Guillermo del Toro no quiere las felicitaciones de Peña Nieto

Guillermo del Toro se encuentra en un gran momento de su carrera. El éxito de su cinta La Forma Del Agua (92%) no sólo refleja sus capacidades como director y contador de historias, sino que pone en un mejor lugar las cintas de corte fantástico que suelen ser bastante subestimadas, especialmente en premiaciones más famosas. Después de ganar el León de Oro, muchos de los actores con los que ha trabajado, y aquellos que simplemente lo admiran, expresaron su orgullo en redes sociales. De igual manera, artistas mexicanos mandaron sus felicitaciones al compatriota, pero el director no está muy interesado en todos los aplausos que le dan ciertas personas.

En otra entrevista, del Toro ya ha hablado de la inconformidad política que lo aqueja. Por ejemplo, abiertamente habló de Trump y sus políticas racistas y antiinmigrantes, que ponen en riesgo el futuro de muchísimos jóvenes. De hecho, el director aprovechó el interés en su cinta para resaltar el hecho de que ya no se puede vivir con los mismos miedos y tendencias de la Guerra Fría (época en la que se desarrolla su historia). De igual manera, resaltó que la premisa de La Forma del Agua justamente celebra la diversidad y la apertura. Pero Trump no es la única figura política con la que el director está inconforme.

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El Universal detalló el momento en que se le preguntó a Guillermo del Toro si apreciaba que el presidente de México reconociera sus logros a lo que él respondió:

No, no me gusta cuando me felicita. No me gusta porque México es un país que ha tenido grandes personas de todo: atletas, artistas, científicos, filántropos, etc., pero no hay grandes políticos, a veces me lo pregunto: ¿cómo es posible que no nazcan diez políticos que hagan lo que se tiene que hacer, que tengan esa vocación? Un atleta mexicano va y hace lo que tiene que hacer. Si tiene que correr los 100 metros planos se prepara y lo consigue.

El director parece no querer recibir felicitaciones de alguien que considera no ha hecho ningún esfuerzo. De alguna manera, su reconocimiento se vuelve inútil porque finge estar en una posición similar a la suya, y eso simplemente no es verdad.

Del Toro fue incluso más específico en su comentario:

Me sorprende que estadísticamente no salgan políticos mexicanos capaces. Cuando me preguntas de Peña Nieto, lo cierto es que me parece absolutamente aterrador que en su función haga todo lo opuesto a lo que se supone que tiene que hacer.

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Aunque Trump se ha vuelto un personaje clave cuando se habla de los problemas de inmigración, Peña Nieto no se queda atrás en culpas, pues sus comentarios sobre ese mismo tema, la violencia y la situación entre fronteras no han sido propositivos. El cambio de humor del director fue evidente y eventualmente comentó:

Mírame cómo me pongo, hasta me baja la bilirrubina.

En estos tiempos es difícil que los artistas de cualquier ámbito no se topen en situaciones que los hagan hablar de política (ya sea que lo quieran o no). Dicho sea de paso, hay personalidades que hablan más abiertamente que otros y lo dicho por del Toro tiene más resonancia ahorita justamente por su posición en la industria.

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