El equipo de Tomatazos tuvo la oportunidad de platicar con Rafael Altamira, director de la cinta, Cuando ya no estés aquí, un thriller psicológico que fue filmado en Guadalajara durante la pandemia. Cuando ya no estés aquí se centra en, James un talentoso arquitecto que está punto de alcanzar el éxito económico de sus sueños. Su vida da un giro inesperado cuando su amada esposa Sylvia es secuestrada y ejecutada por sus captores. James comienza a ser atormentado por el fantasma de su esposa, enfrenta amenazas de chantaje en el trabajo y está bajo investigación de la policía por el asesinato de su esposa.

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Comenzamos preguntándole al director cómo fue que decidió que esta película tenía que ser ópera prima. Él nos platicó la influencia que han tenido en su vida y su carrera los thrillers psicológicos y de pasó confesó su admiración por grandes maestros de este género como Alan Sabbagh y [Director] Martin Scorsese.

Yo siempre he sido muy fan del thriller psicológico como género. Son las películas que yo desde niño veía, con las que he crecido y he disfrutado muchísimo. Me encanta el cine de David Fincher, de Martin Scorcesse, las de Guillermo del Toro. Es el cine que realmente te mantiene al borde del asiento y te hace pensar durante toda la película y empiezas a formular tus teorías y todo, pero hasta que no llegas al final es que entiendes todo lo que está pasando. Ese cine para mí es el cine que siempre he querido hacer. Esa experiencia que a mí esos cineastas me dieron, yo la quería regresar a la audiencia el día que yo tuviera la oportunidad de dirigir una película.



El cineasta también se encargó de la escritura del guion de y nos detalló que la idea nació durante una clase de la universidad, en ese momento supo que quería filmar dicha idea. Posteriormente escribió toda la película en tiempo record, sólo le tomó 15 días y quedó muy contentó cuando leyó el resultado.

El proceso de escritura fue curioso. Cuando yo estaba estudiando la universidad dentro de una clase teníamos una hora para desarrollar una idea que podía ser un largometraje. En esa hora yo me puse a escribir lo que eventualmente sería When You are gone (Cuando ya no estés aquí), ya después de la clase e acuerdo que lo leí y me dije a mí mismo, esta es un historia que a mí me gustaría llevar a la pantalla. Varios años después ya cuando había terminado la carrera, me senté a escribir el guion y me taré 15 días, en dos semanas escribí el guion así tal cual y me gustó mucho el resultado.

Una vez que el Altamira terminó de escribir el guion, intentó obtener financiamiento en el Festival de Sundance, con empresarios, entre otras vías de financiamiento, ya que se desde el principio era un proyecto ambicioso, en inglés y con actores estadounidenses. El director nos contó que no fue fácil conseguir el dinero para filmar su película.

La intenté levantar en Sundance, esto te estoy hablando que fue en el año 2015, pero como es un proyecto en inglés, actores estadunidenses, era un poquito ambicioso la verdad y requería mucha inversión por muchas razones. Estuve cazando el dinero con product placement, con empresarios, pero simplemente no se dio la oportunidad en aquel momento en el 2015. Lo tuve que dejar de lado por un momento, porque como todos, me tuve que dedicar a hacer lo que nos da de comer aunque no sea lo que queremos.

Después de dejar en pausa el sueño de realizar esta película, el cineasta reveló que durante la pandemia volvió a retomar sus planes y sobre todo, durante el confinamiento se cuestionó a sí mismo acerca de lo que quería hacer. Finalmente llegó a la conclusión de que debía darse el mismo la oportunidad para filmar su ópera prima.

En un abrir y cerrar de ojos pasaron cinco años y durante la pandemia que nos frenó en seco a todos y nos cambió nuestra manera de vida, me quedé sin trabajo igual que todos los demás. Con la depresión en el encierro me cayó una pequeña epifanía en la que me dije ''el negocio está padre, pero tú querías hacer cine, ¿por qué no los estás haciendo, que te está deteniendo?’’ me dije a mí mismo: ''nadie te va a dar esa oportunidad, ¿por qué no me la doy yo mismo?''. Entonces aprovechando la pandemia que no tenía chamba ni nada en que ocuparme, dije bueno, ‘’pues si no es ahora, no es nunca’’, entonces pre-produje la película y la grabamos en agosto-septiembre del 2020, justo en la mera pandemia.

