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viernes diciembre 6, 2024 
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Ataviado con una camisa a cuadros, bañada en sudor gracias al clima veraniego de Tijuana, Carlos Reygadas, se encuentra sentado en una banca pegada a un barandal dentro del Hub Station, en la Avenida Revolución. Su Master Class ha terminado y se dispone a pasar un rato con sus alumnos quienes lo rodean, le ofrecen un vaso de cerveza y dice con una sonrisa: “¡Qué sofocado está el clima!”
Y tiene razón. El edificio donde nos encontramos concentra un calor fuerte y sofocante. Sus vitrales han convertido al lugar en un contenedor de calor, pero con un ambiente muy agradable. Un día antes Reygadas tuvo un ligero malestar ocasionado por la ingesta de unos mariscos, que lo mantuvo recluido en su habitación una vez terminada su primera clase dentro del llamado Observatorio: Taller Intensivo de Realización Cinematográfica.
Teniendo en cuenta eso y la imagen que algunos nos hemos formado de Reygadas a través de su cine (“denso, provocador y de porte muy serio”), el galardonado cineasta, de 44 años, debería haberse retirado y cancelado la reunión. En lugar de eso, se relaja, e incluso aprovecha el momento para jugar retas en una destartalada mesa de futbolito. Más tarde, en una esquina del establecimiento, armado sólo con un refrescante vaso de agua, Reygadas se dispone a platicar con nosotros de su experiencia al haber sido parte del mencionado taller, organizado por la casa productora tijuanense Specola.
¿Por qué decidiste formar parte de este proyecto?
Simplemente porque comparto la filosofía y el espíritu que han creado estos jóvenes, pues lo que están haciendo con el taller es algo muy necesario, y quien hace las cosas así de bien, con esta visión a contra corriente, sin duda logra trasmitirte las ganas de apoyar con todo lo que esté a tu alcance.
Al ser un cineasta totalmente autodidacta, ¿qué tan importante es para ti la formación académica, en todo aquel interesado en hacer cine o bien cualquier otra variante artística?
No puedo decir que en términos generales esto sea bueno o malo, todo esto depende de una educación o una experiencia de vida que cada persona esté buscando, es común que para cierto tipo de gente la escuela puede ser atrofiante e innecesaria y para otros puede ser floreciente y esclarecedora. Por ello yo creo que depende de cada quien, pues no deja de ser un viaje personal del que no se puede hablar en términos generales.
En los últimos años han debutado bastantes cineastas jóvenes, surgidos de distintas escuelas de cine, ¿se ha notado alguna especie de tendencia en cuanto a la producción de cine nacional?
Afortunadamente, lo que sigue dominando es la diversidad, y yo estoy convencido de que la diversidad es la clave de la riqueza. Me encanta que existan cineastas buenos surgidos de escuelas, siempre y cuando también estén surgiendo unos cuantos autodidactas. Creo que el lugar de donde viene la gente debe de ser algo secundario, pues lo que importa son los proyectos que plantean y cómo se logran.
Eres uno de los cineastas más reconocidos a nivel internacional, en ese sentido, ¿cómo percibes el estado actual del cine mexicano a nivel local e internacional?
Considero que estamos bien, somos más respetados de lo que es el país en términos generales, pero podríamos estar mejor, y para eso tenemos que seguir trabajando, en México lo más fuerte que se puede tener es precisamente una gran política cultural como señas de identidad, por ello le debemos dar más importancia a esta área, que es uno de nuestros principales activos.
¿Como ves el negocio del cine hoy en día? ¿Realmente es redituable para alguien dedicarse a hacer cine en nuestro país o es mejor prepararse aquí y emigrar a otras partes del mundo?
¡Nombre!, para nada. Yo estoy convencido de que a la gente le puede ir muy bien aquí, pues si alguien sabe hacer su trabajo y además es apasionado de lo que hace, la parte económica viene llegando sola, e incluso con un poco de suerte la gente puede hacerse rica en este medio, si ese fuese el caso. Aquí lo importante es hacer bien lo que a uno le gusta hacer y todo lo demás llega por añadidura.
¿Cuáles consideras son las herramientas más útiles y relevantes para que el cine mexicano encuentre un camino entre el cine de calidad y el éxito comercial?
No sé si exista una clave, pero sé que tenemos que seguir produciendo. Siempre existirán cineastas que conecten con muy poco público, cineastas hipercomerciales y también hay cineastas en un terreno medio. No obstante, yo creo que si seguimos realizando películas todo irá encontrando su lugar. Aquí lo importante no es pensar en cómo colocar las cosas, sino en cómo producir, nunca nada va estar de más y las cosas solitas van a ir encontrando su lugar en el gusto del público. De hecho,así es como funcionan las cosas en países como Francia o como Estados Unidos, por ponerte un ejemplo.
Sobre el tema de la tecnología y medios digitales, donde hoy en día hay chicos que suben directamente sus producciones en línea, ¿qué opinas de esto? ¿Es una alternativa legítima, no sólo como negocio, sino también para llegar al público?
Por supuesto que sí. Mira, todo lo que tenga calidad termina encontrando un espacio, creo que no hay que preocuparse tanto en ese aspecto, por lo menos yo en mi posición como cineasta, considero que si se hace el trabajo con honestidad y talento, a la larga ese trabajo que realizaste debe de llegar a donde debe de llegar sin importar el medio, ya sea por Internet, cine, video e incluso por medio de la piratería, lo importante es darle curso a las cosas.
Finalmente, Carlos y para despedir esta charla, ¿tienes algún proyecto en puerta?
Sólo te puedo decir que ya estoy preparando un largometraje para finales del año entrante.
