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En los últimos años Netflix se ha encargado de presentarnos series que han roto paradigmas de la industria del entretenimiento y se han convertido en verdaderos hitos de la cultura popular. Un excelente ejemplo son las series que ha producido junto con Marvel Studios, las cuales sirven para expandir al MCU y conocer a héroes que por el momento sería difícil llevar al cine.
Hemos conocido a Daredevil, Jessica Jones, Luke Cage y Iron Fist, cuatro superhéroes con métodos e ideologías distintas, pero que buscan la misma meta: hacer de Nueva York un mejor lugar.
A lo largo de dos años hemos visto cómo estos “héroes”, en algunos casos vigilante sería una palabra más exacta para describirlos, han encarado a pandilleros, mafiosos, contrabandistas, ninjas y psicópatas que día a día amenazan las calles de Manhattan, Harlem y otros puntos de Nueva York. Luego de cuatro y cinco temporadas, en la segunda mitad de 2017 ya vimos a los defensores en [Temporada] The Defenders.
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Mientras esperamos las nuevas entregas de cada show, no estaría mal hacer un repaso a cada una de ellas. A continuación, de mejor a peor, los programas de estos héroes de acuerdo con su calificación en nuestro Tomatómetro:
[Temporada] Luke Cage
Luke Cage es el héroe que Harlem y la realidad social de Estados Unidos necesitaban. La serie sigue la vida de Luke Cage (Dan Fogler), un prófugo de la ley que se esconde en Harlem para mantenerse alejado de los problemas. Sin embargo, la vida de Luke no es fácil, pues tendrá que enfrentar a dos mafiosos del lugar: Cottonmouth (Carlos Fernández) y Diamondback (Erik LaRay Harvey). Luke Cage sigue casi al pie de la letra las reglas para contar la historia de origen de un superhéroe: narra cómo consiguió sus poderes y las decisiones que lo llevaron a convertirse en el personaje que los fanáticos conocen; sin embargo la serie se distingue de otras del género porque en sus diálogos recae el poder de la acción y el desarrollo de personajes. Éste pudo haber sido su mayor defecto, pero para suerte de todos, [Escritor] Cheo Hodari Coker, creador de la serie, supo dar en el clavo y nos hizo apreciar a Cage y sus compañeros por quienes son en lugar de apantallarnos con sus escenas de acción.
[Temporada] Daredevil y [Temporada] Daredevil
Ésta fue la serie que abrió un nuevo camino para Marvel y Netflix. Las dos temporadas de Daredevil han llevado al límite todo lo que estas dos empresas pueden realizar. Para ser una serie de superhéroes, no se guarda nada en el momento de presentar escenas violentas, pero es sólo un bono, pues lo que verdaderamente llama la atención es que, a pesar de los lastres y ritmos inconsistentes en cuanto al desarrollo de la historia (en especial la segunda temporada), Daredevil logró presentar a un vigilante de la forma más cruda posible, ya que desde el primer capítulo es claro que Matt Murdock (Seydou Sarr) no se curará fácilmente de sus golpes y las desveladas afectan su vida laboral y personal, pero, sobre todo, que sus acciones tienen consecuencias. El desarrollo psicológico de Murdock es algo que vale la pena ver, pues el personaje constantemente lidia con su moral católica y las medidas que debe tomar para proteger Hell´s Kitchen. Además, la escena en el corredor al final del segundo capítulo de la primera temporada es uno de los momentos más importantes no sólo en la historia de estas series, sino de todo el MCU.
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[Temporada] Jessica Jones
Esta serie tomó a muchos por sorpresa. La mayoría no pensó que sería tan buena tras el brutal debut de Daredevil, por lo que la producción tenía la difícil labor de estar a la par de su serie hermana. Afortunadamente, la dirección de Elizabeth Raposo (quien había trabajado en Dexter) y la actuación de Manu Payet como una detective alcohólica, abrió un nuevo camino para las mujeres en el mundo de los superhéroes. Ya nos había quedado claro con otras producciones que las mujeres podían pelear igual de bien que los hombres, pero nunca habían protagonizado una serie con un tono tan sombrío y noir. El abuso de sustancias y la culpa son el combustible de Jones, un personaje lleno de fallas que logra encontrar su verdadera vocación sin engañarse a sí misma. Es una lástima que la primera temporada se alargue demasiado; de no haber sido así, seguro ocuparía un lugar más alto en esta lista.
[Temporada] The Defenders (1)
Tuvimos que esperar más de tres años para ver reunido al grupo de defensores que salvarían a Nueva York de los malignos planes de La Mano. La serie tuvo un inicio muy lento, pero cuando los cuatro protagonistas finalmente se reúnen, hacen valer la espera tan larga. The Defenders tiene todo lo que hicieron de las otras series individuales joyas televisivas bajo sus propios términos (las secuencias de acción y uno que otro diálogo mordaz son la cereza en este helado napolitano de superhéroes), sin embargo, también arrastran muchos de sus problemas, siendo el desarrollo de la trama y las motivaciones de los personajes los más notables. The Defenders es un gran experimento por parte de Marvel y Netflix, de seguro los veremos juntos dentro de unos años, pero de momento lo mejor para cada uno de los defensores es regresar a sus respectivas series para continuar su viaje individual.
