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viernes diciembre 6, 2024 
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Hasta hace unos años, [Escritor] J.K. Rowling era elogiada por ser una de las mujeres escritoras más importantes de la historia. Las películas de [Pelicula] Harry Potter y La Piedra Filosofal lograron definir un legado intocable para el personaje, pero la propia vida de la autora también era una parte importante para sus fans. Luego de superar muchos obstáculos personales, y la misoginia propia del medio, Rowling logró establecerse y convertirse en una millonaria feminista y abiertamente política. Sin embargo, la reputación de su figura se ha venido abajo desde hace tiempo por sus comentarios transfóbicos, lo que a su vez ha marcado ciertos problemas para su compañía productora.
Sigue leyendo: J.K. Rowling admite que no le importa arruinar su legado con su transfobia: “estaré muerta”
Como buena empresaria, Rowling rápidamente se dio cuenta que las adaptaciones de su obra de fantasía, que continuaron con la franquicia de [Pelicula] Animales Fantásticos y Dónde Encontrarlos, le permitían tener poder y control sobre la narrativa en vez de sólo sentarse a recibir los cheques como hacen otros escritores que prefieren enfocarse en su propio medio. Además de formar una alianza importante con Warner Bros. Discovery para expandir el mundo mágico de Harry Potter, de cine a parques temáticos, la autora también comenzó a trabajar otros proyectos literarios que podían ser adaptados.
The Causal Vacancy fue un primer gran ejemplo de esto. Es verdad que algunos tuvieron problemas para reconocer el estilo de la autora en una historia para adultos muy alejada de Harry Potter, pero los críticos la elogiaron y la novela llegó al público adecuado, igual que su adaptación televisiva. Para tener más orden y control sobre estos proyectos, y nuevas propuestas de otros creativos, Rowling fundó en 2013 la compañía productora Brontë Film and TV, que la mantendría en el mapa y permitiría el reconocimiento de voces novedosas y frescas en el medio.
Pero las cosas cambiaron radicalmente y el contexto mundial y social han llevado a la autora a ver ciertas pérdidas a nivel económico y personal. La postura anti-trans de Rowling no es nueva, pero el escenario ha empeorado porque el propio sistema en redes sociales es más extremo y está más dividido que nunca. Como algunos la defienden a muerte, y otros la amenazan de muerte, la escritora es incapaz de reconocer el daño que sus palabras ejercen en el público, y hasta entre esos fanáticos que la admiraban y ahora no saben que hacer con su cariño por Harry Potter.
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Además de todo, la industria del cine y la televisión se vio fuertemente afectada por la pandemia mundial, lo que terminó por condenar a ciertas empresas menores que, o fueron absorbidas por otras o tuvieron que cerrar, con algunas cuantas todavía a flote, pero con incertidumbre total sobre su futuro. Según Deadline, la compañía productora de J.K. Rowling tuvo un desplome del 74% de sus ganancias, marcadas especialmente por el cierre por COVID de la obra de teatro Harry Potter and the Cursed Child. Para comparar, en los 12 meses hasta marzo del 2022 la compañía vio un beneficio de £1.8 millones, el equivalente a US$2.2 millones, mientras que en 2021 obtuvo £6.9 millones, alrededor de US$8 millones.
El reporte inicial de la compañía asegura que la baja simplemente fue por lo sucedido con la obra de teatro, pues en ese tiempo era la única producción activa de la productora; sin embargo, algunos creen que la percepción por la figura de Rwoling también tuvo mucho que ver. En los últimos años, ya no son sólo los fans los que responden a sus comentarios, también actores, críticos, directores y otros escritores han tomado una postura en contra de su visión, por mucho que respeten y admiren lo que ella logró con su saga de fantasía.
Brontë Film and TV, que Rowling fundó junto a Neil Blair, su agente literario, no está lista para desaparecer, y hace tiempo se confirmó que trabajarían de la mano con BBC para adaptar The Ink Heart, novela que la autora publicó bajo el seudónimo de Robert Galbraith en 2022 y que reavivó las críticas en su contra porque en él muestra a una mujer siendo atacada y juzgada por su transfobia. Esta adaptación marcará la sexta temporada de Strike, una serie que ya tiene a sus seguidores desde el 2017 y que también ha sido acusada de no hacer una justa representación de la comunidad LGBTQ+
No te vayas sin leer: J.K. Rowling dice que se irá a la tumba sin retractarse de su transfobia
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Pero las cosas cambiaron radicalmente y el contexto mundial y social han llevado a la autora a ver ciertas pérdidas a nivel económico y personal. La postura anti-trans de Rowling no es nueva, pero el escenario ha empeorado porque el propio sistema en redes sociales es más extremo y está más dividido que nunca. Como algunos la defienden a muerte, y otros la amenazan de muerte, la escritora es incapaz de reconocer el daño que sus palabras ejercen en el público, y hasta entre esos fanáticos que la admiraban y ahora no saben que hacer con su cariño por Harry Potter.
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Brontë Film and TV, que Rowling fundó junto a Neil Blair, su agente literario, no está lista para desaparecer, y hace tiempo se confirmó que trabajarían de la mano con BBC para adaptar The Ink Heart, novela que la autora publicó bajo el seudónimo de Robert Galbraith en 2022 y que reavivó las críticas en su contra porque en él muestra a una mujer siendo atacada y juzgada por su transfobia. Esta adaptación marcará la sexta temporada de Strike, una serie que ya tiene a sus seguidores desde el 2017 y que también ha sido acusada de no hacer una justa representación de la comunidad LGBTQ+
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