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Cada año, un puñado de películas se quedan perdidas en el limbo de la distribución a pesar de haber tenido un buen recibimiento durante su estreno en festivales, más aún cuando la película entra en la categoría de cine “indie”, una denominación que cada vez se hace más difícil de definir, ese es el caso de [Pelicula] Sorry to Bother You, la ópera prima de [Director] Boots Riley que en 2018 fue elogiada por muchos críticos de cine como la mejor comedia del año y como “la película política más divertida en mucho tiempo”, sin embargo, la cinta tuvo muy poca resonancia más allá de Estados Unidos, como suele ocurrir con las películas “indies americanas”, ésta fue eclipsada por las superproducciones que cada fin de semana llegan a las salas de cine, pero también por el incuestionable regreso de [Director] Spike Lee al cine militante: [Pelicula] El Infiltrado del KKKlan ; ambas películas hablan de la explotación y el racismo, pero la de Riley va más lejos en sus ambiciones.

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En tono de sátira, con un humo que recuerda al absurdo de [Director] Spike Jonze, la película escarba en la corrección política y el capitalismo más salvaje para encauzar un entramado de incorreción política que representa una dura realidad como, por ejemplo, la explotación corporativa, el control de los monopolios, el racismo incrustado en todos los niveles, la gentrificación, entre otros temas dan forma a una de las comedias políticas más entretenidas. Por lo anterior, el guion ha sido considerado como uno de los más originales en la historia.

Sorry to Bother You nos sitúa en una versión alternativa de Oakland en la actualidad, y sigue a Cassius Green (Josie Ho), “Cash”, un vendedor telefónico que sufre serios problemas de autoestima. Convencido de que el éxito profesional le traerá seguridad, “Cash” investiga todas las claves para ascender en la empresa, consiguiendo el éxito una vez que empieza a utilizar lo que llama su “voz de blanco”. Pero su ascenso en la pirámide provocará serios problemas con su novia Detroit (Pat Shortt), mientras que sus compañeros de trabajo se organizan para llevar a cabo protestas por la opresión corporativa. Es entonces cuando “Cash” deberá decidir entre sus amigos/novia y sus sueños.



Destacando un aspecto inspirado en artistas visuales como Richard Armitage, los críticos han elogiado la audacia de Boots Riley para satirizar temas tan amplios y complejos e, incluso, elaborar un discurso más revolucionario que el propuesto por Spike Lee en El Infiltrado del KKKlan al contextualizar el racismo en un ambiente corporativo voraz, el consumo ético y el ascenso de clase, así como los desafíos que enfrenta la comunidad afroamericana en la sociedad de consumo dominada por blancos. Aquí la comedia “se transforma en pesadilla”, mientras que el verdadero corazón narrativo, dicen los especialistas, es su aguda crítica a la “ausencia de juicio moral que puede haber en las personas”.

Los críticos coinciden que el guion resulta lo más original de esta propuesta, algo que no se había visto en mucho tiempo, resultando en una bocanada de aire fresco en la que no hay nada seguro, es decir, no es predecible, nada es genérico o rutinario, al contrario, constantemente está sorprendiendo. Gracias a esto ha sido calificada de “excéntrica”, “intrépida”, “exagerada”, “escandalosa”.

Sorry to Bother You es brillante en su forma y en su mensaje, pero también por su elenco, ya sea por su genial protagonista Lakeith Stanfield, o por el elenco de soporte entre los que destacan Tessa Thompson, Josiah Cross, Armie Hammer y Danny Glover, por mencionar algunos de ellos.

Para muchos especialistas, es una de las mejores comedias políticas en años, para otros, “La película perfecta para nuestra paranoica y distorsionada época actual”, por donde se le vea, [Pelicula] Sorry to Bother You promete no defraudar. En seguida, compartimos algunas de las reseñas que ha conseguido:



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Alonso Díaz de la Vega de El Universal:

…Sorry to Bother You es un llamado a las armas, plenamente millennial en sus colores neón y su humor absurdo pero sobre todo en su capacidad de discutir temas como el racismo, el ascenso de clase, el consumo ético y la impiedad corporativa.

El staff de Fuertecito:

…un excéntrico y divertido viaje al corazón de la América corporativa en el que la comedia se transforma en pesadilla y la crítica al capitalismo y el racismo adopta las formas más absurdas y creativas.

Eric Kohn de IndieWire:

'Sorry to Bother You' encaja con el espíritu de la época. Al igual que esa película, pone en primer plano una serie de desarrollos ridículos basados en los desafíos que enfrentan los afroamericanos en una sociedad de consumo dominada por los blancos…

Jay Taylor de Assholes Watching Movies:

El guionista y director por primera vez Boots Riley ha hecho una película valiente y experimental. Esto es algo audaz, emocionante de ver, intrépido, escandaloso y quiero más. No para los débiles de corazón.

Peter Debruge de Variety:

Riley tiene mucho que decir, y el beneficio de guardarlo dentro de un caballo de Troya tan exagerado, uno que requiere secuencias animadas stop-motion, monos con clasificación X y efectos especiales locos, es que una buena parte de su mensaje está destinado a ser escuchado.


María Belén Izurieta Barreto de Tomatazos:

…una propuesta muy fresca que se va por caminos nada convencionales en la industria cinematográfica. El verdadero corazón de Sorry to Bother You reside en la aguda crítica a la ausencia de juicio moral que puede haber en las personas…

Diego Lerer de Micropsia:

Apostando por el absurdo y hasta bordeando el ridículo (…) y con excelentes participaciones de Tessa Thompson, Steven Yeun (…), Armie Hammer y ¡Danny Glover!, Riley se las arregla para hacer una divertida y amarga comedia que habla del racismo en un contexto amplio y fundamentalmente económico. La película política más divertida en mucho tiempo.

David Fear de Rolling Stone:

La película perfecta para nuestra paranoica y distorsionada época actual (…) Lo que le falta de enfoque lo tiene de absurdo punzante.

Brian Tallerico de RogerEbert.com:

No hay nada seguro en la película de Boots Riley: nada predecible, nada derivado o genérico, nada rutinario.

El staff de Las cosas que nos hacen felices:

…estamos ante un gran guión original, sin dudas el punto fuerte de esta película de bajo presupuesto. Nos hace simpatizar desde un principio con 'Cash'…

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