Serie live action de One Piece fue más costosa que Game of Thrones y ya es una de las más caras de la historia

Netflix comenzó como un servicio de streaming que se sentía como una tierra prometida para los espectadores entre la salvación de varias series canceladas y la promesa de que sus creaciones originales siempre llegarían al final, tomara el tiempo que tomara. Sin embargo, mientras más grande se hacía y mientras más empresas buscaban imitar su sistema, la compañía tuvo que empezar a tomar más riesgos y hacer más sacrificios. Por supuesto, esto no siempre ha dado resultado y este año estrenará uno de sus títulos más complicados: la versión live action de One Piece que ya se ha convertido en su producción más cara y superó el presupuesto de Game of Thrones - 83% en HBO.

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Uno de los ángulos más importantes para estos servicios de streaming es la creación de material original, lo que a su vez puede justificar el lanzamiento de franquicias con secuelas y spin-offs diversos que fácilmente pueden dominar el catálogo por años. Sin embargo, este tipo de propuestas no siempre funcionan, y en los últimos años hemos visto a las compañías competir contrarreloj e invirtiendo cantidades increíbles de dinero para asegurar al menos un gran éxito de temporada. En su momento, series como Game of Thrones fueron un gran riesgo por su presupuesto, pero el resultado fue tan bueno que los productores sabían que no se darían pérdidas importantes.

Pero el contexto de la televisión y los servicios de streaming ha cambiado mucho en poco tiempo, y es que una serie de presupuesto mediano como Merlina - 69% o Besos, Kitty - 64% pueden quedarse en lo alto del catálogo por meses, lo que hace que la compañía busque cómo explotarlas con nuevas temporadas con un precio similar pero con menos tiempo de producción. Por supuesto, esto no hace desaparecer esos otros proyectos caros que las productoras quieren levantar como sea posible, como El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder - 90% o Citadel - 70% que, según se dice, recibieron segundas temporadas porque es más barato que cancelarlas en este momento.

Las cantidades que se manejan suenan irreales para una serie o película que se verá de manera exclusiva en streaming, pero la realidad es que empresas como Netflix seguirán gastando mucho dinero, y cancelando otros títulos que no obtengan éxito al minuto de su estreno para poder costearlas. De hecho, la marca ha sido muy criticada por cancelar títulos prometedores como Agencia Lockwood - 91% o 1899 - 80%, mientras entrega proyectos como El hombre gris - 37% o Cowboy Bebop - 67% que no fueron muy bien recibidos por el público y la crítica.

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Este año, Netflix deberá superar varios obstáculos y una muy mala racha para poder estrenar con éxito su versión live action de One Piece. La adaptación se confirmó hace años, pero muchos fans estaban seguros de que no llegaría lejos porque el anime y el manga de Eiichirō Oda son demasiado extensos para el ritmo de un servicio de streaming. Sin embargo, con la promesa de que el creador estaría al tanto de cada paso, Netflix siguió adelante sin saber cómo resultarían las cosas. El primer avance oficial dividió bastante a los seguidores, pero también demostró que la compañía realmente invirtió para poder hacerle justicia a este mundo de piratas.

Según un reporte de Daily Dose of Anime (vía CBR), el presupuesto para cada episodio de One Piece es increíblemente elevado y ya la deja como una de las series más caras de la historia. Al parecer, cada capítulo costó US$18 millones, varios millones más que Game of Thrones y The Mandalorian - 90% que rondaban los US$15 millones, aunque no está para nada cerca de los US$60 millones de Los Anillos de Poder, cuyos capítulos siguieron el ritmo de una producción cinematográfica. Esto significa que si la serie no es un éxito durante el primer fin de semana de estreno en agosto, entonces estaremos ante uno de los fracasos más sorprendentes y lamentables de Netflix.

Netflix insiste en encontrar la fórmula correcta para adaptar animes, pues están seguros de que si lo logran tendrán entre manos posibilidades infinitas para explorar en el futuro, aunque sus primeros y costosos intentos no han funcionado muy bien. Lo más inquietante es que la empresa también hizo una gran inversión con la versión live action de Avatar: la leyenda de Aang: Libro 1 - 100% que estrenará en el 2024 y que podría ser un desastre luego de que los creadores de la animación original se retiraran del proyecto por diferencias creativas, una pérdida que la productora no puede darse el lujo de enfrentar.

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