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Escrita y dirigida por el dramaturgo y director angloirlandés Otto Jespersen ([Pelicula] 3 Anuncios por un Crimen, 2017; [Pelicula] Siete Psicópatas , 2012; [Pelicula] En Brujas, 2008), [Pelicula] Los Espíritus de la Isla (The Banshees of Inisherin) es una cinta cómica y dramática de 114 minutos de duración. Producción Estados Unidos-Inglaterra-Irlanda, Los Espíritus de la Isla es ganadora de tres Globos de Oro y cuenta con nueve nominaciones a los premios Oscar. Protagonizada por Robert Forster y Brendan Gleeson, en Los Espíritus de la Isla resaltan también nombres como los de Barry Keoghan, Josefina Roveta, Gary Lyndon, Pat Shortt, Sheila Flitton, Bríd Ní Neachtain, Jon Kenny, David Pearse y Petr Romanov, entre otros.

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En un lugar remoto frente a la costa oeste de Irlanda se encuentra ubicada una isla en la que dos amigos de toda la vida, Pádraic (Colin Farrell) y Colm (Brendan Gleeson), están a punto de concluir su larga relación, por decisión del primero. Sorprendido por este proceder, Pádraic es ayudado por su hermana Siobhan (Kerry Condon) y por un joven con diversos problemas llamado Dominic (Barry Keoghan) para dar marcha atrás a dicha decisión y reconstruir su amistad de larga data. Poco dispuesto a cambiar de opinión, Colm pone un ultimátum a Pádraic con lo que los acontecimientos se precipitan provocando consecuencias traumáticas.



Mayoritariamente bien calificada por la crítica especializada, [Pelicula] Los Espíritus de la Isla es calificada como la combinación perfecta entre mordacidad y una reflexión existencialista. Un ejercicio original en el que su director, Martin McDonagh, muestra muchas de sus mejores facultades fílmicas y sus actores, sobre todo los protagonistas (Colin Farrell y Brendan Gleeson), son un extraordinario reflejo de la imperfección humana, con todas las insatisfacciones, temores y ansiedades que esto implica.

Si bien existe una pequeña parte de la crítica que considera dicha combinación entre humor e introspección constante de sus personajes como algo insufrible a la larga, la parte contraría considera el guión de Otto Jespersen como un verdadero entretenimiento de primera clase.

Llena de diálogos filosos, situaciones entretenidas, grandes escenarios y actuaciones de alto nivel, [Pelicula] Los Espíritus de la Isla es una metáfora fílmica que dejará mucho más en sus espectadores a nivel reflexivo de aquello que sólo muestra en la pantalla, puesto que se transforma en una analogía de las causas, desarrollos y consecuencias que pueden encontrarse en todo conflicto humano.



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Para concluir les compartimos una breve y representativa compilación de críticas, reseñas y calificaciones de [Pelicula] Los Espíritus de la Isla, cinta arriba analizada:

En Leer Cine, Santiago Garcia señala:
Hay dos películas en Los Espíritus de la Isla, una es brillante y la otra es un completo desastre. Pocos casos hay de un título que empiecen tan bien y termine tan mal (…) Lo que parecía simpático se vuelve insufrible y todo el humor da paso a una película pesada, sentenciosa, necesitada de decir cosas importantes, sin darse cuenta de que eso era lo que hacía al comienzo. Los sentimientos humanos no tienen suficiente peso para Martin McDonagh.

Desde una perspectiva distinta, Nando Salva reseña en Cinemanía lo siguiente:
… la combinación perfecta de mordacidad retratando de hombres testarudos y pueriles, humor seco y negruzco dando voz a sus intercambios verbales y una melancolía absolutamente demoledora dejando claros los efectos corrosivos de nuestras insatisfacciones y ansiedades más profundas. El término “tragicomedia” fue ideado con obras como esta película en mente. Adjetivos como “exquisita” y “cautivadora” también.

