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viernes diciembre 6, 2024 
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Además de entretener, las películas tienen otras virtudes para el público, por ejemplo, ayudar a aquellas personas que están pasando por un momento complicado en sus vidas. Si bien el cine es un medio para escapar por un momento de la cotidianeidad, las personas que enfrentar crisis emocionales pueden encontrar en él una verdadera ayuda para lidiar con sus problemas de apego.
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Una nueva investigación (vía Medicalxpress) sugiere que las personas con problemas de apego son más propensas que otras a tomar parte de las películas que observan, identificarse con los personajes y reflexionar sobre qué harían si estuvieran en las mismas situaciones. Nathan Silver, autor principal del estudio de la Universidad Estatal de Ohio, dijo a partir de los resultados que las películas ofrecen un “espacio seguro” para que algunas personas traten sus problemas afectivos.
En este estudio también participó el profesor Michael Slater de la misma universidad, mientras que los resultados fueron publicados en la versión en línea de la revista Journal of Social and Personal Relationships. El objetivo de esta investigación en la que participaron 1039 estadounidenses adultos en línea, era ver cómo las personas se enfrentaban a las inseguridades en cuanto a la forma en la que interactuaban con las películas y los programas de televisión que veían.
Los profesores examinaron dos dimensiones del apego en las relaciones románticas: la ansiedad y el evitar cualquier tipo de acercamiento emocional de sus parejas. Los que resultaron con un alto índice de ansiedad necesitan la seguridad constante de que sus parejas se preocupen por ellos.
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Los participantes también contestaron varios cuestionarios para saber cómo interactuaban con las películas o programas que ven. Los resultados mostraron que las personas que evitaban un contacto emocional estaban menos comprometidas con las historias que veían y no conectaban con los personajes, mientras que aquellos con un nivel alto de ansiedad se mostraron comprometidos con las historias. Pero los que resultaron más interesantes, fueron aquellos cuyo nivel de evasión y ansiedad resultaron alto, al respecto, Nathan Silver detalló:
En cuanto a aquellos que obtuvieron una puntuación alta en un apego que evitaba la ansiedad, participaban en las historias de diversas maneras, por ejemplo, era probable que dijesen que fueron “absorbidos” o “transportados” a la historia; esas historias les ayudaron a entender a personas que no conocían, que imaginaban lo que le sucedería a los personajes si tomaban decisiones diferentes, y les gustaba imaginar que conocían personalmente a sus personajes favoritas. Silver continúa:
Por su parte, Slater dijo que las personas con problemas de apego a menudo pierden la oportunidad de disfrutar algunas experiencias de vida. El profesor también señaló que no se sabe si esta vida indirecta ayuda a las personas en la vida real o no. Finalmente, Silver indicó que el apego no es necesariamente el determinante más importante del por qué las personas se involucran con los programas de televisión o las películas.
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Una nueva investigación (vía Medicalxpress) sugiere que las personas con problemas de apego son más propensas que otras a tomar parte de las películas que observan, identificarse con los personajes y reflexionar sobre qué harían si estuvieran en las mismas situaciones. Nathan Silver, autor principal del estudio de la Universidad Estatal de Ohio, dijo a partir de los resultados que las películas ofrecen un “espacio seguro” para que algunas personas traten sus problemas afectivos.
Para las personas con problemas de apego, las películas y los programas de televisión pueden ser una manera para que puedan tratar de entender sus problemas o de satisfacer indirectamente sus necesidades de intimidad que les resulte difícil en la vida real.
En este estudio también participó el profesor Michael Slater de la misma universidad, mientras que los resultados fueron publicados en la versión en línea de la revista Journal of Social and Personal Relationships. El objetivo de esta investigación en la que participaron 1039 estadounidenses adultos en línea, era ver cómo las personas se enfrentaban a las inseguridades en cuanto a la forma en la que interactuaban con las películas y los programas de televisión que veían.
Los profesores examinaron dos dimensiones del apego en las relaciones románticas: la ansiedad y el evitar cualquier tipo de acercamiento emocional de sus parejas. Los que resultaron con un alto índice de ansiedad necesitan la seguridad constante de que sus parejas se preocupen por ellos.
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Los participantes también contestaron varios cuestionarios para saber cómo interactuaban con las películas o programas que ven. Los resultados mostraron que las personas que evitaban un contacto emocional estaban menos comprometidas con las historias que veían y no conectaban con los personajes, mientras que aquellos con un nivel alto de ansiedad se mostraron comprometidos con las historias. Pero los que resultaron más interesantes, fueron aquellos cuyo nivel de evasión y ansiedad resultaron alto, al respecto, Nathan Silver detalló:
Estos son auto-saboteadores clásicos (…) Lo les proporciona el mundo de las historias es un lugar seguro para lidiar con esa ambivalencia. Por eso creo que están más involucrados en las historias.
En cuanto a aquellos que obtuvieron una puntuación alta en un apego que evitaba la ansiedad, participaban en las historias de diversas maneras, por ejemplo, era probable que dijesen que fueron “absorbidos” o “transportados” a la historia; esas historias les ayudaron a entender a personas que no conocían, que imaginaban lo que le sucedería a los personajes si tomaban decisiones diferentes, y les gustaba imaginar que conocían personalmente a sus personajes favoritas. Silver continúa:
Cuando ven sus programas favoritoas, las personas con problemas de apego pueden imaginar una relación sin los problemas de la vida real, como el romance de Jim y Pat en The Office. Si tomas la perspectiva de Jim, no tienes que estar preocupado por Pam. Puedes tener esa relación funcional como lo hacen el programa.
Por su parte, Slater dijo que las personas con problemas de apego a menudo pierden la oportunidad de disfrutar algunas experiencias de vida. El profesor también señaló que no se sabe si esta vida indirecta ayuda a las personas en la vida real o no. Finalmente, Silver indicó que el apego no es necesariamente el determinante más importante del por qué las personas se involucran con los programas de televisión o las películas.
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