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Cuauhtémoc Ruelas es crítico de cine y conductor desde hace 8 años para distintos medios de comunicación en la ciudad de Tijuana. Con un diplomado en periodismo cultural, es fanático del cine nacional, drama y cine de acción. Puedes seguirlo a través de @esquinadelcine y el canal de YouTube ElCinematicoTv.
Y tiene razón. El edificio donde nos encontramos concentra un calor fuerte y sofocante. Sus vitrales han convertido al lugar en un contenedor de calor, pero con un ambiente muy agradable. Un día antes Reygadas tuvo un ligero malestar ocasionado por la ingesta de unos mariscos, que lo mantuvo recluido en su habitación una vez terminada su primera clase dentro del llamado Observatorio: Taller Intensivo de Realización Cinematográfica.
Teniendo en cuenta eso y la imagen que algunos nos hemos formado de Reygadas a través de su cine (“denso, provocador y de porte muy serio”), el galardonado cineasta, de 44 años, debería haberse retirado y cancelado la reunión. En lugar de eso, se relaja, e incluso aprovecha el momento para jugar retas en una destartalada mesa de futbolito. Más tarde, en una esquina del establecimiento, armado sólo con un refrescante vaso de agua, Reygadas se dispone a platicar con nosotros de su experiencia al haber sido parte del mencionado taller, organizado por la casa productora tijuanense Specola.
¿Por qué decidiste formar parte de este proyecto?
Simplemente porque comparto la filosofía y el espíritu que han creado estos jóvenes, pues lo que están haciendo con el taller es algo muy necesario, y quien hace las cosas así de bien, con esta visión a contra corriente, sin duda logra trasmitirte las ganas de apoyar con todo lo que esté a tu alcance.
Al ser un cineasta totalmente autodidacta, ¿qué tan importante es para ti la formación académica, en todo aquel interesado en hacer cine o bien cualquier otra variante artística?
No puedo decir que en términos generales esto sea bueno o malo, todo esto depende de una educación o una experiencia de vida que cada persona esté buscando, es común que para cierto tipo de gente la escuela puede ser atrofiante e innecesaria y para otros puede ser floreciente y esclarecedora. Por ello yo creo que depende de cada quien, pues no deja de ser un viaje personal del que no se puede hablar en términos generales.
En los últimos años han debutado bastantes cineastas jóvenes, surgidos de distintas escuelas de cine, ¿se ha notado alguna especie de tendencia en cuanto a la producción de cine nacional?
Afortunadamente, lo que sigue dominando es la diversidad, y yo estoy convencido de que la diversidad es la clave de la riqueza. Me encanta que existan cineastas buenos surgidos de escuelas, siempre y cuando también estén surgiendo unos cuantos autodidactas. Creo que el lugar de donde viene la gente debe de ser algo secundario, pues lo que importa son los proyectos que plantean y cómo se logran.
Eres uno de los cineastas más reconocidos a nivel internacional, en ese sentido, ¿cómo percibes el estado actual del cine mexicano a nivel local e internacional?
Considero que estamos bien, somos más respetados de lo que es el país en términos generales, pero podríamos estar mejor, y para eso tenemos que seguir trabajando, en México lo más fuerte que se puede tener es precisamente una gran política cultural como señas de identidad, por ello le debemos dar más importancia a esta área, que es uno de nuestros principales activos.
¿Como ves el negocio del cine hoy en día? ¿Realmente es redituable para alguien dedicarse a hacer cine en nuestro país o es mejor prepararse aquí y emigrar a otras partes del mundo?
¡Nombre!, para nada. Yo estoy convencido de que a la gente le puede ir muy bien aquí, pues si alguien sabe hacer su trabajo y además es apasionado de lo que hace, la parte económica viene llegando sola, e incluso con un poco de suerte la gente puede hacerse rica en este medio, si ese fuese el caso. Aquí lo importante es hacer bien lo que a uno le gusta hacer y todo lo demás llega por añadidura.
¿Cuáles consideras son las herramientas más útiles y relevantes para que el cine mexicano encuentre un camino entre el cine de calidad y el éxito comercial?
No sé si exista una clave, pero sé que tenemos que seguir produciendo. Siempre existirán cineastas que conecten con muy poco público, cineastas hipercomerciales y también hay cineastas en un terreno medio. No obstante, yo creo que si seguimos realizando películas todo irá encontrando su lugar. Aquí lo importante no es pensar en cómo colocar las cosas, sino en cómo producir, nunca nada va estar de más y las cosas solitas van a ir encontrando su lugar en el gusto del público. De hecho,así es como funcionan las cosas en países como Francia o como Estados Unidos, por ponerte un ejemplo.
Sobre el tema de la tecnología y medios digitales, donde hoy en día hay chicos que suben directamente sus producciones en línea, ¿qué opinas de esto? ¿Es una alternativa legítima, no sólo como negocio, sino también para llegar al público?
Por supuesto que sí. Mira, todo lo que tenga calidad termina encontrando un espacio, creo que no hay que preocuparse tanto en ese aspecto, por lo menos yo en mi posición como cineasta, considero que si se hace el trabajo con honestidad y talento, a la larga ese trabajo que realizaste debe de llegar a donde debe de llegar sin importar el medio, ya sea por Internet, cine, video e incluso por medio de la piratería, lo importante es darle curso a las cosas.
Finalmente, Carlos y para despedir esta charla, ¿tienes algún proyecto en puerta?
Sólo te puedo decir que ya estoy preparando un largometraje para finales del año entrante.
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Cuauhtémoc Ruelas es crítico de cine y conductor desde hace 8 años para distintos medios de comunicación en la ciudad de Tijuana. Con un diplomado en periodismo cultural, es fanático del cine nacional, drama y cine de acción. Puedes seguirlo a través de @esquinadelcine y el canal de YouTube ElCinematicoTv.