Duszejko (Agnieszka Mandat-Grabka) vive en una pequeña comunidad en una lejana montaña cerca de la frontera entre Polonia y República Checa. Ella es una apasionada astróloga y estricta vegetariana. Un día sus amados perros desaparecen en una noche nevada, después de descubrir el cadáver de su vecino y huellas de un animal en la nieve junto a él. Posteriormente más hombres mueren en circunstancias similares, todo ellos miembros muy importantes de la comunidad y cazadores apasionados. En algún punto Duszejko se vuelve incluso sospechosa de estas misteriosas muertes mientras todos se preguntan si estos hombres fueron asesinados por algún animal o fueron víctimas de alguna venganza.