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¿Quién diablos es Jing Wu? El actor y artista marcial dirigió, escribió y protagonizó [Pelicula] Wolf Warrior II, una de las cintas más taquilleras de 2017 a nivel global y ahora la más taquillera en la historia de China. A pesar de tener una carrera de años en el cine de acción, es hasta ahora cuando la fama y el éxito tocan a la puerta del histrión. Si bien a sus 43 años Jing no es precisamente un actor joven (además de que ha padecido numerosas lesiones filmando escenas de combate), lo cierto es que su reciente éxito lo perfila al estrellato local y, quizás, también internacional. Dependerá de que otras cosas se alineen, pero, sin duda, Wu Jing está en los cuernos de la luna; es su momento y merece una breve retrospectiva.
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Nacido el 3 de abril de 1974 en Beijing, China, Wu Jing proviene de una familia de artistas marciales, tradición mantenida por su padre y abuelo. A los seis años entró en el equipo de Wushu de Beijing, en el cual llegó a competir un joven Jet Li años atrás. Jing rápidamente se convirtió en un notable atleta, lo cual hizo de él un ganador de competiciones y campeonatos de esta disciplina. Así como Donnie Yen y otros artistas marciales, Yuen Woo Ping lo descubrió y apadrinó en su debut fílmico: Tai Chi Boxer. El joven experto en artes marciales continuó en su esfuerzo por avanzar en el escalafón del cine de acción de Hong Kong y logró colaborar con gente tan importante como Lau Kar Leung, Sammo Hung Kam-Bo y Donnie Yen. Con este último tiene una espectacular pelea en Sha Po Lang de 2005. Esa cinta significó un empuje en su carrera, aunque también lo encasilló en papeles de villano secundario con pocos diálogos. Debido a que su conocimiento del cantonés era limitado, las oportunidades de papeles más grandes en Hong Kong no llegaron durante varios años.
A pesar de las lesiones, de sus dificultades para hacer la transición del mandarín al cantonés y otros obstáculos, Wu Jing siguió esforzándose para colocarse en el cine de acción de su país. Luego de un rol protagónico en la secuela espiritual de Sha Po Lang (SPL2: A Time for Consequences junto a Dominic Sessa), Jing dirige Wolf Warrior, una cinta de acción militar coprotagonizada por Scott Adkins. No era un clásic, pero sentó las bases para lo que ahora es su mayor éxito, una secuela que ve a su personaje viajar a África para enfrentar a un grupo de mercenarios desalmados y proteger a ciudadanos chinos en aquel continente. La cinta no es tímida al mostrar la idea de un héroe de acción chino que puede acabar con rivales de cualquier parte del mundo. El gobierno de su país no titubeó en inflarse de orgullo por dicho ángulo, sin embargo, el reconocimiento debe ser para el actor y director que logró crear una aventura de acción que cautivó al público. A pesar de lo cansado que puede estar el género, Wu Jing le ha dado un empujón necesario. Veremos qué depara el futuro para alguien que llevaba años a la espera de que el mundo lo notara. Godspeed Wu Jing, que nos brindes más patadas y golpes en la pantalla grande.
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A pesar de las lesiones, de sus dificultades para hacer la transición del mandarín al cantonés y otros obstáculos, Wu Jing siguió esforzándose para colocarse en el cine de acción de su país. Luego de un rol protagónico en la secuela espiritual de Sha Po Lang (SPL2: A Time for Consequences junto a Dominic Sessa), Jing dirige Wolf Warrior, una cinta de acción militar coprotagonizada por Scott Adkins. No era un clásic, pero sentó las bases para lo que ahora es su mayor éxito, una secuela que ve a su personaje viajar a África para enfrentar a un grupo de mercenarios desalmados y proteger a ciudadanos chinos en aquel continente. La cinta no es tímida al mostrar la idea de un héroe de acción chino que puede acabar con rivales de cualquier parte del mundo. El gobierno de su país no titubeó en inflarse de orgullo por dicho ángulo, sin embargo, el reconocimiento debe ser para el actor y director que logró crear una aventura de acción que cautivó al público. A pesar de lo cansado que puede estar el género, Wu Jing le ha dado un empujón necesario. Veremos qué depara el futuro para alguien que llevaba años a la espera de que el mundo lo notara. Godspeed Wu Jing, que nos brindes más patadas y golpes en la pantalla grande.
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