Cuestionamos al director acerca de las dificultades acerca de haber hecho una película durante la pandemia. Él nos relató que por un lado hubo desventajas, sobre todo, en la parte financiera, pero por otra parte también benefició la logística en la grabación de algunas escenas.

Tuvo sus buenas y sus malas como todo. Yo creo que lo más difícil fue conseguir patrocinios de apoyos, porque obviamente durante la pandemia nadie estaba gastando dinero, mucho menos en proyectos creativos como lo es una película. Entonces para conseguir apoyos o mesas de catering o alguna locación nos la vimos un poquito difícil. A la vez también tuvimos nuestras ventajas, una de las locaciones que tuvimos aquí en Guadalajara fue Plaza Andares, un centro comercial muy hermoso, muy cosmopolita, pero también tiene mucha afluencia de gente y la verdad es que como estaba la pandemia y como estaban operando a medias no había tanto tráfico de gente y eso para una producción independiente nos dio ventajas, como por ejemplo controlar que la gente no se metiera en el cuadro.

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Altamira tiene 32 años, una edad con la que pocos directores pueden presumir ya haber filmado su primera película. No obstante, le pedimos al cineasta que nos hablara acerca de los retos que implica ser tan joven en la industria cinematográfica.

Sí, definitivamente lo más difícil es que crean en ti y en la visión porque pues a fin de cuentas el cine es algo completamente intangible hasta que ya lo grabaste, ya lo ejecutaste y antes de eso es solo palabras bonitas, discursos bonitos e inspiradores. A veces es muy difícil que te tomen en serio cuando estás joven.

El director nos compartió una historia muy personal a la que se enfrentó en el pasado mientras buscaba financiamiento para su película, en la que un productor estadounidense le aseguró que nunca iba a dirigir esta cinta con el argumento de que no era reconocido en la industria, en su momento, esta persona le aconsejó vender el guion si es que quería ver algún día su película en pantalla.

Por ahí del 2016, cuando todavía estaba consiguiendo financiamiento logré contactarme con un productor de Estados Unidos, que hacia películas independientes de allá, que digo, una película independiente de allá son cuatro, cinco millones de dólares. Le mandé el guion y me dice ''oye puedo ser honesto contigo'' y le dije ''sí, por su puesto, dime''. Y me dice, ''la verdad es que tú nunca vas a hacer esa película'', entonces yo le contesté ''es válido, me puedes dar una razón por qué'' y me contesta, ''es que tú eres nadie y nadie la va dar dinero a un desconocido como tú para hacer una película así de ambiciosa. Si quieres que se haga vende el guion, el guion está muy vendible, véndeselo a alguien y en un par de años vas a ver la película hecha pero tú no la vas a dirigir'', dije bueno tiene muy buen punto así es como funciona el mundo y si no tengo una trayectoria comprobable por qué alguien soltaría tanto dinero para un proyecto nada más porque yo digo que va a estar muy bueno.

A pesar de las predicciones que le hizo aquel productor y las dificultades que enfrentó durante el camino, Altamira nunca abandonó su sueño y siguió luchando un par de años más para realizar su película que acaba de estrenar en salas comerciales de nuestro país. No solo eso, When You are gone (Cuando ya no estés aquí), obtuvo reconocimientos de cine internacionales en festivales como el Roma Short Film Festival y los New York International Film Awards. El director concluyo la entrevista explicando cómo fue que finalmente produjo su sueño y lo orgulloso que esta del resultado de esta película.

El financiamiento siempre fue la parte más difícil, pero yo me dedico a la producción audiovisual como tal, tengo una pequeña casa de renta, cámara, luces, accesorios, todo el rollo y fíjate que eso ya lo había empezado hace cinco años pero era algo muy pequeño. Ahorita ya somos una empresa medianita, pero por lo menos tenemos el suficiente equipo, la película fue grabada con todo mi equipo sin que yo le tuviera que rentar o pedir a nadie. Entonces eso definitivamente fue una gran ventaja que me permitió hacerla de la calidad con la cual la película está hecha y sin tener que gastar tanto dinero, todo lo demás fueron patrocinios y de ahorros, y otros gastos los solventé de dinero que no tenía porque creo mucho en este proyecto. Hice una película de la cual estoy muy orgulloso y eso nadie me lo quita.


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