La carrera del francés [Director] Christophe Honoré ha estado marcada por éxitos literarios y cinematográficos. Como escritor, Honoré tiene novelas para jóvenes en las que toca temas polémicos como el suicidio, el VIH o el incesto. Por otra parte, en su trayectoria fílmica destacan cintas como Mi madre, Canciones de amor, Room 212, por mencionar algunas.
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Su más reciente producción se llama Vivir Deprisa, Amar Despacio, cinta dramática dirigida y escrita por Honoré. La historia, ambientada en París en los años 90, se centra en Jacques, un escritor que está por cumplir 40 años y que desconfía que lo mejor de la vida está por llegar. Además, el personaje padece SIDA y trata de llevar con discreción su enfermedad. Su vida cambia cuando conoce a Arthur, un estudiante de 22 años, apasionado de la literatura. Pronto, ambos hombres comienzan una relación y viven un romance veraniego, antes de que cada uno retome su vida.
El filme, protagonizado por Vincent Lacoste, Denis Podalydès y Jeff Davis, estuvo nominado a la Palma de Oro en 2018, mientras que Podalydès fue nominado como mejor actor de reparto en los Premios César, y Lacoste y Deladonchamps fueron galardonados por su actuación en el Festival de Sevilla.
La crítica ha aprobado la cinta al considerar que presenta un retrato íntimo y honesto del amor y la sexualidad, a través de una historia conmovedora y vibrante. Además, los críticos reconocen el trabajo de los actores, pues presentan personajes profundos y llenos de luz. Por otra parte, destacan la forma en la que Honoré aborda la fragilidad de la vida y la mortalidad misma, de una forma honesta y real.
Asimismo, reconocen la manera en la que Honoré transforma las sórdidas circunstancias en una declaración colectiva sobre la relación entre el deseo y la comunidad, lo que hace que la película sea convincente. La cinta de casi dos horas de duración está llena de momentos entrañables, que tienen un tono nostálgico que envuelve la misma vida de los personajes. De igual manera, uno de los aspectos que más llamó la atención de los críticos fue la forma en la que el director hizo que una historia íntima se convirtiera en un tributo a la Francia de los 90, llena de arte y cultura, que están presentes a lo largo de todo el filme.
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No obstante, a pesar de la bonita y realista historia que presenta, el veredicto de la crítica no fue perfecto y hubo quienes consideraron que el filme divagaba y que carecía de una intención clara. Incluso, hubo quien mencionó que era una película irregular, pues no presentaba originalidad en los temas abordados. Asimismo, hubo quien consideró que, por momentos, la película rozaba en la banalidad, lo que hacía que perdiera la profundidad y complejidad que caracteriza los filmes de Honoré.
En seguida ofrecemos una breve selección de críticas especializadas sobre esta cinta:
Lalo Ortega en Empire México
Christophe Honoré propone un retrato íntimo y honesto del amor, la alegría y la sexualidad de cara a la conciencia de nuestra propia mortalidad. (…).
Enrique Bohórquez en PlayCam
Por momentos se siente que perdió el rumbo. A veces divaga, a veces no es clara la intención de lo que sucede. Incluso el final es ambiguo.
Pilar Roldán Usó en El Espectador Imaginario
Estamos ante una película irregular.
Jon Frosch en The Hollywood Reporter
Vibrante y conmovedora (…) Los dos actores principales hacen actuaciones luminosas y profundamente detalladas (…) La película es ágil y animada.
Eric Kohn en IndieWire
La obra más emotiva y sutil del director francés Christophe Honoré es un tributo conmovedor al arte y la cultura de la Francia de principios de los 90.
María Ahumada en 35 Milímetros
Tenemos que sentirnos afortunados de que todavía siga haciéndose cine como este, tan naturalista, tan puro y tan sentido.
Manu Yáñez en Fotogramas
Un sensible, nostálgico y pudoroso retrato de una era en la que despertar a la vida y otear su fin parecían experiencias demasiado cercanas.
Fionnuala Halligan en Screendaily
Sigue el ritmo que marca Honoré, que es algo libre, pero también decidido (…) Las secuencias se estiran hasta un punto en el que lo dramático se vuelve banal.
Peter Debruge en Variety
Un romance homosexual profundamente personal que combina las mejores cualidades de Honoré como cineasta.
Glenn Kenny en The New York Times
Tardó su tiempo en hacerme conectar con ella, pero una vez que lo consiguió, no me soltó.
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