Cuando se trata de una adaptación, hay dos vías muy específicas que se pueden tomar: la de la fidelidad hasta llegar a copiar página por página una historia, o la de hacer todo lo contrario al interpretar un texto y hacer que el material original sea parte de la decoración. A veces hacer todo al pie de la letra puede generar comentarios negativos, un sin número de críticas sobre cómo una obra es una copia, pero a veces imitar muchas cosas se puede transformar en más arte, si es que sabes cómo hacerlo.
No te lo pierdas: Los villanos más memorables del cine en el siglo XXI
Sin Lugar Para los Débiles, de los hermanos Ethan Coen y Joel Coen, nace como la adaptación de la novela homónima de [Escritor] Cormac McCarthy de 2005, y llega a cines dos años después para causar revuelo entre los fans del cine. Le fue tan bien a la película que incluso ganó varios premios Óscar, incluyendo Mejor Película y Mejor Dirección, y le dio ese impulso en el mercado internacional a Javier Bardem en su carrera como actor con un premio en la categoría de Mejor Actor de reparto gracias a su actuación en el papel de Anton Chigurh.
Pero esta película, un western sombrío con temas que van desde la violencia hasta el envejecimiento, recrea casi al pie de la letra el texto, solo que, para mayor grandeza de la obra, de alguna manera consigue ampliar la historia que presenta el libro de forma que se siente novedosa incluso para el que sabe que los creadores no se están distanciando de manera drástica de la fuente en ningún momento. Por eso, esta adaptación logra ser un vivo ejemplo de una adaptación que se convierte en una forma de arte propia.
La historia sigue principalmente a estos tres personajes: un veterano de la Guerra de Vietnam que encuentra una gran suma de dinero en el desierto, llamado Llewellyn Moss (Josh Brolin), un asesino a sueldo llamado Anton Chigurh cuya tarea es recuperar el dinero (Bardem) y un alguacil local llamado Ed Tom Bell (Tommy Lee Jones) que investiga el crimen. Aunque el filme se centra en el trío antes mencionado, también aparecen otros personajes, destacando el de Woody Harrelson, quien interpreta a un cazador de recompensas que busca a Moss para regresar el dinero.
Te recomendamos: Los mejores westerns del siglo XXI según la crítica
Fue un éxito rotundo en cada aspecto. Primero, debutó en el Festival de Cine de Cannes en su edición de 2007, donde ya empezó a ganarse los buenos comentarios de la crítica. Tanto el guión como la dirección de los Coen recibieron muchos elogios y la actuación de Bardem acaparó la atención de todos. Este actor conquistó muchos festivales de cine y la temporada de premios al llevarse muchos reconocimientos por su papel. De igual forma los Coen brillaron en aspectos que posteriormente los llevaron a triunfar en los Óscar.
El personaje de Anton Chigurh fue uno de los elementos que más llamó la atención de la crítica y por esa razón es que su nombre, y el de Bardem, son mencionados con frecuencia en las reseñas. Para muchos, con esta cinta los hermanos regresaban a su mejor forma, con una ejecución desafiante que está llena de momentos violentos y tensión. Detalles que también han sido mencionados de manera positiva son la comedia oscura, que aparece en los momentos perfectos para aliviar al espectador, y su tono medio entre el suspenso y el terror que le permiten siempre mantenerse interesante sin agobiar.
A continuación, recordaremos lo que dijo la crítica sobre la galardonada película de los Coen que llegó a cines en 2007:
Joe Sommerland de Independent (UK):
Los hermanos Coen están de vuelta con un regreso triunfal a su forma.
Liz Hoggard de London Evening Standard:
La falta de respeto por el cuerpo, las puras secuelas sangrientas me deprimen. Sí, pueden manejar el asesinato con brío y tensión irónica, pero esta es una película de los hermanos Coen que ha llegado demasiado lejos.
Tom Charity de CNN.com:
Interpretado por el actor español Javier Bardem, Chigurh es el hombre del saco más original que ha ensangrentado la pantalla en mucho tiempo.
Keith Garlington de Keith & the Movies:
La violencia es sorprendente, el ritmo es perfecto y hay la cantidad justa de comedia oscura. Te estremecerás en una escena y te reirás a carcajadas en la siguiente.
Mike Massie de Gone with the Twins:
Implacable en el método, desafiante en la presentación e inolvidable en la ejecución.
David Stratton de At The Movies (Australia):
Esta magnífica película representa el mejor trabajo que han hecho los hermanos Coen desde Fargo. Al igual que ese clásico, este es un thriller de sangre fría con un toque de humor negro.
Deborah Ross de The Spectator:
No es una película que pide gustar o disgustar. Simplemente es, marcándose a sí mismo sobre ti como un hierro al rojo vivo.
Kevin Maher de Little White Lies:
Justo cuando la película comienza a ajustarse a las expectativas del género (como El tesoro de la Sierra Madre se encuentra con Fargo), los Coen tienen las agallas, y de hecho la inteligencia, para llevarla en una dirección completamente diferente.
JM Tyree de Sight & Sound:
Sin lugar para los débiles es un thriller de tono perfecto que ofrece el miedo y el suspenso placenteros que se esperan del género, incluso cuando envía sus convenciones a la trituradora.
Bob Mondello de NPR.org:
Para una película que trafica con una maldad implacable, esta película permanece notablemente arraigada en lo cotidiano.
Sukhdev Sandhu de Daily Telegraph (UK):
¿Es una obra maestra? Ni siquiera cerca.
Christopher Orr de The New Republic:
La feroz historia de McCarthy les da a los Coen espacio para dar rienda suelta a sus dones cinematográficos, pero evita que se alejen demasiado y se pierdan en los pantanos de la destreza técnica o la ironía fácil.
Adam Kempenaar de Filmspotting:
Chigurh de Javier Bardem es la encarnación de la exasperación del Sheriff Bell, una figura mitológica parecida a la Parca cuya existencia hace que el orden y la civilidad sean inverosímiles.
Peter Bradshaw de Guardian:
Ver esta película tiene algo de la emoción elemental de ver la sombra de una nube extenderse con velocidad milagrosa sobre un paisaje vasto y vacío: tiene una intuición fría y portentosa de lo que es Estados Unidos.
Continúa leyendo: Psiquiatras eligieron a Javier Bardem en Sin Lugar Para los Débiles como el psicópata más realista del cine