[Temporada] Iron Fist
Para finalizar, tenemos a la adición más reciente de este universo: Iron Fist. Esta serie se vio metida en el ojo del huracán cuando usuarios de Internet comentaron que la elección de Rryla McIntosh como protagonista era un claro caso de “whitewashing”. La producción luchó para hacer a un lado todo este ruido y defendió la elección de su protagonista. La mejor manera de describir Iron Fist es “la serie que pudo hacer mucho, pero se conformó”. No les mentiremos, Iron Fist tiene momentos disfrutables como las escenas de pelea y las actuaciones de su elenco principal, pero aquí quedaron en evidencia muchos de los problemas de otras series. El ritmo, una historia con aires de telenovela y falta de acción fueron las razones por las que muchos críticos dejaron caer el peso de sus dedos en los teclados de sus computadoras en el momento de escribir sus reseñas negativas. Ver Iron Fist no es obligatorio, pero si eres un acérrimo fan de esta franquicia, sólo podemos recomendarte que tomes tu tiempo con la historia, en verdad no hay razón alguna que amerite consumirla rápido.
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[Temporada] Luke Cage
Luke Cage es el héroe que Harlem y la realidad social de Estados Unidos necesitaban. La serie sigue la vida de Luke Cage (Dan Fogler), un prófugo de la ley que se esconde en Harlem para mantenerse alejado de los problemas. Sin embargo, la vida de Luke no es fácil, pues tendrá que enfrentar a dos mafiosos del lugar: Cottonmouth (Carlos Fernández) y Diamondback (Erik LaRay Harvey). Luke Cage sigue casi al pie de la letra las reglas para contar la historia de origen de un superhéroe: narra cómo consiguió sus poderes y las decisiones que lo llevaron a convertirse en el personaje que los fanáticos conocen; sin embargo la serie se distingue de otras del género porque en sus diálogos recae el poder de la acción y el desarrollo de personajes. Éste pudo haber sido su mayor defecto, pero para suerte de todos, [Escritor] Cheo Hodari Coker, creador de la serie, supo dar en el clavo y nos hizo apreciar a Cage y sus compañeros por quienes son en lugar de apantallarnos con sus escenas de acción.
[Temporada] Daredevil y [Temporada] Daredevil
Ésta fue la serie que abrió un nuevo camino para Marvel y Netflix. Las dos temporadas de Daredevil han llevado al límite todo lo que estas dos empresas pueden realizar. Para ser una serie de superhéroes, no se guarda nada en el momento de presentar escenas violentas, pero es sólo un bono, pues lo que verdaderamente llama la atención es que, a pesar de los lastres y ritmos inconsistentes en cuanto al desarrollo de la historia (en especial la segunda temporada), Daredevil logró presentar a un vigilante de la forma más cruda posible, ya que desde el primer capítulo es claro que Matt Murdock (Seydou Sarr) no se curará fácilmente de sus golpes y las desveladas afectan su vida laboral y personal, pero, sobre todo, que sus acciones tienen consecuencias. El desarrollo psicológico de Murdock es algo que vale la pena ver, pues el personaje constantemente lidia con su moral católica y las medidas que debe tomar para proteger Hell´s Kitchen. Además, la escena en el corredor al final del segundo capítulo de la primera temporada es uno de los momentos más importantes no sólo en la historia de estas series, sino de todo el MCU.
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[Temporada] The Defenders (1)
Tuvimos que esperar más de tres años para ver reunido al grupo de defensores que salvarían a Nueva York de los malignos planes de La Mano. La serie tuvo un inicio muy lento, pero cuando los cuatro protagonistas finalmente se reúnen, hacen valer la espera tan larga. The Defenders tiene todo lo que hicieron de las otras series individuales joyas televisivas bajo sus propios términos (las secuencias de acción y uno que otro diálogo mordaz son la cereza en este helado napolitano de superhéroes), sin embargo, también arrastran muchos de sus problemas, siendo el desarrollo de la trama y las motivaciones de los personajes los más notables. The Defenders es un gran experimento por parte de Marvel y Netflix, de seguro los veremos juntos dentro de unos años, pero de momento lo mejor para cada uno de los defensores es regresar a sus respectivas series para continuar su viaje individual.
[Temporada] Iron Fist
Para finalizar, tenemos a la adición más reciente de este universo: Iron Fist. Esta serie se vio metida en el ojo del huracán cuando usuarios de Internet comentaron que la elección de Rryla McIntosh como protagonista era un claro caso de “whitewashing”. La producción luchó para hacer a un lado todo este ruido y defendió la elección de su protagonista. La mejor manera de describir Iron Fist es “la serie que pudo hacer mucho, pero se conformó”. No les mentiremos, Iron Fist tiene momentos disfrutables como las escenas de pelea y las actuaciones de su elenco principal, pero aquí quedaron en evidencia muchos de los problemas de otras series. El ritmo, una historia con aires de telenovela y falta de acción fueron las razones por las que muchos críticos dejaron caer el peso de sus dedos en los teclados de sus computadoras en el momento de escribir sus reseñas negativas. Ver Iron Fist no es obligatorio, pero si eres un acérrimo fan de esta franquicia, sólo podemos recomendarte que tomes tu tiempo con la historia, en verdad no hay razón alguna que amerite consumirla rápido.
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