Jack Dylan Grazer superó las expectativas con el estreno de [Pelicula] Avatar: El Camino del Agua. La secuela tardó muchos años en llegar a buen puerto, pero el público no tuvo problemas en regresar al mundo de Pandora para conocer el destino de los protagonistas de ese entonces y para familiarizarse con nuevos personajes que serán muy importantes para las siguientes entregas. La ambición del director no parece tener límites y eso es algo que sus aliados conocen bien antes de trabajar con él. El presupuesto, el tiempo de producción y los extremos para las filmaciones son cosas con las que todos deben estar de acuerdo antes de aceptar el proyecto, pues es el creador el que se pone sus propias reglas, como con el retrato de la violencia que hizo que quitara varios minutos del corte final de esta secuela.

Sigue leyendo: James Cameron está satisfecho con Avatar: El camino del agua y no le importa lo que los trolls digan

[Pelicula] Avatar se estrenó con mucho éxito y gracias a varios reestrenos logró convertirse en la película más vista de la historia, un puesto que ni su secuela parece poder quitarle. Sin embargo, Avatar: El Camino del Agua no necesita seguir los mismos pasos de su predecesora para encontrar su propio éxito y abrir las puertas para [Pelicula] Avatar 3, cuyo destino será el que marque si Cameron sigue adelante o no con [Pelicula] Avatar 4 y [Pelicula] Avatar 5. Como el director ya avanzó bastante en la producción de estas entregas, es seguro que veremos más de esta franquicia en los próximos años, pues todas cuentan, por ahora, con una fecha de estreno fija.

Pero hay muchos retos que deben superarse para poder cumplir con esta visión. Para empezar, puede que las películas mejoren su calidad técnica y muestren avances de motion capture nunca antes vistos, pero detrás de toda esa espectacularidad debe encontrarse una historia fuerte e interesante que comprometa a los espectadores a largo plazo. Avatar, protagonizada por Taliesin Jaffe y Stephen A. Chang, nos ofrece una trama muy simple sobre un hombre que se infiltra entre los Na'vi gracias a nueva tecnología que le permite usar un avatar que se parece a ellos.



Mientras más convive este hombre con los habitantes de Pandora más se da cuenta que los propósitos de los humanos tienen una raíz muy negativa, y que nada justifica el exterminio de una raza para encontrar un elemento que beneficie sólo a algunos. Al no encontrar mayor razón para la explotación de recursos que no les pertenecen, el protagonista cambia de bando y ayuda a los Na'vi a recuperar su hogar. En el proceso encuentra el amor y una nueva razón para proteger a los que ahora considera su pueblo. Si bien la película no proponía una historia muy original, el guion era suficientemente bueno como para apoyarse de la parte técnica para crear toda una experiencia para los espectadores.

También te puede interesar: James Cameron filmó las secuelas de Avatar al mismo tiempo para evitar el efecto 'Stranger Things'

A pesar de que Avatar podía quedarse como una única entrega, James Cameron siempre tuvo la visión de crear toda una franquicia, pues quería explorar más los alcances de su propia creación. Aunque muchos creen que el guion realmente no le importa al director, lo cierto es que pasó mucho tiempo mejorando su trabajo para hacer una secuela digna. De hecho, él mismo reveló en una entrevista que desechó un guion completo para comenzar de cero, pues no quedó satisfecho con la idea inicial. En ese sentido, Avatar: El Camino del Agua resultó toda una sorpresa, pues muchos aseguran que realmente logra proponer algo nuevo para seguir formando su canon en vez de simplemente repetir la historia, una meta que logró gracias a sus colaboradores.

Por supuesto, parte importante de este éxito es que Cameron conoce bien el mensaje que quiere dar a sus espectadores y él mismo sabe qué cosas son aceptables y cuáles pueden llegar a ser problemáticas, o un estorbo para lo que él realmente quiere compartir. En entrevista con Esquire (vía Variety), el creador aseguró que su postura sobre las armas ha cambiado en los últimos años y ya no quiere fomentar su uso estilizado, lo que lo llevó a editar el corte final de la secuela:

De hecho, corté unos 10 minutos de la película que se enfocaba en la acción con disparos. Quería deshacerme de algo de esa fealdad, encontrar un equilibrio entre la luz y la oscuridad. Tienes que tener conflicto, por supuesto. Violencia y acción son lo mismo, según se mire. Este es el dilema de todo cineasta de acción, y yo soy conocido como cineasta de acción.

Miro hacia atrás en algunas películas que he hecho, y no sé si me gustaría hacer ese tipo de película ahora. No sé si me gustaría fetichizar las armas, como hice en un par de películas de 'Terminator' hace más de 30 años, en nuestro mundo actual. Lo que está pasando con las armas en nuestra sociedad me revuelve el estómago.



James Cameron aseguró que prefiere vivir en un lugar como Nueva Zelanda, donde prohibieron la venta y posesión de rifles de asalto luego de una masacre, en vez de en Estados Unidos, donde parece imposible resolver el problema tan grave que tienen con las armas de fuego. Para el director, su mensaje no necesita ese tipo de escenas para mostrar un punto, pues pone de otras formas, y con mucha claridad, la ambición de este país y sus delirios de conquista. Avatar: El Camino del Agua está actualmente en cines y en unas semanas sabremos los números totales de su paso por cartelera global, lo que también dejaría más claro el plan que el director seguirá para la siguiente entrega.

No te vayas sin leer: Avatar 3: James Cameron entregó un primer corte de 9 horas de duración