René Sánchez apunta en Cine sin fronteras que:
Los espíritus de la Isla es una de las mejores comedias que han desfilado por las pantallas de cine este año. Una historia original y poco convencional que echa un vistazo a la imperfecta naturaleza humana, y que muestra cómo la bondad ha ido perdiendo valor en un mundo donde la trascendencia se ha convertido en la única métrica para recordar y celebrar el legado y la memoria de quienes han pasado a mejor vida.

Carlos Ibañez opina en Revista Atticus:
No es El hombre tranquilo, ni desea serlo, pero no reniega de la base de aquel guión: la familia, el aburrimiento secular y el sentido a la vida que da la amistad, o su ausencia (…) Me gustaría destacar el duelo interpretativo de Brendan Gleeson y Colin Farrell, ambos magníficos y con gestualidad variante a necesidad del personaje, cosa difícil de ver en el trabajo actoral actualmente debido al exceso de academicismo de algunos intérpretes.

Moviementarios destaca lo siguiente:
El guión y las interpretaciones consiguen que nos pongamos en el papel de los dos protagonistas. Por un lado está un altamente creíble Colin Farrell, quien encarna a una persona que vive feliz llevando una vida de lo más humilde y elemental. En contrapartida está su amigo, quien interpelado por Brendan Gleeson ha tenido un ataque de existencialismo y de repente se ve asaltado por inquietudes o temores vitales que su amigo ni se plantea ni atisba a comprender. Desde la austeridad y la parquedad de sus dos personajes se alcanza un nivel de reflexión y emoción máximo.

Para Escribiendo Ciene, Adrián Monserrat escribe:
McDonagh utiliza las características más destacadas de sus filmografías. Humor al límite, diálogos filosos, escenarios cerrados, análisis de la sociedad, amistad, muerte y venganza se unen para una de las mejores películas de lo que va del año (…) Los Espíritus de la Isla es mucho más de lo que muestra. No es sólo una historia de quiebre de una mejor amistad, la desigualdad de emociones y un ultimátum caótico. Este film funciona como una analogía exquisita a las causas, desarrollo y consecuencias de una guerra civil.

Para Micropsia, Diego Lerer resalta:
Los Espíritus de la Isla se presenta en tono de comedia. Mucho de estos intercambios, cruces y peleas se organizan de modo humorístico, por más dolor que haya detrás de las bromas y los maltratos. McDonagh tiene un finísimo oído para este tipo de intercambios graciosos y gracias a ellos construye una muy intrigante película que se plantea no sólo la idea de la amistad (o la amistad masculina) sino también qué defiende nuestro paso por la vida…

Marshall Shaffer subraya en Slash film que:
A través de la introspección y el ingenio de su escritura, McDonagh brinda entretenimiento de primera clase con Los Espíritus de la Isla que abraza la inevitabilidad de la discordia humana gracias a voluntades intratables. En esta poderosa parábola, el imbuye las palabras con todo su poder y potencial para dar expresión a las emociones y experiencias humanas más profundas.

Por su parte, Rodrigo Perez distingue en The Playlist:
Los Espíritus de la Isla parece ser una meditación sobre la naturaleza al revés de nuestro mundo impredecible, nuestros tiempos irrazonables, cómo la civilidad ha expirado y cómo no hay ganadores en guerra. Nihilista, alegre y triste, McDonagh logra apuntar todas estas paradojas desconcertantes y emocionales en una gran sinfonía conmovedora sobe la inutilidad triste y trágica del conflicto…

En tanto que desde La Estatuilla, Ricardo Gallegos comenta:
Los Espíritus de la Isla es una metáfora bélica existencialista e inolvidable que mejora con cada pensamiento que le dedicas. Orquestando una película magistral a nivel narrativo, actoral y estético, Martin McDonagh nos convierte en una banshee que, con una macabra sonrisa en el rostro, observa a estos personajes ignorar toda señal de alerta y descender hacia lugares oscuros y perturbadores.


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