harry Styles.

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